@pati_marins64 8hs
Kursk resultó ser peor de lo que esperaba.
Hace exactamente tres meses escribí que la invasión ucraniana de Kursk tardaría a los rusos entre uno y tres meses en recuperar su territorio, ¡pero les llevará más tiempo!
La estrategia de Ucrania extendió las líneas de suministro rusas y creó un frente problemático para los rusos, cuyas redes de suministro se construyeron principalmente para apoyar las líneas del frente oriental.
Pero ¿por qué los rusos no pueden simplemente expulsar a los ucranianos del frente de Kursk?
La respuesta es compleja, pero se debe principalmente a las grandes capacidades defensivas de las fuerzas ucranianas. Desde el comienzo de la guerra, los ucranianos han demostrado una gran capacidad de recuperación, frenando el avance ruso, especialmente mediante el uso masivo de drones FPV.
Ucrania ha adaptado los drones FPV para que realicen algo más que funciones de proyectiles guiados; Han desarrollado estrategias en las que los FPV actúan como minas activas, lo que es una pesadilla para las ofensivas enemigas.
Ahora, la situación en Kursk no se trata sólo de mano de obra, equipo o municiones, sino de comprensión y adaptación a nuevas tácticas.
Miles de fuerzas norcoreanas no pueden cambiar nada allí, pero esta decisión puede alentar a los surcoreanos a entregar armas a Ucrania.
Los recientes conflictos de misiles entre Israel e Irán frenarán las expectativas rusas de un mayor apoyo de Irán. Es probable que el presupuesto militar de Rusia pronto alcance más del 10% del PIB.
Las capacidades de Ucrania para invadir Kursk provinieron de tropas posicionadas en la frontera norte, batallones del este y reservas en Kiev.
Pero personalmente creo que gran parte del apoyo occidental a Ucrania ahora se está ocultando, y realmente no sabemos cuál es la situación actual en cuanto a los voluntarios y equipos extranjeros.
Lo que podemos decir es que los rusos continúan avanzando lentamente debido a las tácticas defensivas ucranianas, y es probable que la guerra persista durante 2 a 4 años más. Éstas no son buenas noticias para los rusos, que están agotando su herencia militar de la era soviética.