Incidente de un avión de Ryanair en el aeropuerto de Alicante
Un Boeing 737 de la compañía de bajo coste se ve obligado a abortar el despegue tras detectar un problema con una de las puertas
Un avión de la compañía de bajo coste irlandesa
Ryanair se vio obligado en la noche de ayer a abortar una maniobra de despegue en el aeropuerto de Alicante. Un Boeing 737-800, que se dirigía al aeropuerto de Bruselas Charleroi (Bélgica) con 174 pasajeros, se encontraba acelerando para ganar altura cuando
la tripulación recibió la notificación de una incidencia con una de las puertas situadas en la parte superior del ala.
Uno de los pasajeros aseguró, según recoge
The Aviation Herald, que se produjo un «ruido sospechoso», que fue inmediatamente seguido por la activación de los frenos del aparato. El B737 se estacionó de nuevo en el aeropuerto alicantino, mientras que un avión de reemplazo partió desde Charleroi con ingenieros y el material preciso para la reparación de la puerta, según informó la propia compañía.
El pasajero consultado por The Aviation Herald aseguró al poco tiempo de llegar al aeropuerto de la capital belga, con un retraso de casi 7 horas, que la compañía envío un e-mail en el que indicaba que no se responsabilizaba de las «circunstancias extraordinarias» a las que se debió este incidente.
La compañía aérea envío un comunicado a ABC para aclarar lo sucedido: «El comandante del vuelo abortó la maniobra de despegue cuando uno de los indicadores del panel de control del aparato indicó un posible problema en una de las salidas situadas a la altura del ala. La aeronave retornó al punto de aparcamiento donde los pasajeros fueron desembarcados del avión al mismo tiempo que se les ofreció vales para refrescos. Dado que en esos momentos Ryanair no disponía de la pieza de repuesto necesaria para solventar el problema, una aeronave de repuesto y un grupo de ingenieros con las correspondientes piezas de recambio fueron enviados desde el aeropuerto de Bruselas Charleroi. Un ingeniero de Ryanair solucionó el problema a su llegada y el avión pudo ser puesto nuevamente en servicio. Ryanair pide sus más sinceras disculpas a todos los pasajeros afectados».
El pasado mes de diciembre se conoció que Ryanair tiene pendiente de abonar 891.612 euros por sanciones impuestas desde el ejercicio de 2007, como figura en la documentación aportada al Juzgado de Primera Instancia nº88 de Madrid el pasado 28 de octubre de 2013, información que fue requerida por el juzgado a la
Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA). Ya ha abonado 689.531 euros, de un importe total de 1,58 millones de euros en sanciones impuestas desde entonces hasta octubre de este año, según la información recabada a raíz de los expedientes abiertos a la «low cost» irlandesa.
abc.es