Es que operar a plena luz del día un submarino es un riesgo excesivo. Otra es la situacion de recargar baterias, pero aca estaban exponiendo un elemento de vital importancia que bien podria haber operado de noche.
De todas maneras no lo dije yo, lo dijo un tripulante al que conoci y el puteaba a Bicain por semejante decision.
Estimado Mukawami:
Seguramente el ARA Santa Fe, es una de las embarcaciones de la Armada sobre las que más se ha escrito, siendo el libro del Dr. Bóveda lectura indispensable y necesaria para conocer la narración de los hechos vinculados con este submarino.
Sin perjuicio de su pedido de disculpas, por haber introducido comentarios de un tripulante respecto de quien fue su comandante durante la guerra (por mi lado, he entrevistado a más de 40 tripulantes e infantes transportados a Georgias por el submarino, y
todos coincidieron en que están vivos gracias a las decisiones tomadas por Bicain), le formulo las siguientes aclaraciones.
1. La ausencia de códigos de comunicación para emplear entre el submarino que llegaba a Grytviken de noche, y la guarnición de esa localidad, demoró el inicio del desembarco del Grupo Golf, hasta que se pudiera validar la identidad entre ambos, recurriendo a apodos de algunos de ellos de la época de la Escuela Naval.
2. La falta de información sobre la profundidad frente al muelle, hizo que el submarino permaneciera a cierta distancia del mismo, realizándose el desembarco con una lancha del British Antartic Survey. La pretensión del comandante del submarino, era zarpar de noche, antes del amanecer.
3. Ante la proximidad del amanecer y la demora en la maniobra de descarga, el capitán Bicain advirtió en cierto momento al Capitán Lagos, que "ése sería el último bote, y que después le tiraba todo al agua, porque estaba amaneciendo y tenía que zarpar". Esta simpática "amenaza" hizo apurar el desembarco de los infantes y efectivamente ése fue el último bote.
4. En la boca de la entrada de Bahía Cumberland, sobre el margen izquierdo de la línea de la costa, existía una "roca" sumergida que no estaba correctamente marcada en las cartas de navegación, lo que puso al capitán Bicain en el dilema de: a) avanzar a toda máquina en superficie pasando por encima de la "roca", pero pegado a la costa, impidiendo así la detección del radar enemigo; o b) sumergirse y realizar un amplio arco por el centro de la boca de la Bahía, aumentando el riesgo de detección antisubmarina de los buques británicos que se encontraban en zona (HMS Antrim; HMS Brillant; HMS Plymouth, todos con capacidad antisubmarina), que ya habían recibido información de inteligencia desde Northwood de la fecha aproximada de arribo del submarino y ya estaban realizando vuelos de reconocimiento y búsquedas con sonar.
5. Cuando estaba "clareando" (expresión del subof.Felman, quien estaba en la vela como vigía en ese momento) -no a plena luz del día-, y a unos pocos cientos de metros de sobrepasar la "roca", aparece el helicóptero Wessex del HMS Antrim (que había avistado la embarcación por entre la bruma matinal), y lanza dos cargas de profundidad contra el submarino, produciéndole averías que comprometían su capacidad de sumergirse, y es cuando el capitán Bicain ordena el regreso al muelle.
Espero estos puntos sirvan para aclararle algunas circunstancias que rodearon la decisión tomada por el capitán Horacio Bicain, en tiempos de guerra, y le ruego se las transmita de mi parte a su tripulante conocido, junto con la recomendación de lectura del libro del Dr. Bóveda.
Cualquier duda, a su disposición.
Cordialmente,
Alejandro Amendolara