Nueva prueba de Biojet en un Pucará 09-05-2007
Pucará vuela propulsado por biocombustible elaborado con soja
Un avión IA-58 levantó vuelo propulsado por un biocombustible elaborado con derivados de aceites de soja. Es una innovación que supone ventajas en materia ambiental y económica
Un avión IA-58 Pucará de la Fuerza Aérea Argentina (FFA) levantó vuelo hoy propulsado por un biocombustible elaborado con derivados de aceites de soja, una innovación que supone potenciales ventajas en materia ambiental y económica.
El Pucará A-561 -una aeronave "bioturbo" de fabricación nacional- despegó pasadas las 12 desde la plataforma militar del Aeroparque Jorge Newbery y realizó un vuelo experimental de cinco minutos.
Uno de los motores del Pucará fue cargado con combustible de aviación (JP1), y el otro con un biocombustible denominado "biojet", una mezcla integrada en un 20% por derivados de aceites de soja y en un 80% por JP1.
El proyecto, presentado en 2006, es una iniciativa de la dirección de Investigación y Desarrollo de la Fuerza Aérea en colaboración con la Facultad de Química de la Universidad Nacional de Córdoba, que desarrolló el "biojet", y la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, que lo subsidia.
"Se eligió el Pucará porque es ideal por su seguridad. Al ser biturbo, se lo puede dividir virtualmente por la mitad, y alimentar un motor con combustible tradicional, y el otro con ´biojet´", explicó el comodoro Eduardo La Torre, jefe del Centro de Ensayos en Vuelo, el organismo de la FAA que certifica este tipo de pruebas.
La Torre remarcó que "si se planta un motor, sigue volando con el otro sin problemas, como sucedió en (la guerra de las) Malvinas".
Asimismo, recordó que "este vuelo, que es la continuación de los dos realizados en Córdoba, nos permitirá hacer un seguimiento comparativo de ambos motores y ambos combustibles".
Por eso, tras realizarse el vuelo, técnicos de la FAA extrajeron una muestra de combustible de ambos motores.
Del izquierdo, alimentado por "biojet", extrajeron un líquido color ámbar, mientras que del dercho, alimentado por combustible normal, salió una sustancia incolora.
"Aún faltan otras pruebas, que tienen que ver con la altura y la temperatura, pero vamos a ser pioneros en el hemisferio sur en volar un biocombustible y segundos en el mundo detrás de Estados Unidos", señaló La Torre.
Si bien tiene las mismas prestaciones que el JP1, el "biojet" supone ventajas en lo ambiental, puesto que al utilizarlo se realizarán menos emisiones de carbono fósil y azufre, contibuyento así a atenuar el efecto invernadero.
También supone ventajas económicas ante "la caída de las reservas internacionales de combustibles fósiles", hecho que marca "la necesidad de utilizar energías alternativas", tal como indicó la ministra de Defensa, Nilda Garré, presente el acto junto al jefe de la Fuerza Aérea Argentina, brigadier Normando Constantino, entre otras autoridades.
Constantino calificó como un "honor" para las FAA la presentación del proyecto que "colabora con la defensa del medio ambiente y que hace también a la defensa nacional" y remarcó que la demostración de vuelo se realizó con un "combustible desarrolLado en el país y con un avión argentino".
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