Discuten en Chile la privatización de la producción de cobre
SANTIAGO, Chile.- De un tiempo a esta parte, y a modo de ruidoso murmullo, se vienen escuchando en Chile distintas voces que abogan por la privatización de la hasta hace poco "intocable" estatal Corporación Nacional del Cobre (Codelco), la principal productora de cobre del mundo.
A esas voces se han sumado en las últimas semanas innumerables debates públicos, opiniones en medios de comunicación y declaraciones oficiales que incluso proponen como candidata a tal proceso a la estatal Empresa Nacional de Petróleo (ENAP).
Uno de estos debates, llamado "¿Cuál es el futuro de Codelco?", organizado por el Centro de Estudios del Cobre y la Minería (Cesco) y la Universidad Adolfo Ibez, planteó un rotundo cambio en la administración de la estatal minera.
"Codelco debe ser tratada como una empresa y no como un servicio público", dijo el diputado oficialista Jorge Insunza.
La iniciativa de nuevo gobierno corporativo para Codelco, que se trabaja actualmente en otro proyecto de ley, busca que la empresa opere como si fuera una sociedad anónima abierta y que además sea fiscalizada por diferentes entes regulatorios, aun cuando, como especificó ayer el ministro de Minería, Santiago González, "no pretende innovar en la propiedad de la empresa, la cual se mantiene íntegramente en manos del Estado".
La oposición, a través de la senadora derechista Evelyn Matthei, ya anunció su completo rechazo al proyecto en estudio. "El proyecto no es malo, es pésimo [...] Codelco sigue siendo una empresa del gobierno de turno", alegó.
Fondos para las armas
En la última semana, el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, ratificó que el gobierno enviará al Congreso el proyecto para derogar la ley reservada del cobre, que deriva el 10 por ciento de las ventas a la compra de armamento por parte de las fuerzas armadas, norma dictada en tiempos de Augusto Pinochet (1973-1990) y que es una de las mochilas más pesadas con las cuales carga la cuprífera.
Según una proyección realizada por el decano de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Felipe Morand, la privatización del 20% de Codelco reportaría por lo menos 7000 millones de dólares, según explicó en el seminario "¿Privatización de Codelco o mejoras en su gobierno corporativo?".
En el mismo trabajo, el ministro González hizo un llamado al realismo: "Si pensamos en tratar de privatizar, el proyecto no saldrá del Congreso", afirmó.
El momento actual de Codelco es sumamente auspicioso, por cuanto sus principales proyectos son la ampliación de la mina Andina, con una inversión de 4800 millones de dólares, y la expansión de El Teniente (2300 millones), como parte de un plan de inversión de 12.000 millones de dólares para los próximos 10 años.
El ministro González comunicó ayer que Codelco también estudia, junto a la Empresa Nacional de Minería (Enami), la compra del 49% de la mina de cobre Los Bronces a Anglo American plc.
Codelco, que se transformó en una empresa estatal tras la nacionalización del cobre de 1971, durante el gobierno de Salvador Allende (1970-1973), generó excedentes por 8450 millones de dólares en 2007, lo que representó el 17,6 por ciento de los ingresos presupuestarios chilenos.
Petróleo en la mira
No es todo. Basado en la irrefrenable alza del precio internacional del crudo y de las restricciones que afectan a Chile, el Diario Financiero de este país deslizó abiertamente la posibilidad de privatizar la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), "cuyo rol estratégico se hizo más notorio a partir de las restricciones de los envíos de gas natural desde la Argentina", según planteó la publicación citando experiencias regionales exitosas, como las que se llevaron a cabo con la brasileña Petrobras -de la cual el 40% de su capital fue traspasado a manos privadas- y la colombiana Ecopetrol (10 por ciento).
Fuentes del Ministerio de Minería aseguraron a LA NACION que la privatización de Codelco o de ENAP es un tema absolutamente cerrado para el gobierno de Bachelet, pero que bien podría ser retomado por un futuro presidente de la actual coalición gobernante, sobre todo si se da el caso de ser elegido un demócrata cristiano, "quienes conllevan un sesgo eminentemente más privatizador", según opinaron.
Por Carlos Vergara
Corresponsal en Chile