El ejemplo de Malvinas es interesantes. Los británicos se apoyaron de su flota mercante, la cual les resultó fácil y rápido "militarizar". En primer lugar, porque formaba parte de su planificación cotidiana de tiempo de paz el utilizar los buques civiles para diversos usos. Muchos antes de la guerra ya tenían proyectos de como adaptar al Queen Elizabeth como transporte de tropas o al Atrantic Conveyor como porta-helicopteros.
En segundo lugar, porque esa flota militarizada era vista como un auxilio de la Armada, no como sustituto de esta. Por tanto, la militarización era mínima y sin alejar que el buque civil perdiera su naturaleza. Y, esto último, bien puede verse como una tercera característica, no se pretendía darle al buque mercante "militarizado" un uso diametralmente diferente a aquel para el cual fue diseñado.
En este marco, ferrys como los que utiliza Buquebus o cualquier buque de carga (sea portacontenedores, transporte de combustible o con capacidad ro-ro), puede ser muy útil para apoyar una operación naval de países con armadas pequeñas como la nuestra. Se pueden agregar también los remolcadores en altura y muchos otros buques. Básicamente, todos los disponibles.
En todos estos casos hay que pensar en pequeño o mínimo sistemas de autodefensa (ametralladoras, señuelos, etc.) y la capacidad de adaptarlos para auxiliar a una operación naval.
Estados Unidos también es un buen ejemplo con su experiencia de que la tripulación de estos buques mercantes fuera acompañada por pequeñas unidades de militares que facilitaran, además de la autodefensa, la correcta comunicación y complementación con las operaciones militares que se desarrollen. Lo cual también implica tener la capacidad de entrenar personal previendo esta aplicación.
Veo mucho más difícil pensar en buques civiles "militarizados" con el objeto de ser una alternativa frente a buques estrictamente militares. La única situación donde parece ser aplicable es en aguas marrones y/o en aguas verdes, donde una armada diseñada para aguas azules se encuentra más vulnerable, se acrecientan sus debilidades y minimizan sus fortalezas.
Ahora bien, por lo que se observa en los últimos años, parece que casi todas las Armadas importantes están haciendo esfuerzos para evolucionar y adaptarse a conflictos convencionales y asimétricos en aguas verdes.