LA USAF EVALUA LA PRIORIDAD DE SUS NECESIDADES FUTURAS EN CAZAS
21 de noviembre 2011 - Robert Wall, Amy Butler - Londres, Washington
Nuevos cazas, misiles y misiones son el sello distintivo de la Fuerza Aérea de los EE.UU. Si bien estos aún se difunden en los planes a largo plazo, a corto plazo las limitaciones fiscales están obligando a los servicios a embarcarse en un delicado equilibrio entre la mejora de las fuerzas existentes y la economización de fondos para nuevos equipos.
Si ni siquiera la esperanza de equipos tales como un eventual reemplazo del Lockheed Martin F-22 es delirante o simplemente prudente para el ojo del espectador común, dada la urgencia detrás de las negociaciones de reducción de deuda que se están llevando a cabo este mes en el Congreso. La realidad es que los trabajos sobre el concepto de un sucesor del F-22, conocido como F-X, están en su infancia. Se trata de explorar las tecnologías que podrían ser necesarias para asegurar la superioridad aérea dentro de 20 años a partir de hoy y 30 años más allá desde esa fecha, dice Coronel de la USAF Edward Corcoran, líder del equipo del núcleo de funcionamiento de la superioridad aérea del Comando Aéreo de Combate.
Tal vez un poco antes llegara la entrada en servicio de un misil de última generación, un teórico sustituto del misil aire-aire Raytheon AIM-120D para ser transportado internamente en las compactas bodegas de armas de los cazas stealth F-22 y F-35.
El servicio también está en conversaciones con la Agencia de Defensa Antimisiles sobre añadir una capa de armas aerotransportadas a la arquitectura de defensa contra misiles balísticos del país. El objetivo es determinar la plataforma de lanzamiento y el interceptor, y si esta es una proposición rentable. El comite evaluador aún está deliberando, pero "sin duda se ve prometedor", dijo Corcoran en la IQPC: Conferencia internacional de Cazas en Londres.
El Jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, el general Norton Schwartz, primero preguntó sobre el concepto llamado air-launched hit-to-kill (algo así como lanzar desde el aire y golpear a matar) en junio de 2009, cuando se inició un estudio exploratorio. Desde entonces, el servicio dice que está interesado, pero quisiera que el MDA cubriera la parte de desarrollo.
Cómo se dará prioridad a estos intereses es parte de un ejercicio de la Fuerza Aérea para elaborar un plan maestro destinado a ser el documento fundamental para las decisiones presupuestarias del año fiscal 2014 y más allá. La versión final se espera para enero, dando tiempo para que se reflejen con mayor precisión el alcance de los recortes presupuestarios que actualmente se están debatiendo y que entraran en vigor en la próxima década. Un ejemplo de la presión financiera sobre la Fuerza Aérea es su propuesta en el próximo presupuesto para recortar los escuadrones de F-16 y A-10 de la Guardia Aérea Nacional, una medida que ahorraría dinero, pero que también pondría en riesgos la capacidad de la USAF para llevar a cabo sus misiones.
Algunas decisiones de gastos son obligatorias. Por ejemplo, el retraso anticipado en el debut operacional del F-35A, que no se espera ocurra hasta el año 2018, está obligando a que el servicio actualice alrededor de 300 a 350 F-16C Block 40/50 con las extensiones de la vida de servicio y las actualizaciones de aviónica costando casi 10 millones de dólares por avión, según informo al Congreso el Teniente General Herbert Carlisle, subjefe del Estado Mayor para operaciones, planes y requerimientos.
El servicio también está lidiando con los problemas de envejecimiento de la flota de F-15. Detallados ensayos de fatiga, ordenados después que se perdiera un F-15C en vuelo en el 2008 debido a la falla catastrófica de un larguero del lado derecho por causas relacionadas con la fatiga, recientemente dejaron al descubierto grietas adicionales en la estructura del Eagle. La situación se considera no crítica y la reparación de las zonas afectadas puede ser realizada en la mayoría de las aeronaves durante el periodo de mantenimiento mayor, dice el Teniente Coronel Kevin Riordan, asesor operativo de la oficina de programas del sistema. Sin embargo, la revisión pone de manifiesto la fragilidad de una flota anticuada. Algunas células de aeronaves más antiguas deberán ser reparadas con mayor rapidez, señala, pero no hay indicios de que la flota no pueda cumplir con su actual proyección de vida en servicio: 2030 para el F-15C y 2035 para el F-15E.
