MANAGUA.- En una declaración que incrementó la tensión entre Nicaragua y Colombia, enfrentadas por la soberanía de un área de 50.000 km2 en el Caribe, el presidente izquierdista nicaragüense, Daniel Ortega, advirtió anteayer a su ejército que debía estar preparado para una acción bélica.
La orden de Ortega se produjo ante la inminencia del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya en relación con las islas de San Andrés, Providencia y cayos adyacentes, que están bajo soberanía colombiana y son reclamados como territorio propio por Nicaragua. Se espera que el tribunal dicte hoy la sentencia.
Por su parte, Bogotá dijo esperar el fallo "sin preocupación" y desestimó las amenazas de acciones bélicas del gobierno nicaragüense.
"Nosotros no quisiéramos que este ejército se viera enfrentado a ninguna acción bélica, pero debemos estar preparados" para lo que decida la Corte, dijo Ortega durante un acto de graduación de 30 oficiales del cuerpo armado. En un discurso ante los nuevos oficiales, el alto mando militar, funcionarios del gobierno e invitados, el mandatario manifestó que lo que decida la CIJ hoy "es un problema de soberanía" para Nicaragua.
Las autoridades de Nicaragua sostienen que las islas le pertenecen porque fueron indebidamente cedidas a Colombia en el Tratado Bárcenas-Esguerra, de 1928, cuando el país estaba ocupado militarmente por Estados Unidos. Colombia, en tanto, alega que Nicaragua debe asegurar el debido respeto a los tratados internacionales que ha suscripto.
Ortega llamó a su par colombiano, Alvaro Uribe, a aceptar el fallo de la CIJ. De lo contrario, "está apostando a la ley del más fuerte y eso no tiene cabida en estos tiempos".
El presidente de Nicaragua es uno de los principales aliados del presidente venezolano, Hugo Chávez, y no dudó en defenderlo en la última Cumbre Iberoamericana, que tuvo lugar en Santiago, Chile, luego de que el rey de España mandara callar al presidente venezolano.
Sus declaraciones se producen en un momento de gran tensión entre Chávez y Uribe, tras la decisión del mandatario colombiano de suspender la mediación del presidente venezolano entre Bogotá y las FARC.
"Colombia ha actuado como un imperio con una política exterior expansionista", afirmó Ortega, tras acusar a Bogotá de apropiarse de posesiones nicaragüenses "gracias a que frente a Nicaragua es una potencia militar".
Cautela en Bogotá
Varios presidentes colombianos "han llegado a San Andrés con buques de guerra", debido a que Nicaragua tiene menor capacidad de respuesta militar, dijo el mandatario. "Si tuviésemos buques de guerra, aviones de combate, aviones Mig-23, estoy seguro de que al presidente de Colombia ni se le ocurriría acercarse a San Andrés", añadió.
Por su parte, el canciller colombiano, Fernando Araújo, dijo ayer que no vislumbra un conflicto bélico con Nicaragua. "Nuestra posición no es de fuerza, como dice el presidente Ortega, sino una posición jurídica, porque tenemos la soberanía de San Andrés desde hace más de 200 años y la hemos ejercido de manera pacífica, tranquila y continua", dijo el canciller en declaraciones radiales.
Araújo dijo que Bogotá no tiene planes de alertar a sus tropas tras las afirmaciones de Ortega. "No contemplamos conflictos internacionales", dijo.
Asimismo, desestimó que el pronunciamiento de Ortega se debiera a una presión de Chávez por su enfrentamiento con Uribe. "No tengo por qué pensar que se trata de sugerencias de un tercer país", dijo Araújo.
Eramos pocos y pario la abuela jajajajaja
La orden de Ortega se produjo ante la inminencia del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya en relación con las islas de San Andrés, Providencia y cayos adyacentes, que están bajo soberanía colombiana y son reclamados como territorio propio por Nicaragua. Se espera que el tribunal dicte hoy la sentencia.
Por su parte, Bogotá dijo esperar el fallo "sin preocupación" y desestimó las amenazas de acciones bélicas del gobierno nicaragüense.
"Nosotros no quisiéramos que este ejército se viera enfrentado a ninguna acción bélica, pero debemos estar preparados" para lo que decida la Corte, dijo Ortega durante un acto de graduación de 30 oficiales del cuerpo armado. En un discurso ante los nuevos oficiales, el alto mando militar, funcionarios del gobierno e invitados, el mandatario manifestó que lo que decida la CIJ hoy "es un problema de soberanía" para Nicaragua.
Las autoridades de Nicaragua sostienen que las islas le pertenecen porque fueron indebidamente cedidas a Colombia en el Tratado Bárcenas-Esguerra, de 1928, cuando el país estaba ocupado militarmente por Estados Unidos. Colombia, en tanto, alega que Nicaragua debe asegurar el debido respeto a los tratados internacionales que ha suscripto.
Ortega llamó a su par colombiano, Alvaro Uribe, a aceptar el fallo de la CIJ. De lo contrario, "está apostando a la ley del más fuerte y eso no tiene cabida en estos tiempos".
El presidente de Nicaragua es uno de los principales aliados del presidente venezolano, Hugo Chávez, y no dudó en defenderlo en la última Cumbre Iberoamericana, que tuvo lugar en Santiago, Chile, luego de que el rey de España mandara callar al presidente venezolano.
Sus declaraciones se producen en un momento de gran tensión entre Chávez y Uribe, tras la decisión del mandatario colombiano de suspender la mediación del presidente venezolano entre Bogotá y las FARC.
"Colombia ha actuado como un imperio con una política exterior expansionista", afirmó Ortega, tras acusar a Bogotá de apropiarse de posesiones nicaragüenses "gracias a que frente a Nicaragua es una potencia militar".
Cautela en Bogotá
Varios presidentes colombianos "han llegado a San Andrés con buques de guerra", debido a que Nicaragua tiene menor capacidad de respuesta militar, dijo el mandatario. "Si tuviésemos buques de guerra, aviones de combate, aviones Mig-23, estoy seguro de que al presidente de Colombia ni se le ocurriría acercarse a San Andrés", añadió.
Por su parte, el canciller colombiano, Fernando Araújo, dijo ayer que no vislumbra un conflicto bélico con Nicaragua. "Nuestra posición no es de fuerza, como dice el presidente Ortega, sino una posición jurídica, porque tenemos la soberanía de San Andrés desde hace más de 200 años y la hemos ejercido de manera pacífica, tranquila y continua", dijo el canciller en declaraciones radiales.
Araújo dijo que Bogotá no tiene planes de alertar a sus tropas tras las afirmaciones de Ortega. "No contemplamos conflictos internacionales", dijo.
Asimismo, desestimó que el pronunciamiento de Ortega se debiera a una presión de Chávez por su enfrentamiento con Uribe. "No tengo por qué pensar que se trata de sugerencias de un tercer país", dijo Araújo.
Eramos pocos y pario la abuela jajajajaja