Seguridad y armas. Las Taser son consideradas "no letales", aunque se denuncia que han causado 269 muertes en 7 años
Una empresa quiere suministrársela a la Policía y guardias privados | Seguridad y armas.
Hay modelos de Taser diseñados para fuerzas policiales y para uso civil Empresarios de la seguridad presentaron otras novedades en un foro realizado la semana pasada | Relevamiento vía electrónica: 60% de la oferta mundial
RENZO ROSSELLO
Una descarga de 50.000 voltios que paraliza. Ese es el efecto de la pistola Taser. El arma, calificada como no letal, ha causado 269 muertes en el mundo. En Uruguay estudian su uso para policías y guardias privados.
Los empresarios que pretenden importar pistolas Taser se presentaron hace pocos días a la oficina del Registro Nacional de Empresas de Seguridad (Renaemse). "Sabemos de la polémica que existe en el mundo por este tipo de arma, por eso preferimos recurrir a la opinión de varios organismos antes de pronunciarnos y dar todas las garantías a quienes traen la propuesta", explica el comisario inspector Hugo De León, director de la unidad reguladora del Ministerio del Interior.
La intención del grupo empresarial es, en primer lugar, incorporar las Taser al equipamiento de las fuerzas policiales y en una etapa posterior al de las empresas de seguridad que cuentan con guardias armados.
Avisos Google
"A nuestra oficina llegan muchas propuestas que se presentan como la panacea en materia de seguridad y después se prueba que no tienen casi ninguna aplicación. Pero nosotros no podemos hacer juicios a priori", señala De León.
Por lo pronto la unidad policial remitió muestras de las pistolas al LATU, a la Facultad de Ingeniería, a la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea), al área de cardiología del Hospital de Clínicas, al Hospital Policial y al Estado Mayor Policial del Ministerio.
"Para ser homologado, un producto como este debería tener un pronunciamiento positivo de todos esos organismos, que nos aseguraran que, efectivamente, no es letal y que además puede ser eficaz para la Policía", explicó el jerarca.
Esta habilitación permitiría que la Policía Nacional lo sumase a su arsenal y, una vez que ello ocurra, también se le permitiría adquirirlas a las empresas de seguridad privada.
Los estudios ahora a cargo de estos organismos podrían llevar no menos de dos meses, estimó el director de Renaemse.
El Ministerio del Interior cuenta con una fuerza de 22.000 efectivos en todo el país, y Renaemse tiene algo más de 13.000 guardias armados registrados por empresas de seguridad privada.
Las pistolas Taser parecen, a primera vista, un moderno elemento de defensa, no letal y eficaz para contener a un agresor. Sin embargo, la experiencia en Estados Unidos, Europa y algunos países latinoamericanos ha demostrado un costado preocupante. La organización Amnistía Internacional es una de las principales voces que se ha levantado contra su uso por parte de las fuerzas de seguridad pública.
"voltios sin control". Este es el título del informe producido por Amnistía Internacional en 2007. La organización estudió el empleo abusivo de las pistolas Taser en varios países europeos, en Estados Unidos y en Canadá.
Precisamente fue en este último país donde sucedió un caso que encendió la alarma internacional. El 14 de octubre de 2007 un inmigrante polaco, Robert Dziekanski, protagonizó un violento incidente en el aeropuerto de Vancouver. Alterado por las demoras en el área de equipaje Dziekanski perdió el control y comenzó a destruir el mobiliario. Agentes de la Policía Montada que fueron a reducirlo le efectuaron dos disparos con una pistola Taser. El inmigrante falleció minutos después entre gritos de dolor.
Para entonces la organización internacional de Derechos Humanos había puesto su ojo crítico sobre los rifles eléctricos, a menudo utilizados como instrumento de tortura.
"En la práctica, Amnistía Internacional ha descubierto que muchos departamentos de policía estadounidenses están utilizando las pistolas Taser como opción habitual para someter a individuos desarmados que no colaboran pero que no constituyen un peligro real, ni para sí mismos ni para otros. En muchas ocasiones, las pistolas Taser se utilizan contra personas que ya se encuentran inmovilizadas físicamente y bajo control", señala el informe.
