Río Grande (RTS).- Este martes, y aprovechando que la Fuerza Aeronaval Nº 2 y otros componentes de la Aviación Naval realizan un despliegue en la provincia, integrantes del BIM Nº 5 de Río Grande y del BIM Nº 4 de Ushuaia, realizaron maniobras con aviones cazabombarderos en la zona de la Estancia María Behety en un ejercicio conocido como apoyo aéreo cercano.
El oficial a cargo fue el comandante del Batallón de Infantería de Marina Nº 5 Escuela capitán de fragata Carlos Bianchi, quien explicó a los medios de prensa que esta es una actividad que consiste en coordinar las necesidades de apoyo de fuego aéreo. “Lo que tenemos es una decena de oficiales y suboficiales que están practicando las técnicas de control aéreo adelantado. Para esto contamos en la zona con la Escuela de Aviación Naval con 6 aviones Turbo Mentor (T-34C); la escuadrilla de Aermacchi (MB326) con 2 aviones y la escuadrilla de Super Etendard (SUE), también con 2 aviones”, precisó.
La actividad comenzó por la mañana “con los aviones más lentos primero (los Turbo Mentor), de modo de facilitar todas las técnicas de control. Se le indicaba al piloto de la aeronave dónde estaba el blanco y después –mediante diferentes códigos- se le daba indicaciones para hacerlos virar tanto a la izquierda como a la derecha, bajar la nariz, y finalmente autorizarlo a que lance el ataque”, detalló el capitán Bianchi.
En los ejercicios se dispusieron blancos simulados, como por ejemplo camiones del Batallón, que simulan ser parte de una columna enemiga que transporta tropas que se acerca hacia el sector de comando de la propia tropa. También fingieron poner una posición de morteros ubicada a 2.500 metros del lugar de comando. Estos eran los objetivos que debía «atacar» la Aviación Naval.
Según explicó el Comandante del Batallón 5, el apoyo aéreo cercano “es el que le da a la aviación -a la propia tropa- en una distancia que está delante de la primera línea antes de los 3.000 metros”.
Las pruebas estuvieron a cargo del BIM 5, también hubo oficiales del Batallón 4 de Ushuaia como se dijo. “Esta es una actividad normal de entrenamiento para todos los oficiales tanto como controlar el apoyo aéreo, como observar un tiro de fuego naval u observar el tiro de artillería de campaña. Estos ejercicios se acomodaron en el calendario, teniendo en cuenta la cantidad de aeronaves que hay en la isla, cosa que hacía tiempo no se daba como en el día de hoy”, confió.
Los lugares para estos ejercicios varían de acuerdo a la disponibilidad de espacios de las estancias. Es así que generalmente rotan en las estancias José Menéndez, Cabo Peñas, María Behety, etc. “Cuando estos campos están disponibles y los estancieros dan el visto bueno, nosotros nos organizamos para armar las diferentes prácticas aeronáuticas”, indicó el capitán Bianchi.
Cabe destacar que las autoridades militares expresaron su agradecimiento a los estancieros por permitir la realización de estos ejercicios.
Durante el evento de ayer, además de la prensa, asistieron representantes de fuerzas de seguridad como la Policía Federal y la Gendarmería Nacional, cuyo jefe en Río Grande, el comandante Carlos Rodríguez López, estuvo entre los visitantes, además de los corresponsales navales profesor Carlos Baldassarre, las licenciadas Patricia Agudo y Jimena López Montes, estás últimas de «Gaceta Marinera».
El Comandante de la Fuerza de Infantería de Marina Austral, capitán de navío Héctor Villaverde, supervisó las operaciones. (Diario Provincia 23)