Tras 47 años, Japón anula el veto para la exportación de armamento con el objetivo de fortalecer su industria de Defensa
Miércoles 02 de Abril de 2014 11:41
(defensa.com)
El gobierno nipón ha aprobado una nueva normativa por la que pone punto y final a su política de restricciones en la venta de armamento, vigente en el país desde 1967 y que abre una etapa para el refuerzo de la industria armamentística japonesa.
La nueva medida ha sido aprobada por el ejecutivo liderado por Shinzo Abe después de que durante el último año advirtiera en numerosas ocasiones de su interés por levantar estas restricciones, que se adoptaron en base al rumbo pacifista que adquirió el país tras el final de la Segunda Guerra Mundial.
Así, según la nueva normativa, Japón podrá exportar armamento a cualquier país salvo que éste se encuentre inmerso en algún tipo de conflicto o que esté sometido a ciertas sanciones por el Consejo de Seguridad de la ONU, como pueden ser Irán o Corea del Norte. Además, Tokio también ha especificado que habrá un estricto control y transparencia en las ventas para evitar que estas armas puedan caer en manos de grupos terroristas.
Según fuentes citadas por la agencia Reuters, Japón podría estar interesado en potenciar las ventas de barcos patrulla o detectores de minas, evitando centrarse en la transacción de tanques o aviones de combate.
Esta nueva política favorecerá el impulso de potentes compañías como Mitsubishi Heavy Industries o Kawasaki Heavy Industries, que se han visto lastradas por la disminución en gasto militar que ha llevado a cabo Tokio en los últimos años y que ahora tendrían en el emergente mercado asiático su principal objetivo.
Además, Japón también descubre un nuevo abanico de posibilidades para poder llevar a cabo nuevos proyectos de cooperación, desarrollo y producción de armamento con otros países.
De esta manera, uno de los primeros grandes contratos que podrían cerrarse sería el de la venta de 15 aviones anfibios US-2i a India, que podrían estar valorados en 1.650 millones de dólares. La fabricación de las aeronaves, que tienen un coste unitario de unos 110 millones de dólares, correría a cargo de la compañía ShinMaywa Industries.
La nueva medida ya ha suscitado el recelo de China, que en numerosas ocasiones ha criticado que el levantamiento a estas restricciones podrían suponer un peligro para la seguridad y el incremento de la tensión en el este de Asia. Esta región se ha confirmado como uno de los focos de mayor preocupación a nivel mundial, sobre todo por el contencioso que ambos países mantienen por las islas Senkaku, que actualmente pertenecen a Japón pero que Pekín reclama por motivos históricos.
(J.Martínez)
Miércoles 02 de Abril de 2014 11:41
(defensa.com)
El gobierno nipón ha aprobado una nueva normativa por la que pone punto y final a su política de restricciones en la venta de armamento, vigente en el país desde 1967 y que abre una etapa para el refuerzo de la industria armamentística japonesa.
La nueva medida ha sido aprobada por el ejecutivo liderado por Shinzo Abe después de que durante el último año advirtiera en numerosas ocasiones de su interés por levantar estas restricciones, que se adoptaron en base al rumbo pacifista que adquirió el país tras el final de la Segunda Guerra Mundial.
Así, según la nueva normativa, Japón podrá exportar armamento a cualquier país salvo que éste se encuentre inmerso en algún tipo de conflicto o que esté sometido a ciertas sanciones por el Consejo de Seguridad de la ONU, como pueden ser Irán o Corea del Norte. Además, Tokio también ha especificado que habrá un estricto control y transparencia en las ventas para evitar que estas armas puedan caer en manos de grupos terroristas.
Según fuentes citadas por la agencia Reuters, Japón podría estar interesado en potenciar las ventas de barcos patrulla o detectores de minas, evitando centrarse en la transacción de tanques o aviones de combate.
Esta nueva política favorecerá el impulso de potentes compañías como Mitsubishi Heavy Industries o Kawasaki Heavy Industries, que se han visto lastradas por la disminución en gasto militar que ha llevado a cabo Tokio en los últimos años y que ahora tendrían en el emergente mercado asiático su principal objetivo.
Además, Japón también descubre un nuevo abanico de posibilidades para poder llevar a cabo nuevos proyectos de cooperación, desarrollo y producción de armamento con otros países.
De esta manera, uno de los primeros grandes contratos que podrían cerrarse sería el de la venta de 15 aviones anfibios US-2i a India, que podrían estar valorados en 1.650 millones de dólares. La fabricación de las aeronaves, que tienen un coste unitario de unos 110 millones de dólares, correría a cargo de la compañía ShinMaywa Industries.
La nueva medida ya ha suscitado el recelo de China, que en numerosas ocasiones ha criticado que el levantamiento a estas restricciones podrían suponer un peligro para la seguridad y el incremento de la tensión en el este de Asia. Esta región se ha confirmado como uno de los focos de mayor preocupación a nivel mundial, sobre todo por el contencioso que ambos países mantienen por las islas Senkaku, que actualmente pertenecen a Japón pero que Pekín reclama por motivos históricos.
(J.Martínez)