Entre los abundantes casos reseñados por el informe de A.I. se menciona el empleo de Taser por parte de la Brigada de Policía Militar estadounidense en la prisión de Abu Ghraib, en Irak.
El informe de 2007 se enfocó particularmente sobre el uso de esta arma por parte de los cuerpos policiales de España. Los reportes de uso abusivo de estas pistolas fueron numerosos. Algunas fuerzas policiales locales, como es el caso de la policía local de Barcelona, los Mossos d`Esquadra, dejaron de utilizarlas en los hechos, aunque la reglamentación se los permite.
El uso de Taser es, por ejemplo, mucho más restringido en el Reino Unido. Cabe recordar que el grueso de la fuerza policial inglesa no utiliza armas de fuego. Sólo las unidades autorizadas al uso de armas de fuego pueden utilizar pistolas Taser, pero prácticamente en el mismo cuadro de condiciones que las armas letales.
En las conclusiones y recomendaciones de A.I. se sugiere, en primer lugar, la necesidad de mayores estudios independientes sobre las consecuencias de impactos de pistolas Taser. También se recomienda que no se le suministre a las fuerzas de seguridad este elemento, que no se efectúen disparos en serie que provoquen lesiones severas y que los efectivos que las empleen estén debidamente entrenados en su uso.
GOLPE DE CORRIENTE. Las pistolas Taser son armas de puño que disparan dos dardos eléctricos sujetos a dos sondas de una extensión máxima de 6,4 metros. Causan la paralización inmediata al aplicar una descarga de 50.000 voltios durante cinco segundos. Los dardos tienen efectividad aún con cinco centímetros de ropa sobre el cuerpo.
Básicamente, el efecto de un disparo de Taser provoca una sobreestimulación del sistema nervioso y ocasiona la contracción incontrolable del tejido muscular. Se estima que alrededor de 100.000 personas han recibido descargas de este tipo en confrontaciones con agentes policiales desde 1998, principalmente en Estados Unidos.
Taser International, el principal fabricante, produce dos modelos: la M26, un arma de alta potencia especialmente diseñada para fuerzas policiales; y la X26, un modelo con menos potencia introducido en el mercado en 2003 y dirigido al público civil como elemento de autoprotección.
En Uruguay la Policía ha incorporado algunos elementos no letales para la contención de personas. El gas paralizante es el más difundido, las balas de goma utilizadas por las fuerzas de choque son otro ejemplo de esta línea de armamento. En filas policiales, según adelantaron fuentes del Ministerio del Interior, el uso de pistolas Taser no cuenta con la aprobación de la mayoría de los oficiales.
En poco tiempo, se conocerá el primer dictamen local, tanto científico como jurídico, en torno a esta polémica arma. En otros países la Taser ha provocado rayos y centellas.
A favor
Los fabricantes de estas pistolas o rifles (su nombre proviene de las siglas Thomas A. Swift Electric Rifle, Taser International) aseguran que sus productos "utilizan tecnología patentada para controlar de forma segura a agresores peligrosos, combativos o de alto riesgo que ponen en peligro la integridad física de los agentes de Policía o ciudadanos inocentes ofreciendo una alternativa más segura que otras opciones de fuerza". Agregan que "el Taser está considerado como el Arma No Letal más segura de las opciones disponibles". Y argumentan que "la mayoría de las lesiones ocurridas por una intervención policial (con Taser) son fruto de la resistencia del agresor y de su insensibilidad al dolor por haber ingerido drogas y/o alcohol".
En contra
Amnistía Internacional es la organización que se ha pronunciado en contra del uso de pistolas Taser por parte de fuerzas de seguridad. Aducen que se ha constatado el fallecimiento de 269 personas entre 2001 y 2007 por el uso de estas armas. "En 39 casos, los forenses encontraron que el empleo de las armas tipo Taser fue causa o factor contribuyente de la muerte. Aunque en la mayoría de los casos los forenses han atribuido la muerte a otros factores, como el consumo de drogas, algunos expertos médicos creen que las descargas de estas armas pueden agravar el riesgo de un fallo cardiaco en casos de personas agitadas o bajo la influencia de drogas o que sufran problemas cardiacos previos a las descargas eléctricas", señala su informe.
