No puedo sino sonreirme ante el estado de estas cosas en 2024.
Los "viejos de antes" nos manejábamos con negativos y diapositivas, y el gasto en dinero para producir todo era enorme comparado con "lo digital" que se impuso luego.
No pedíamos permiso para estar en lugares públicos, y si alguien hueveaba demasiado por estar mosqueando ahí, hacíamos valer la condición de lugar público.
Si había que hacer algo más exclusivo (in door), todo se solucionaba con una inteligente preparación muy anticipada que le llevaba varias diligencias y podía ser trabajoso, pero que marcaba la diferencia entre los que podían entrar y los que no. A veces funcionaba, las más; a veces fallaba. Pero forjaba carácter. Y mientras tanto se estudiaba y aprendía para no ser solo un sacafotos.
No borrábamos nada (nadie nos lo pedía, ni menos imponía); ni pensar en aceptar tamaña patudez.
Nadie nos ponía buses ni chaquetitas amarillas porque éramos de la "asociación de fotógrafos aficionados amigos de los aviones". La mayoría éramos lobos solitarios que entendian que andando en manada se perdía toda la magia de "la misión", como pescadores en un río.
Las fotos generalmente las publicábamos en las mejores revistas de aviación del mundo, donde pagaban un moco, pero igual servía para algo.
Hay algunos acá en este foro que, yo creo orgullosamente, pertenecen a esa generación de "pioneros y cazadores solitarios".
¡Saludos!