Posición española en EADS
"Si Zapatero y Joan Clos no aceleran, España puede verse relegada a ser un mero convidado de piedra en el consorcio aeronáutico europeo EADS, propietario del 80% de Airbus, la única compañía constructora capaz de enfrentarse al monstruo norteamericano Boeing.
La falta de una decisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la descoordinación entre los ministerios de Industria, Economía y Defensa tienen parado el aumento de la participación española de un 5% al 10% en el gran proyecto de aviación y defensa espacial de Europa.
Hace año y medio que el Gobierno de Zapatero tiene encima de la mesa la apuesta por aumentar la presencia en EADS. Pero las diferencias de criterio entre los tres ministerios implicados han ido retrasando la decisión, que debía tomarse en la Moncloa, según fuentes próximas al Ejecutivo.
De hecho, Zapatero, en las cumbres con Chirac y Merkel, les anunció el interés de España por mantener una presencia en uno de los pocos consorcios europeos empresariales de calado y que mantiene como proyecto estrella la construcción del Airbus A-380, el avión de pasajeros más grande del mundo.
Un proyecto lleno de dificultades. Las entregas del A-380 están sufriendo, de nuevo, serios retrasos, tal y como reconocía esta semana la compañía. Hace tres meses, una noticia similar produjo el desplome bursátil de las acciones. En marzo cotizaban a 34 euros y a principios de septiembre llegaron a los 22 euros.
La indecisión del Gobierno de Zapatero se debe, por un lado, a los criterios del equipo del vicepresidente económico, Pedro Solbes, que considera que el incremento de la participación española en EADS se debe hacer con capital privado y no aumentando el de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI), que controla el 5% ahora. Por otra parte está la posición del anterior equipo de Industria (con José Montilla de ministro), que aparcó el asunto a la espera de que decida la Moncloa. Y por último, el Ministerio de Defensa, que por motivos similares, se ha mantenido a la expectativa.
¿Quién pone el dinero?
Pese a este contexto, hace meses que desde medios próximos a la SEPI se realizaron "vagas aproximaciones" a algunas cajas y bancos, además de sondear a algunas grandes empresas, para sondear la posibilidad de formar un grupo que aportara entre 800 y 1.000 millones de euros. Es lo que costaría pasar del 5% al 10%. Pero la idea nunca se concretó por falta de impulso gubernamental.
Si se da prisa, Clos puede resolver la situación. Según fuentes próximas a los socialistas catalanes, el titular de Industria tiene el asunto EADS entre las prioridades de su cartera. El ministro podría reforzar los criterios de Juan Manuel Eguiagaray, consejero de la SEPI en EADS, confirmando --esta vez en serio-- los contactos con cajas, bancos y empresas como Indra o Acciona. Las cajas implicadas serían las de Andalucía, Castilla-La Mancha o Madrid.
Clos y Eguiagaray manejan la idea de aprovechar la situación de Airbus, donde el 80% es de EADS (Francia, Alemania y España) y el 20% de British Aerospace (BAE). Hace meses que los ingleses anunciaron su intención de vender su 20% en Airbus (unos 2.750 millones de euros), para marcharse con la norteamericana Boeing, el enemigo histórico del grupo europeo.
Llegan los rusos
Aunque las aspiraciones españolas son más discretas (pasar del 5% al 10%), no se pueden olvidar las pretensiones de Alemania (que tiene participación privada con Daimler-Chrysler) y Francia (que reparte su capital al 50% entre el Estado y el grupo empresarial Lagardère). Y la llegada de los rusos.
Desde el pasado día 30, el Banco de Comercio Exterior de Rusia, Vneshtorgbank (VTB), controla el 5% de las acciones (una inversión de unos 780 millones de euros), lo que sitúa a Rusia al nivel de la partipación de España.
Hoy, en la cumbre de Compiégne (Francia), el presidente Vladimir Putin propondrá a Chirac y Merkel reforzar su posición dentro de EADS. Putin quiere representación en el consejo y se presenta como el salvador del proyecto Airbus 380, una de las últimas oportunidades de la industria aeronáutica europea frente a la poderosa Boeing.
El Periodico"