Las cifras
100.000 es la cantidad de personas que, se estima, recibieron impactos de pistolas Taser desde 1998 a la fecha en incidentes con policías.
269 Es la cantidad de personas que fallecieron en Estados Unidos luego de recibir un impacto de Taser, según Amnistía Internacional.
Caso de la abuela reducida con Taser
La historia de la abuela "reducida" por disparos de una pistola Taser dio la vuelta al mundo hace pocas semanas. Ocurrió en Austin, Texas. El caso quedó documentado por la filmación de la cámara de seguridad del patrullero que intervino.
El episodio tuvo lugar en una carretera del condado el 11 de mayo pasado. El patrullero Chris Bieze, un corpulento agente de 1,90 de estatura, detuvo a la automovilista Kathryn Winkfein (72) por exceder el límite de velocidad de 90 kilómetros.
La mujer se negaba a firmar la boleta de multa y por ello entabló una discusión con el policía.
-¿Vas a agredirme, vas a empujar a una mujer de 72 años? -replica la mujer cuando el agente comienza a amenazarla con el arresto.
-Si no da un paso atrás voy a dispararle.
-Adelante, dispárame con el Taser.
-¡Un paso atrás! Dese la vuelta, ponga sus manos a la espalda.
-¡Me estoy volviendo al coche!
-¡Alto! No, señora, voy a dispararle. (Dispara) Manténgase en el suelo. Ponga sus manos detrás de la cabeza o le disparo otra vez.
Entre gritos de dolor la mujer fue finalmente esposada por el agente y llevada a la comisaría local, bajo la acusación de resistirse al arresto.
Pasado el incidente, Kathryn Winkein presentó demanda contra el agente por ejercer brutalidad. Durante el juicio que ahora se sustancia en los tribunales locales se presentó la filmación de la cámara del patrullero que comenzó a circular por las principales cadenas de noticias. La abogada Maki Haberfeld, que representa a Winkfein, argumentó que su cliente no parece representar una amenaza para el oficial.
Uruguayos invierten poco en seguridad
"Los delitos se están haciendo cada vez más violentos, tenemos un componente social muy al límite", opina Hugo García Correale, presidente del Sexto Foro Empresarial de Seguridad y de la Cámara de Empresas de Seguridad (CESI).
El foro que se desarrolló entre jueves y viernes pasado en el Hotel Lafayette reunió a empresarios de Uruguay, Argentina, Brasil, Paraguay y Chile, así como a autoridades de seguridad pública de Uruguay y Argentina. Durante el encuentro los asistentes pudieron ponerse al día con los dispositivos más avanzados en materia de vigilancia electrónica. Precisamente el rubro de la seguridad electrónica (alarmas, cámaras de seguridad, sistema GPS) es a nivel internacional el 60% de la oferta.
En Uruguay hay 298 empresas de seguridad registradas, las más grandes ofrecen tanto la denominada "seguridad física" -guardias armados, custodia de valores y de personas-, como seguridad electrónica. Sin embargo el grueso de las empresas medianas y pequeñas pertenecen al rubro de servicio de monitoreo de alarmas. La gran mayoría opera en condiciones de legalidad, aunque la cámara estima que existe cerca de un 20% de "informalismo".
En opinión de García Correale -titular de la consultora de seguridad HGC, con sede en Punta del Este-, pese a la amplia oferta "todavía tenemos (los uruguayos) la mala costumbre de no invertir en seguridad".
Pero también la falta de una "cultura de prevención" se hace patente, señala el empresario, en los hábitos de las personas. "Las señoras, por ejemplo, siguen llevando las carteras colgadas y no utilizan las riñoneras. Lo recomendable es llevar el dinero en una riñonera y una pequeña cantidad en la cartera", apunta el empresario.
García Correale cree que el fenómeno de inseguridad que se vive en el país es real, pero también opina que la Policía "se ha profesionalizado mucho en los últimos tiempos". A su juicio el déficit para enfrentar la delincuencia está en la legislación. "Tenemos demasiadas leyes, los procesos son engorrosos, incluso para los mismos policías que pierden jornadas enteras en los juzgados por haber detenido a un delincuente", señaló.
El País Digital