En primer lugar, hay que hacer un poco de memoria.
Yo trataré de hacer mi síntesis histórica recordando que el dedicar las FF.AA. a la lucha contra el narcotráfico y otras "nuevas amenazas" fue tradicionalmente promovido por la subsecretaría para asuntos hemisféricos de la Secretaría de Estado estadounidense. Contó con mucho apoyo de la Administración Menem durante el período popularmente conocido como de "las relaciones carnales". Los ejemplos que se suelen citar es el rol de las fuerzas armadas en la mayoría de los países del caribe y Centroamérica, ciento el ejemplo más citado el de la guardia nacional de Panamá.
Aunque no se usaba el término "ya no existen hipótesis de conflictos" el concepto estaba implícito en los discursos de la época. Argentina ya no enfrentaría guerras y sus fuerzas armadas debían ser desmovilizadas y/o reorientadas a otras misiones. Una de esas otras misiones eran la participación en misiones de paz de la ONU, pero era una tarea menor presupuestariamente hablando (en la época de mayor actividad de la década de 1990 llego, si mal no recuerdo, a unos insignificantes 53 millones de dólares anuales). La otra era su reconversión hacía la lucha contra el narcotráfico y otros delitos federales, que prometían un mayor presupuesto. Se contaban entre sus defensores muchos de corrientes liberales y conservadoras, como el diario La Nación (y hoy, aparentemente, Perfil).
Aparentemente dentro de la propia fuerza existían grupos a favor de esto porque era mejor que no hacer nada, porque habría programas de estudios en Estados Unidos que les facilitaría hacer carrera militar y, al menos potencialmente, prometía recuperar influencia sobre la vida social y política interna. También parecían haber algunos melancólicos de épocas pasadas más gloriosas. Algunos creían que contribuiría a que al encontrarle un uso útil y visible a las fuerzas, se reconciliaría su relación con la sociedad civil y, de este modo, continuaría justificando su existencia como institución.
Los retractores de esa época básicamente denunciaban que esta lucha contra el narcotráfico y otras "nuevas amenazas" no eran más que la repetición discursiva de lo que se decía en las décadas de 1960 y 1970 sobre los enemigos internos producto de la penetración internacionalista y que desembocaron en la tristemente celebre Doctrina de la Seguridad Nacional. Básicamente, unas fuerzas armadas centrada en la lucha contra los enemigos internos no convencionales, perdiendo en el proceso la capacidad de enfrentar enemigos externos convencionales. En el proceso las fuerzas armadas actuaban como un partido político más. Los retractores denunciaban que este tipo de fuerzas armadas tenían armas para desfiles, pero finalmente fueron incapaces de ganar una guerra de verdad, citando como ejemplo a Malvinas.
Aparentemente dentro de la propia fuerza existían grupos igualmente detractores, incluyendo aquellos que veían que se transformaron en los chivos expiatorios de la guerra sucia mientras otros actores sociales importante quedaron indemnes y, en consecuencia, no querían volver a ver envueltas a las fuerzas armadas en cualquier lucha con impacto social interno. Parecían surgir grupos que preferían unas fuerzas armadas despolitizadas, subordinadas al poder democrático de turno y concentradas en la profesionalización. Entendiendo por esto último la capacidad de enfrentar y ganar una guerra convencional.
También están los grupos y tradiciones históricas dentro de las fuerzas armadas de un carácter más nacionalista (y hasta popular) que ven de reojo las influencia extranjera en general, y estadounidense en particular (Perón, de hecho, no salió de una burbuja de cristal). Un excentricismo que es independientemente de lo bien intencionadas que pudieran llegar a ser esas influencias.
Es imposible entender el contexto actual sin ver esa historia. Ni siquiera hay que retroceder mucho, son debates que existían en la década de 1990 durante el gobierno de la Administración Menem. Después de todo, el debate sobre la intervención de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narcotráfico esta cumpliendo unos 20 años, cuanto menos.
