Banco para motores Atar en Espora.
Aquí necesariamente hay que hacer varias claraciones.
Cuando se compraron los SUE, algo ya había en mente sobre Malvinas porque la órden superior fue muy clara:
“Hacer todo lo necesario para que los Super Étendard pudieran volar sin restricciones desde su llegada al país el 1.º de noviembre de 1981”
Así se consiguió documentación técnica que muy dificilmente Dassault entregaba, se construyó un banco de pruebas de punto fijo para el Atar 8K -50, sin el cual una vez que cada motor hubiera consumido 100 hrs. habria que retirarlo del avión y enviarlo a Francia.
También se construyó un banco de prueba y calibración para los sistemas electrónicos del avión (que aparece en la primera foto arriba a la izquierda) como así también el sistema de procesamiento de oxígeno gaseoso (segunda foto a la derecha) y en cuanto a repuestos y partes se adquirió un tercio adicional de lo requerido normalmente para asegurar el mantenimiento de las aeronaves.
O sea que todo éste equipamiento respondía a un objetivo bien claro que era que los SUE pudieran operar por mucho tiempo de modo totalmente independientemente de Francia. Que el Cabo de Hornos embarcara 735 cajones con más de 6.000 items de partes, repuestos y componentes era un clarísimo indicio que algo se avecinaba y que la Armada buscaba que el SUE pudiera seguir operando ante algún posible veto o embargo.
Oficialmente el costo de los 14 SUE fue de unos 160 millones de dólares, pero se desconoce cuánto dinero se invirtió en todo el equipamiento adicional más el "sobre-stock" de partes y repuestos.
Resumiendo fue una compra con un objetivo claro a corto plazo, con una disponibilidad de fondos desconocida que permitió muchos "favores y cesiones" que Dassault no acostumbraba a hacer.