Puede encontrar información en las memorías de Churchill.
Por varios motivos, al Reino Unido le convenía que Argentina se mantuviera neutral y presiono para que se mantenga así.
No fue una neutralidad ”indiferente”, sino que era claramente “preferencial”. Argentina fue uno de los más importantes proveedores del Reino Unido y mantener el flujo de materias era considerado esencial para el esfuerzo bélico británico.
De hecho, como el Reino Unido no podía pagar todo lo que Argentina le enviaba, acumulando una gigantesca deuda pública a favor de Argentina (entre varios otros países).
Negociación de la deuda que tendría un capítulo interesante en la posguerra.
En realidad al Reino Unido no le costaba mucho conseguir que Argentina se mantuviera neutral. Muchas décadas de un vinculo especial lo facilitaba.
Estados Unidos tenía mucho más difícil presionar al gobierno argentino para que entrara en la guerra. Argentina y Estados Unidos tenían una relación tensa desde finales del siglo XIX.
De hecho, Argentina mantenía desde la entreguerra más vínculos con Alemania que con Estados Unidos y eso dificultaba aún más cualquier movimiento destinado a sumarse al esfuerzo bélico de los Aliados.
Reino Unido también sabía eso y prefería la neutralidad a que Argentina se viera obligada a optar por el bando contrario.
De todas maneras hay unas frases de Churchill en donde aclara que después de un apoyo de Argentina disimulado de Argentina a Alemania, comento que a toda costa se deberia impedir que Argentina se transformase en el 4to Reich
En
una, se ve una imagen del ex mandatario británico de fondo, con una leyenda que dice:
“No dejen que la Argentina se convierta en potencia. Arrastrará tras ella a toda América Latina
La segunda publicación también incluye el siguiente texto, según habría dicho el ex mandatario británico:
“La estrategia es debilitar y corromper por dentro a la Argentina, destruir sus industrias, sus fuerzas armadas, fomentar divisiones internas apoyando a bandos de derecha e izquierda, atacar su cultura en todos los medios, imponer dirigentes políticos que respondan a nuestro Imperio. Esto se logrará gracias a la apatía de su pueblo y a una democracia controlable, donde sus representantes levantaran sus manos en masa en servil sumisión. Hay que humillar a la Argentina”.
Sí enviaron una frase pronunciada por Churchill el 2 de agosto de 1944 ante la Cámara de los Comunes -la Cámara baja del Parlamento británico-: “
Sentimos profunda pena y gran angustia, como amigos de Argentina, que en estos tiempos de prueba para las naciones ella no ha considerado oportuno tomar su lugar sin reserva o calificación del lado de la libertad, y
ha elegido aliarse con el mal, y no solo con el mal, sino con el lado perdedor. Confío en que mis comentarios serán tenidos en cuenta, porque esta es una guerra muy seria”.
La frase dicha por Churchill encuentra su explicación en la
neutralidad que la Argentina mantenía en ese momento frente al conflicto de la Segunda Guerra Mundial. Sólo en marzo de 1945, ya durante la dictadura de Edelmiro Farrell, el país se pronunció oficialmente en contra del Eje -alianza principalmente conformada por Alemania, Japón e Italia- después de años de mantener una posición neutral frente al conflicto que comenzó en septiembre de 1939.
Historia.