Creo qué hay un poco de mito con lo de los drones “comerciales”.
Si son drones 100% comerciales, de los que cualquiera puede comprar en cualquier tienda de internet, entonces utiliza GPS civil y radiocontrol civil. Lo cual es impreciso y, supuestamente, muy fáciles de neutralizar con sistemas de guerra electrónica básicos.
Para tener utilidad militar no solo hay que montarles alguna forma de bomba, sino que también necesitan un sistema de comunicación mas resistente a interferencias y un GPS igualmente resistentes a interferencias.
La bomba de por sí, incluso la más pequeña, ya nos habla de un dron “profesional”, cuanto menos, porque los drones mas populares no podrían levantarse del suelo.
Así que, me parece, se trata de drones “profesionales” y militarizados. Es decir, lo que forma parte del mundo MILCOST, si no me falla la memoria de las siglas.
Profesionales porque tienen que tener la capacidad de levantar vuelo y tener una razonable autonomía con el peso extra.
Militarizados porque probablemente tengan integrados sistemas de comunicación militares y, apostaría, GPS militar.
No serían civiles puros.
Me parece que eso lleva a un par de reflexiones adicionales. En primer lugar ¿quien proporciona los componentes militares de estos drones civiles militarizados? ¿Donde ensamblan estos drones?
por otro lado ¿cómo defenderse de estos drones? Aquí planteaban especiales preocupaciones por la infantería.
me parece que se necesitan cuanto menos cuatro cosas.
La primera, contramedidas electrónicas. Imagino que los pelotones de comunicaciones de cada batallón pueden evolucionar e incorporar la guerra electrónica también. Quizás, esto podría llegar a ser tan péqueño como que el operador de la radio de un escuadrón también pueda interferir a los drones más pequeños y cercanos a dicho escuadrón. Aunque me parece más realista algo más a nivel de batalllones.
la segunda, la Armas duales antiaéreas. La tradicional concentración del fuego de fusiles y ametralladoras no parece suficiente.
Pero la tecnología adecuada existe desde hace décadas: el cañón automático típico de la mayoría de los vehículos de combate de infantería.
Claramente, hay avances en esa materia y, me parece, cada vez más unidades se tendrán que mecanizar o motorizar con vehículos armados con este tipo de cañones y sus subsistiemas de cámaras y computadoras asociados ( incluso los nuevos L-ATV pueden).
Tercero, radar. Imagino que cada batallón necesitará su propio radar orgánico para detectar estas amenazas. Los sistemas de guerra electrónica podrían detectar algunas de estas amenazas, pero probablemente se necesiten de radares también.
Finalmente, plantearse la necesidad de incorporar secciones, pelotones y/o baterías antiaéreas especializadas.
En este sentido, parece interesante que el US.Army estaría incorporando una sección stinger de dos personas por compañía.
Los suecos llevan décadas con una sub-batería de artillería antiaérea orgánica en cada uno de sus batallones mecanizados.
Quizás, las dos cosas sean necesarias. Porque un grupo de artillería antiaérea a nivel de brigada parece ser insuficiente.