Fueron unos días de varias notas relacionadas con Malvinas, no encontré posteada ésta y resalto dos cosas, la "representatividad" de una y otra organización y la mirada general del conflicto, creo que esto último no sorprende a nadie, subrayé lo más evidente de las posturas.
Discrepancias entre ex combatientes.
Hay más de 225 agrupaciones de soldados y militares que lucharon en las islas.
Cuando terminó la guerra de Malvinas, los ex combatientes empezaron a reunirse no sólo para reclamar por sus derechos, sino también para compartir experiencias y generar espacios de contención entre ellos. Actualmente, hay aproximadamente 225 agrupaciones y es la provincia de Buenos Aires la que aglutina más centros, alrededor de 90, y le sigue Corrientes con casi 30.
Carlos Amato es vicepresidente del Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas (CECIM) de La Plata que reúne, según detalla, a entre 250 y 300 soldados conscriptos que fueron enviados al conflicto bélico. Amato tenía 20 años cuando le tocó vivir la guerra durante 63 días. Para él, el CECIM fue fundamental: “Nos hablamos, contuvimos y ayudamos. Es como una familia y un núcleo muy fuerte de unión por haber padecido la guerra”, dice.
José María Maurizio, contraalmirante retirado que se desempeñó como infante de Marina y que actualmente preside la Asociación Veteranos de Guerra de Malvinas (AVEGUEMA), tenía 36 años en 1982. De acuerdo a Maurizio, que participó del desembarco del 2 de abril en las islas, la asociación nuclea a 3.000 ex combatientes: “Hay gente del Ejército, de la Fuerza Aérea, de la Marina, Prefectura, Marina Mercante, Gendarmería y también tenemos soldados, civiles”, explica.
Un informe del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para las escuelas elaborado para el 2 de abril, detalla que, de acuerdo al libro “Las guerras por Malvinas” del historiador Federico Lorenz [muy pobretón este libro, tuve la desgracia de leerlo] , de los aproximadamente 12.400 hombres que integraron las tropas argentinas en el conflicto, entre el 61 y 69 por ciento de ellos eran soldados conscriptos.
“Entre los que hacíamos el servicio militar, por más que haya diferencias, cada uno lo vivió a su manera. Pero los militares siempre reivindican el conflicto”, cuenta el vicepresidente del CECIM. A la vez, Maurizio dice: “Los que fuimos a Malvinas no lo elegimos, fueron otros. La guerra es mala, todos pierden. Lo rescatable es que pese a haber sufrido hambre, miedo y frío, hay ejemplos de fortaleza de voluntad a cambio de nada, de la decisión de luchar por lo nuestro”.
En cuanto a la utilización de la guerra por parte de la última dictadura militar como último recurso para mantenerse en el poder, Amato afirma: “Hablar de Malvinas tiene como un manto sagrado, porque no se puede decir que fue un hecho desgraciado y muchos comunicadores, políticos y personas, hablan de la gran gesta patriótica. Y fue un hecho de la dictadura, que generaron para salvarse y que nosotros padecimos”. El Presidente de AVEGUEMA prefiere distanciarse: “Eso es político. Yo era jovencito, uno puede opinar lo que le parece o lo que haya leído. Inglaterra estaba desarmando su flota y nosotros estábamos comprando submarinos, por ejemplo. Ojalá se hubiera esperado a tener más fuerza y que el otro sea más débil. Pero eso ya son cuestiones que desconozco. Estaría mal dar una opinión mía en representación de la asociación”.
Amato cuenta que las torturas y estaqueos dentro de las tropas argentinas ocurrieron “en casi todas las unidades”: “Eso se mantiene oculto, apelaron a que el paso del tiempo lavara sus culpas. La misma lógica que aplicaban con los desaparecidos, nos lo hacían a nosotros. Se supone que en una guerra estás hermanado. Pero los tipos la tenían muy arraigada, para ellos el colimba era un ser inferior, un tipo reducido a la servidumbre. Picaneaban con los teléfonos [había tres teléfonos en MLV!!! o ***** y ******** ya ofrecían un plan con picana y 200 minutos libres???] , estaqueaban. No es que nos victimizamos, eso ocurrió”. Sobre este tema, Maurizio difiere: “Lo he visto en algún diario. Si existió, yo no sé. No conozco a nadie que me lo haya contado. ¿Por qué no lo denunciaron? Que vayan a la Justicia, lo hicieron treinta años después.
No lo vi, así que no puedo opinar. Si había miedo porque se estaba saliendo de la dictadura, ¿cinco años después qué pasó? No es lo que me cuenta la gente, los soldados que hay en la asociación. Nunca, jamás. Es un tema de cada uno. Lo rescatable no es esa miseria humana, si existió, sino el valor de mucha gente”.
Se trata de dos organizaciones dentro del abanico de agrupaciones. Otra discusión que desata diferencias entre quienes fueron movilizados durante el conflicto es que actualmente, están aquellos que permanecieron en las bases militares del continente y piden ser reconocidos como ex combatientes: “Ahora cualquiera quiere serlo porque el beneficio es apreciable, pero antes nadie se calentaba. Malvinas es un gran negocio”, afirma Amato.
Fuente: Clarín por Bárbara Reinhold 16/07/2012
[entre corchetes mis valoraciones personales]
**** editado a pedido de un forista
.