Oficiales de la Fuerza Aérea dicen que mientras que los F-15 y F-16 están acumulando horas de vuelo en apoyo a las operaciones en Irak y Afganistán, las misiones no tienen una alta demanda estructural en el fuselaje debido al espacio aéreo permisivo donde se realizan. Por lo tanto, las horas de vuelo acumuladas son menos duras en las estructuras que si estas misiones requirieran de altas g o de maniobras de combate aire-aire.
Otra cuestión es que la escasez de dinero puede ser mejor utilizada para mantener a estos modelos de aviones operativamente viables en el futuro. Los probables candidatos son las actualizaciones de software y de procesadores, como la incorporación del radar AESA APG63 (V) 3 para el F-15C y el APG-82 (V) 1 para el F-15E. El F-16, probablemente también recibirá un pequeño radar AESA.
Aún en debate esta la cuestión de si se debe poner el contenedor designador Sniper, que ya se utiliza en el cazabombardero F-15E Strike Eagle, en los cazas F-15C Eagle. La medida podría venir luego de que 345 millones de dólares para un sistema de búsqueda y seguimiento por infrarrojos se retiraron del presupuesto del año fiscal 2012 para ahorrar dinero.
Corcoran señala que para cualquier mejora que se proponga ahora, los funcionarios del programa deben ofrecer una compensación para controlar el gasto.
También se está considerando a largo plazo las mejoras para el último caza en entrar en servicio con la USAF, el F-22 Raptor.
A corto plazo las mejoras para los próximos cinco años ya están en marcha, pero el servicio espera definir muy pronto el contenido del próximo paquete “Incremento 3.2C”. Los elementos potenciales incluyen capacidades multiespectrales para ampliar el potencial de la frecuencia ofensiva y defensiva del caza, las actualizaciones necesarias, como la integración del Modo 5 Amigo o Enemigo, o el sistema automático de alarma de colisión de tierra y evitación del terreno. Las autoridades están examinando la mejor manera de compartir los datos recogidos por el F-22, a través de un conjunto de sensores a bordo sin precedentes, con los cazas “Legacy”. Con el tiempo está prevista una red de intercambio de datos con los F-35, pero los retrasos en el desarrollo de este último han dado una prioridad más alta al proyecto de pasar los datos recolectados por el F-22 a los actuales cazas de la cuarta generación.
La primera gran mejora del F-22, el “Incremento 3.1”, ahora está entrando en servicio, con la pareja inicial de cazas mejorados entregados recientemente a la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Alaska. La reconversión de la flota continuará hasta el año 2016 e incluye las modificaciones de hardware y software necesarias para lanzar ocho bombas de pequeño diámetro, tomar fotos con el radar de apertura sintética (SAR) fotos y proporcionar las capacidades de ataque electrónico y de ubicación con precisión.
Las pruebas completas de funcionamiento y las evaluaciones están siendo terminadas, pero el mayor Richard Foster, oficial de requerimientos del Comando Aéreo de Combate, dice que los resultados son positivos. La precisión del SAR es un 55% mejor que la especificada y la precisión de la geolocalización es un 15% mejor. Además, los ataques electrónicos han demostrado tener un 100% de éxito en las pruebas.
El F-22 también tendrá una rudimentaria capacidad de disparo del AIM-120D el próximo año (a través de la llamada Actualización 4), aunque la integración plena no está prevista hasta el “Incremento 3.2B” en el 2017. Una capacidad inicial para disparar el misil dogfight Raytheon AIM-9X también ha sido acelerada para el 2015 (en la Actualización 5), con la plena integración de la mano del “Incremento 3.2B”.
El siguiente paso en la ruta de actualización es el “Incremento 3.2A”, una mejora de software que incluye la ampliación a la funcionalidad del enlace de datos con el Enlace 16, identificación de combate y protección electrónica. Este debería emerger en torno al 2014.
Además de la plena integración de los últimos misiles aire-aire, el “Incremento 3.2B” también expande la geolocalización en un 88% más allá de lo que se está introduciendo.
Además, alrededor del 2016 la USAF espera tener dos configuraciones de F-22, la Block 20 en aviones que se utilizarán para formación y desarrollo y la Block 30/35 para la flota operativa. Foster dice 36 que aviones estarán en el Block 20 con 149 en la configuración estándar Block 30/35.
