Una cosa son cambios de política en cada repartición (lo cual en muchos casos viene acompañado por la creación de alguna dependencia específica), y otra es repartir fondos a diestra y siniestra, sin resultados a la vista.
Se le metió la cuestión de género a absolutamente todo, y no encontré ninguna fundamentación que muestre cómo eso va a hacer que cambien radicalmente las cifras de violencia, por caso. Respecto del asesinato entre integrantes de la FAA, justamente Biguá explicó el largo trabajo que se viene haciendo internamente para trabajar sobre las relaciones de género en la institución. Me permitiría decir que ello no dejó a ningún avión en tierra.
El problema de la sobreactuación es la cantidad de recursos que implica (en un país sumido en la pobreza), y resultados como este:
Para no irme más fuera del tópico, por más FONDEF que haya la manta es corta. Si se pone toda la plata en un tarro, en el de al lado no queda casi nada.