Los M-5P llegaron a Tandil el 4 de junio, tripulado por los pilotos peruanos tras la escala en Jujuy, ya que casi todos los pilotos (salvo uno) estaban desplegados en el sur. Inmediatamente todos los pilotos peruanos se ofrecieron para ir a combatir al sur, lo que obviamente no fue aceptado dado a las implicancias que esto hubiese significado.
El primer vuelo de un M-5P en manos de un piloto argentino, fue el 14 de junio, con el unico piloto que había en Tandil, y unico que no particip{o del conflicto.
Respecto a los misiles, después del conflicto se hicieron varios disparos, pero no terminaron de convencer a los pilotos, ya que en el momento de guiar al misil, quedaban totalmente expuestos al enemigo. Posteriormente serían devueltos al Perú, quedando solo un par que aparecían en los dispaly de armamento cuando se realizaba alguna exposición. Posteriormente algunos componentes tuvieron que ser destruidos al vencerse, aunque actualmente se conserva parte de las carcazas.