Fuente:http://www.aviationweek.com/aw/generic/story.jsp?id=news/awst/2011/11/14/AW_11_14_2011_p37-392429.xml&headline=USAF%20Weighs%20Future%20Priority%20Needs&channel=defense
21 de noviembre 2011 - Robert Wall, Amy Butler - Londres, Washington
Nuevos cazas, misiles y misiones son el sello distintivo de la Fuerza Aérea de los EE.UU. Si bien estos aún se difunden en los planes a largo plazo, a corto plazo las limitaciones fiscales están obligando a los servicios a embarcarse en un delicado equilibrio entre la mejora de las fuerzas existentes y la economización de fondos para nuevos equipos.
Si ni siquiera la esperanza de equipos tales como un eventual reemplazo del Lockheed Martin F-22 es delirante o simplemente prudente para el ojo del espectador común, dada la urgencia detrás de las negociaciones de reducción de deuda que se están llevando a cabo este mes en el Congreso. La realidad es que los trabajos sobre el concepto de un sucesor del F-22, conocido como F-X, están en su infancia. Se trata de explorar las tecnologías que podrían ser necesarias para asegurar la superioridad aérea dentro de 20 años a partir de hoy y 30 años más allá desde esa fecha, dice Coronel de la USAF Edward Corcoran, líder del equipo del núcleo de funcionamiento de la superioridad aérea del Comando Aéreo de Combate.
Tal vez un poco antes llegara la entrada en servicio de un misil de última generación, un teórico sustituto del misil aire-aire Raytheon AIM-120D para ser transportado internamente en las compactas bodegas de armas de los cazas stealth F-22 y F-35.
El servicio también está en conversaciones con la Agencia de Defensa Antimisiles sobre añadir una capa de armas aerotransportadas a la arquitectura de defensa contra misiles balísticos del país. El objetivo es determinar la plataforma de lanzamiento y el interceptor, y si esta es una proposición rentable. El comite evaluador aún está deliberando, pero "sin duda se ve prometedor", dijo Corcoran en la IQPC: Conferencia internacional de Cazas en Londres.
El Jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, el general Norton Schwartz, primero preguntó sobre el concepto llamado air-launched hit-to-kill (algo así como lanzar desde el aire y golpear a matar) en junio de 2009, cuando se inició un estudio exploratorio. Desde entonces, el servicio dice que está interesado, pero quisiera que el MDA cubriera la parte de desarrollo.
Cómo se dará prioridad a estos intereses es parte de un ejercicio de la Fuerza Aérea para elaborar un plan maestro destinado a ser el documento fundamental para las decisiones presupuestarias del año fiscal 2014 y más allá. La versión final se espera para enero, dando tiempo para que se reflejen con mayor precisión el alcance de los recortes presupuestarios que actualmente se están debatiendo y que entraran en vigor en la próxima década. Un ejemplo de la presión financiera sobre la Fuerza Aérea es su propuesta en el próximo presupuesto para recortar los escuadrones de F-16 y A-10 de la Guardia Aérea Nacional, una medida que ahorraría dinero, pero que también pondría en riesgos la capacidad de la USAF para llevar a cabo sus misiones.
Algunas decisiones de gastos son obligatorias. Por ejemplo, el retraso anticipado en el debut operacional del F-35A, que no se espera ocurra hasta el año 2018, está obligando a que el servicio actualice alrededor de 300 a 350 F-16C Block 40/50 con las extensiones de la vida de servicio y las actualizaciones de aviónica costando casi 10 millones de dólares por avión, según informo al Congreso el Teniente General Herbert Carlisle, subjefe del Estado Mayor para operaciones, planes y requerimientos.
El servicio también está lidiando con los problemas de envejecimiento de la flota de F-15. Detallados ensayos de fatiga, ordenados después que se perdiera un F-15C en vuelo en el 2008 debido a la falla catastrófica de un larguero del lado derecho por causas relacionadas con la fatiga, recientemente dejaron al descubierto grietas adicionales en la estructura del Eagle. La situación se considera no crítica y la reparación de las zonas afectadas puede ser realizada en la mayoría de las aeronaves durante el periodo de mantenimiento mayor, dice el Teniente Coronel Kevin Riordan, asesor operativo de la oficina de programas del sistema. Sin embargo, la revisión pone de manifiesto la fragilidad de una flota anticuada. Algunas células de aeronaves más antiguas deberán ser reparadas con mayor rapidez, señala, pero no hay indicios de que la flota no pueda cumplir con su actual proyección de vida en servicio: 2030 para el F-15C y 2035 para el F-15E.
