Fuerza de Paz Combinada Cruz del Sur
Concluyó el primer ejercicio del componente naval
3-12-2013 | Se desarrolló en aguas del Canal Beagle.
Ushuaia – Ayer al mediodía finalizó el ejercicio Cruz del Sur I en el que participaron unidades de las Armadas de Argentina y Chile, como componente naval de la Fuerza de Paz Conjunta Combinada Cruz del Sur.
Por parte de la Armada Argentina se desplegó la corbeta ARA “Gómez Roca” y el aviso ARA “Teniente Olivieri”, mientras que por la Armada de Chile hizo lo propio el OPV “Piloto Pardo”. En apoyo de esas unidades, se sumaron la corbeta ARA “Spiro”, la lancha rápida ARA “Intrépida”y las lanchas patrulleras ARA “Baradero” y ARA “Barranqueras”.
Las actividades se desarrollaron con la novedad de ser la primera ocasión en que esta fuerza de paz binacional, inédita en su tipo, despliega su componente naval. Se estructuró en un primer módulo consistente en comprobar la interoperatividad básica entre ambas fuerzas, que se desarrolló mientras las unidades se dirigían desde Punta Arenas a Ushuaia. Los dos módulos restantes se orientaron a la demostración de las capacidades y una comprobación final de las acciones realizadas en aguas del Canal Beagle y la Bahía Ushuaia.
El comandante de la corbeta ARA “Gómez Roca”, el capitán de fragata Rodrigo Martín Arriegues se mostró satisfecho al cierre de las actividades. “Cubrimos todos los objetivos. Hemos comprobado que podemos operar de manera fluida y sin ningún tipo de inconvenientes entre ambas Armadas. Esto quedó demostrado por ejemplo, en la interoperabilidad entre la aeronave chilena con nuestra cubierta de vuelo. Me queda un saldo muy satisfactorio y una excelente relación de amistad con la dotación del “Piloto Pardo”.
Por parte de ambos países, asistieron miembros de los ministerios de Defensa, de los Estados Mayores de las Fuerzas Armadas, de la Fuerza de Paz Conjunta Combinada y de la Zona Naval Austral y Tercera Zona Naval, quienes presenciaron las actividades a bordo de las corbetas “Gómez Roca” y “Spiro”.
El jefe del Estado Mayor General de la Armada Argentina, contralmirante Gastón Fernando Erice, expresó: “este ejercicio nos deja mucho más de lo esperado gracias al nivel de integración que hemos alcanzado. Resta poder llevar todo este conocimiento y experiencia a una misión de paz efectiva, para así demostrarle al mundo lo que dos países hermanos pueden lograr. Quiero felicitar al personal de Argentina y Chile por el nivel de integración mostrado, que año a año aumenta notablemente con este tipo de ejercicios”.
Por su parte, el contralmirante Srur aseguró que los medios argentinos y chilenos “han demostrado que están en capacidad de trabajar juntos en apoyo a los requerimientos de la Organización de las Naciones Unidas”.
Por parte del Estado Mayor Conjunto Combinado Cruz del Sur, su jefe –coronel Ubaldo Juárez– aseguró que “es realmente un anhelo cumplido ver la materialización de este ejercicio que se bosquejó a principios del 2012 y que hoy llega a su punto culminante con su desarrollo efectivo. Esta fuerza nacida en el año 2005 es el fiel reflejo de la integración que existe entre el pueblo argentino y chileno, en todos sus niveles. El hito más importante que nos deja este largo camino de amistad es la confianza mutua existente entre ambos países y ambas Armadas.”
Por su parte, el coronel Luis Hernández Loyola, del ejército de Chile, manifestó: “Pudimos comprobar que las directivas que se entregaron en su momento para la preparación de esta fuerza, han sido ejecutadas tanto en Chile como en Argentina, con una total homogeneidad.”
Las actividades
Durante lunes y martes se realizaron ejercicios de traslado de heridos con embarcaciones menores y por vía aérea y acciones de Visita, Registro y Captura (VRC) por grupos pertenecientes a ambas Armadas.
La primera actividad incluyó un movimiento desde la corbeta “Gómez Roca” hacia el aviso “Teniente Olivieri” y posteriormente, desde el OPV “Piloto Pardo” de la Armada de Chile; hicieron lo propio por vía aérea con descenso por rappel sobre la cubierta de vuelo de la corbeta argentina.
Durante la jornada final, se incorporaron distintas “incidencias” de las que los comandantes de las unidades fueron tomando conocimiento mediante sobres cerrados que debieron ser abiertos en horarios prefijados y marcaron el rumbo de las acciones. De esta manera, se procedió a la visita y registro a un buque y a partir de la situación irregular de la unidad inspeccionada, se desplegó un segundo grupo para cumplir con la captura del mismo para su traslado a puerto.
El jefe de la dotación de Visita, Registro y Captura, teniente de navío Augusto Lizondo, explicó que la VRC está compuesta por hombres y mujeres de la unidad, que por medio de un curso que se realiza en la Escuela de Técnicas y Tácticas Navales, se preparan para visitar e inspeccionar otras unidades. “El personal se compone de distintas especialidades, lo que permite que en caso que el buque inspeccionado sea apresado, la misma esté en condiciones de operar los sistemas para tomar el control de la unidad y llevarla a puerto”.
Evaluación constante
A bordo de las unidades desplegadas las autoridades realizaron tareas de observación que permitirán la producción de conclusiones posteriores a la finalización del ejercicio.
Como integrante del Estado Mayor de la Fuerza Cruz del Sur, el capitán de fragata Gustavo Lioi Pombo, expresó: “hoy pudimos apreciar que el componente naval ha logrado un ensamble ideal en las tareas y que es una realidad la posibilidad que ambos países puedan operar de forma conjunta en una misión de paz”.
Por su parte, el teniente coronel Juan José López Demouth, del Ejército de Chile, manifestó que el ejercicio “ha demostrado la sinergia evidenciada por dos pueblos hermanos que se pusieron como objetivo trabajar por un mismo objetivo en forma conjunta”.