Mi sensación es que desde el 2003 en adelante gobiernan los "detractores" de entonces. La Administración K se se caracteriza, en lo que a esta materia se refiere, por ser crítica de la intervención de las Fuerzas Armadas en asuntos de seguridad interna. Lo han reflejado en leyes y decretos, siendo el más famoso la reglamentación de la ley de defensa nacional. Según mi entendimiento, existen sectores de las propias fuerzas armadas que también ven con buenos ojos estas políticas y sus reflejos en leyes y decretos. Es obvio que por la comunión de visiones, terminen siendo los que comandan las fuerzas actualmente.
Es muy difícil que un gobierno, cualquiera sea, modifique lo que trato de impulsar. Para mí lo que denuncia PERFIL en esta ocasión es, simplemente, mentira.
Entrando en algo más personal. También soy parte de los "detractores" así que no creo que haya que modificar la legislación actual. Tampoco creo que sea necesario ya que la misma contempla el apoyo a la comunidad, así que las Fuerzas Armadas pueden colaborar con las Fuerzas de Seguridad siempre y cuando no intervengan en la represión directa del delito. Después de todo, hecha la ley hecha la trampa.
En lo personal, hasta soy más extremo. Me gustaría que se refuerce esta política y dejar en la prefectura la represión del delito en la ZEE y que avancen los planes para una seguridad aeronáutica independiente de la FAA.
Cambiando un poco, a mí me encanta una declaración de la ex secretaria de estado estadounidense Condoliza Rice en un artículo en Foreign Policy Magazine tiempo antes de asumir su cargo. Ella dijo: "las fuerzas armadas son mortales y se supone que lo sean". Esta debiera ser en gran medida su razón de ser, aquello para lo que están diseñadas a hacer muy bien.
Esto es muy diferente a una fuerza de seguridad, donde la represión violenta es, supuestamente, el último recurso.
El problema filosófico histórico de una fuerza diseñada para ser mortal, es que tiene dificultades para controlar su violencia. Por tanto, los "daños colaterales", "abusos aislados", etc. terminan a la orden del día.
Yo creo que eso distraer a las fuerzas armadas de su razón de ser, la defensa nacional y la defensa de los intereses nacionales. La legislación vigente no deja excusas respecto a que el país debe mejorar sus capacidades para enfrentar un ataque tradicional de una potencia extranjera. El problema, para mí, es que no lo a acompañado del presupuesto necesario.
Algo que también ha sostenido este gobierno, como varios anteriores, es la reconciliación entre las fuerzas armadas y la sociedad civil. Quiero ver que pasa pero me parece que este refuerzo de la idea de poner a las fuerzas armadas a "apoyar a la comunidad" se enmarca dentro de esto. Quizás también en el reconocimiento de que es la única organización estatal con capacidades ante desastres naturales y humanos. No descartaría, por tanto, un crecimiento del apoyo de las fuerzas armadas a las fuerzas de seguridad en todo aquello que las Fuerzas Armadas puedan aportar capacidades, sin inmiscuirse directamente en la represión del delito.
Yo lo veo bien si ese aporte de capacidades también contribuye a mejorar las mismas en el sentido de ser funcionales a las obligaciones primarias de las Fuerzas armadas, es decir, la defensa nacional ante una agresión estatal extranjera. Por ejemplo, la radarización es una tecnología dual que no sólo contribuye a mejorar el control del espacio aéreo no sólo para mejorar la navegación aérea civil y contribuir a la lucha contra los vuelos ilegales, sino también a mejorar la capacidad de la defensa nacional en caso de un conflicto.
Excelente reflexion Enrique !
muy por encima del nivel a que a veces llega la discusión en este topico.
Gracias por levantar el nivel.
personalmente no coincido con el ultimo parrafo (despues de "del presupuesto necesario"), pero es una opinión y tus observaciones merecen leerse mas de una ves, al menos para plantearse el tema seriamente, sea que uno está de acuerdo o no.
--- merged: 10 Jul 2013 a las 23:56 ---
Una pregunta....Milani tiene un perfil mas "Chavista", o va mas por Seineldín?
saludos
perdon?
que seria "ser chavista" o ser "seineldin" ?
y por que tendria que ser una cosa u otra?