Oficiales de la Fuerza Aérea dicen que mientras que los F-15 y F-16 están acumulando horas de vuelo en apoyo a las operaciones en Irak y Afganistán, las misiones no tienen una alta demanda estructural en el fuselaje debido al espacio aéreo permisivo donde se realizan. Por lo tanto, las horas de vuelo acumuladas son menos duras en las estructuras que si estas misiones requirieran de altas g o de maniobras de combate aire-aire.
Otra cuestión es que la escasez de dinero puede ser mejor utilizada para mantener a estos modelos de aviones operativamente viables en el futuro. Los probables candidatos son las actualizaciones de software y de procesadores, como la incorporación del radar AESA APG63 (V) 3 para el F-15C y el APG-82 (V) 1 para el F-15E. El F-16, probablemente también recibirá un pequeño radar AESA.
Aún en debate esta la cuestión de si se debe poner el contenedor designador Sniper, que ya se utiliza en el cazabombardero F-15E Strike Eagle, en los cazas F-15C Eagle. La medida podría venir luego de que 345 millones de dólares para un sistema de búsqueda y seguimiento por infrarrojos se retiraron del presupuesto del año fiscal 2012 para ahorrar dinero.
Corcoran señala que para cualquier mejora que se proponga ahora, los funcionarios del programa deben ofrecer una compensación para controlar el gasto.
También se está considerando a largo plazo las mejoras para el último caza en entrar en servicio con la USAF, el F-22 Raptor.
A corto plazo las mejoras para los próximos cinco años ya están en marcha, pero el servicio espera definir muy pronto el contenido del próximo paquete “Incremento 3.2C”. Los elementos potenciales incluyen capacidades multiespectrales para ampliar el potencial de la frecuencia ofensiva y defensiva del caza, las actualizaciones necesarias, como la integración del Modo 5 Amigo o Enemigo, o el sistema automático de alarma de colisión de tierra y evitación del terreno. Las autoridades están examinando la mejor manera de compartir los datos recogidos por el F-22, a través de un conjunto de sensores a bordo sin precedentes, con los cazas “Legacy”. Con el tiempo está prevista una red de intercambio de datos con los F-35, pero los retrasos en el desarrollo de este último han dado una prioridad más alta al proyecto de pasar los datos recolectados por el F-22 a los actuales cazas de la cuarta generación.
La primera gran mejora del F-22, el “Incremento 3.1”, ahora está entrando en servicio, con la pareja inicial de cazas mejorados entregados recientemente a la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Alaska. La reconversión de la flota continuará hasta el año 2016 e incluye las modificaciones de hardware y software necesarias para lanzar ocho bombas de pequeño diámetro, tomar fotos con el radar de apertura sintética (SAR) fotos y proporcionar las capacidades de ataque electrónico y de ubicación con precisión.
Las pruebas completas de funcionamiento y las evaluaciones están siendo terminadas, pero el mayor Richard Foster, oficial de requerimientos del Comando Aéreo de Combate, dice que los resultados son positivos. La precisión del SAR es un 55% mejor que la especificada y la precisión de la geolocalización es un 15% mejor. Además, los ataques electrónicos han demostrado tener un 100% de éxito en las pruebas.
El F-22 también tendrá una rudimentaria capacidad de disparo del AIM-120D el próximo año (a través de la llamada Actualización 4), aunque la integración plena no está prevista hasta el “Incremento 3.2B” en el 2017. Una capacidad inicial para disparar el misil dogfight Raytheon AIM-9X también ha sido acelerada para el 2015 (en la Actualización 5), con la plena integración de la mano del “Incremento 3.2B”.
El siguiente paso en la ruta de actualización es el “Incremento 3.2A”, una mejora de software que incluye la ampliación a la funcionalidad del enlace de datos con el Enlace 16, identificación de combate y protección electrónica. Este debería emerger en torno al 2014.
Además de la plena integración de los últimos misiles aire-aire, el “Incremento 3.2B” también expande la geolocalización en un 88% más allá de lo que se está introduciendo.
Además, alrededor del 2016 la USAF espera tener dos configuraciones de F-22, la Block 20 en aviones que se utilizarán para formación y desarrollo y la Block 30/35 para la flota operativa. Foster dice 36 que aviones estarán en el Block 20 con 149 en la configuración estándar Block 30/35.
Fuente:http://www.aviationweek.com/aw/generic/story.jsp?id=news/awst/2011/11/14/AW_11_14_2011_p37-392429.xml&headline=USAF%20Weighs%20Future%20Priority%20Needs&channel=defense