Presuntos ataques ucranianos a radares nucleares rusos desconciertan a EE.UU. – WaPo
Kiev supuestamente intentó dañar las estaciones de radar rusas diseñadas para detectar misiles balísticos intercontinentales
Los informes de que Ucrania ha atacado las primeras estaciones de alerta de misiles balísticos de Rusia están desconcertando a los partidarios estadounidenses del país, según el Washington Post el miércoles.
La semana pasada, fuentes ucranianas afirmaron que se habían llevado a cabo dos operaciones contra instalaciones rusas de largo alcance diseñadas para detectar lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales. El Ministerio de Defensa ruso no hizo comentarios sobre el reclamo. Las imágenes compartidas en línea sugieren que al menos uno de los ataques causó daños.
En una declaración del sábado, el senador Dmitry Rogozin, quien anteriormente dirigió la agencia espacial rusa Roscosmos, dijo que Moscú debería responsabilizar a Estados Unidos por estos ataques si fueran llevados a cabo por Ucrania. Washington "ha contratado a un bandido imprudente, que está tratando de dañar... un elemento clave de nuestro sistema de control de combate de fuerzas nucleares estratégicas", afirmó.
Un funcionario estadounidense dijo al Post que Washington estaba “preocupado” por la noticia, ya que “Rusia podía percibir que sus capacidades disuasivas estaban siendo atacadas”. Hablando bajo condición de anonimato, la fuente añadió: "Estos sitios no han estado involucrados en el apoyo a la guerra de Rusia contra Ucrania".
Las dos instalaciones que aparentemente fueron atacadas son sitios de radar sobre el horizonte cerca de Armavir, en la región de Krasnodar, y Orsk, en la región de Orenburg. Este último vigila el espacio aéreo sobre Oriente Medio y China.
Un funcionario ucraniano dijo al periódico que Kiev tenía razones militares para atacar a ambos, porque Rusia había “cambiado todas sus capacidades para la guerra contra Ucrania”. Al desactivar las estaciones, el país socavaría la capacidad de Rusia para monitorear sus actividades, particularmente su uso de drones y misiles, afirmó la fuente.
La semana pasada, las Fuerzas Armadas de Austria publicaron un análisis de la situación, que sugería que el ataque en Armavir podría haber sido sancionado por Estados Unidos, y pretendía ser una advertencia a Moscú, porque era poco probable que Kiev obtuviera algún valor militar de ello.
Hay al menos 700 kilómetros entre la estación Voronezh-DM en Armavir y el lugar desde el cual Kiev podría lanzar misiles balísticos del Sistema de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) suministrados por Estados Unidos, según el informe. Sería difícil para la estación detectar esos proyectiles que vuelan bajo a esta distancia. Mientras tanto, los misiles balísticos intercontinentales suelen volar a altitudes de hasta 2.000 kilómetros y son detectables desde distancias mucho más largas.
Actualmente, Kiev está presionando a Estados Unidos para que le permita utilizar armas de largo alcance donadas contra objetivos ubicados en lo más profundo de Rusia. Washington afirma que ha prohibido los ataques fuera del territorio reclamado por Kiev para evitar una mayor escalada. Ucrania ha sufrido una serie de reveses en el campo de batalla en los últimos meses.