Joaquín Oytabén nació el 10 de mayo de 1881 en Vigo, Pontevedra (España). El 8 de febrero de 1901 le fue concedida la ciudadanía argentina y en abril del mismo año ingresó a la Escuela de Aprendices Artilleros. Egresado de allí, prestó servicios en distintas unidades.
Entusiasta del vuelo mecánico, radicado en La Plata y revistando por el Arsenal del Río de la Plata (entonces Base Naval Río Santiago), al regreso del 11º viaje de instrucción de la fragata ARA “Sarmiento”, en 1911, se vinculó a un grupo que volaba en la ciudad.
En respuesta a una solicitud suya, fue autorizado a seguir un curso de aviación sin perjuicio de atender sus obligaciones en el Arsenal del Río de la Plata y costeándose personalmente los gastos de enseñanza. Es así que se inscribió en la escuela del ingeniero civil Antonio Guido Borello, en la localidad de Berisso (La Plata). Al promediar 1914 ya volaba solo.
Inscrito en la Escuela del Ingeniero Borello, realiza su primer vuelo como alumno de aquel a fines de enero de 1914
El 25 de mayo de 1914, solicitó permiso para sobrevolar el Arsenal del Río de la Plata con un Farman; pero al hacer unas pasadas por sobre el crucero acorazado “General Belgrano”, fondeado en las inmediaciones del Arsenal, se precipitó sobre el buque y destrozó el avión.
Oytabén resultó milagrosamente ileso, y como el Farman pertenecía a la escuela de Borello, fue llevado a los Talleres Generales del Arsenal del Río de La Plata, cuyo director autorizó su reparación. La tarea estuvo a cargo del Suboficial Mayor Aeronáutico Guillermo Covas y el mecánico armenio Hiram Miram Jaian, quienes se iniciaron así en la Aviación Naval.
Mientras tanto, y a fin de aliviar la situación de la escuela, Oytabén adquirió a Edmundo Marichal un biplano similar al anterior. El 12 de septiembre de 1914 rindió examen de vuelo ante el Aeroclub Argentino en su propio avión, obteniendo el Brevet Internacional N° 57 extendido en Buenos Aires el 15 de noviembre de 1914.
El avión Farman del Condestable Oytabén (en el puesto de piloto), aparecen además los Capitanes Servando Cardozo, Vicente E. Montes y el entonces Carpintero de Segunda Guillermo Covas. Circa septiembre 1914.
De esta forma se convirtió oficialmente en piloto aviador y en instructor de vuelo. La actividad volvió entonces a la escuela de Borello, pero no mucho tiempo después, en momentos en que Borello realizaba un vuelo sobre la localidad de Magdalena, sufrió una caída sin consecuencias personales, pero el Farman comprado por Oytabén quedó destruido.
Borello decidió abandonar definitivamente la escuela y el vuelo, quedando la Escuela de Berisso –con el permiso de sus superiores– a cargo de Oytabén, con ayuda del Arsenal de Marina de Río Santiago.
El biplano Farman fue reparado y en la escuela se instruían varios alumnos que ya volaban solos. El Arsenal de Marina había creado en sus dependencias una sección de carpintería y entelado para aviones; la parte mecánica de motores, en cambio, era realizada en talleres del mismo instituto, en Zárate.
Este hecho generó el ofrecimiento de Oytabén a la Armada de instruir al personal militar que ésta designara para ese fin, el que fue aceptado y oficializado por resolución del Ministro de Marina, Almirante Juan Pablo Sáenz Valiente, con fecha 19 de abril de 1915.
Por Orden del Día N° 126 del 9 de junio quedó destinado a trabajos de aviación y autorizado para realizar el aprendizaje de vuelo, el siguiente personal: Condestable Artillero Instructor de 1° Clase Joaquín Oytabén, Suboficial Maquinista de 2° Clase Jacinto Riera, Mecánico Electricista Principal José Ángel Pennachi, Mecánico Electricista de 1° Clase Luis J. Carlini, Contramaestre de 2° Clase Gregorio Foppiano, Mecánico Maquinista de 2° Clase Juan Guerin y Carpintero de 2° Clase Guillermo Covas.
Por resolución del mismo día, fue dispuesto el pase del Teniente de Fragata Raúl Moreno a la indicada Sección Armamento, quien se hizo cargo de todo el personal mencionado anteriormente. Contagiado del deseo de volar del personal de la Escuela, se incorporó como alumno.
Fue tan grande la consagración del Condestable Oytabén a la enseñanza del vuelo a sus camaradas, que en poco tiempo todos los alumnos volaban solos y se ejercitaban en la realización de las pruebas exigidas en los exámenes.
El 16 de octubre de 1915 en el Campo Esquivel, el Contramaestre de 2° Foppiano lo alertó contra corrientes de aire. Oytabén despegó solo; mientras hacía varias pasadas sobre el hangar, el Farman atravesó un remolino de aire. Según relatos, el biplano, prácticamente invertido, se partió en el aire. El piloto, al ser despedido del avión y sin paracaídas, falleció al caer desde 250 metros de altura.
La muerte de Oytabén, a los 34 años, repercutió dolorosa y hondamente en la Armada y en los círculos aeronáuticos del país. Sus restos mortales fueron velados en el Círculo de Oficiales de Mar y despedidos por altos jefes de la Marina, dirigentes de instituciones de aviación, aviadores y amigos.
El Condestable Oytabén fue el primer instructor de vuelo de la Armada Argentina. A raíz de su deceso, los alumnos de la escuela se desperdigaron y cerró sus puertas.
En su memoria llevó su nombre el primer hangar construido en el Parque y Escuela de Aerostación y Aviación de Fuerte Barragán. Como otro de los homenajes, por Ley provincial Nº 4852 se designó con su nombre al aeródromo de la ciudad de Las Flores (provincia de Buenos Aires); en tanto que por Ley 2578 del 29 de noviembre de 1956 se lo reconoció como “Fundador de la Aviación Naval”.
En 1970, por Ley 18.559, se le otorgó el título de “Precursor de la Aeronáutica Argentina”, por haber contribuido con su esfuerzo a consolidar e impulsar la entonces incipiente Aeronáutica Nacional mediante su actuación como alumno y aviador, y como personal técnico que posibilitó la operación aérea y realizó además tareas a bordo, participando de los mismos riesgos derivados de la actividad de vuelo.
Como permanente homenaje a su memoria, el Hangar Tecnológico del Museo de la Aviación Naval Argentina lleva su nombre.
Fuente: Museo de la Aviación Naval.
Créditos: Gaceta Marinera Digital