El Gobierno anunció suba de salarios en las FFAA
Por Jorge Garcia
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El ministro de Defensa,
Arturo Puricelli, indicó que habrá mejoras que van del 9% al 21%. El jefe de la Armada dio un duro discurso.
Gendarmes y prefectos habían convocado a medidas de fuerza
Crédito foto: Prensa Ministerio de Defensa
El ministro de Defensa,
Arturo Puricelli, asistió al Edificio Libertad de la Armada para conmemorar los 156 años del “tránsito a la inmortalidad del Almirante Brown” y dio a conocer que habrá una
“recomposición salarial en las escalas de suboficiales”.
El anuncio se plasmó en horas previas a una convocatoria para protestar que están realizando integrantes de las fuerzas armadas y de seguridad (Prefectura y Gendarmería) por la liquidación de los haberes a partir de los decretos 1.305 y 1.307.
“Nosotros nos ajustamos a derecho”, afirmó el ministro, y argumentó que
“desde hace más de 20 años vienen teniendo subas no remunerativas. El (decreto)1.305 vino a empezar a resolver el problema”.
Con la puesta en marcha del nuevo esquema de liquidación de los salarios, los oficiales percibieron sus ingresos sin inconvenientes y hubo caída de los amparos. Estos están fundados en los pagos de suplementos no remunertivos y que afectaban a la hora del retiro.
Pero el punto crítico que había quedado desde la implementación del Decreto 1.305 era el ingreso de los suboficiales, que vieron un "achatamiento" en las escalas.
El aumento en los haberes para marzo –que se cobrará desde abril– quedará de la siguiente manera, según pudo saber
Infobae:
suboficial Mayor (19%), suboficial Principal (21%), suboficial Ayudante (16%) y sargento Primero (9%).
El acto tomó lugar en el tercer piso del edificio de la Armada con la presencia del jefe del Estado Mayor Conjunto, brigadier
Jorge Chavalier; el jefe del Ejército, teniente general
Luis Pozzi; y el secretario general de la Fuerza Aérea, brigadier
Lozada Acuña (el jefe
Normando Costantino está en misión oficial en Chile).
El anfitrión del evento para recordar la figura de Brown fue el jefe de la Armada,
Daniel Martin. Este fue el encargado desde su fuerza militar de llamar la atención de los subordinados ante posibles cuestionamientos a los mandos superiores por el reclamo de salarios.
“Si permitimos que se resienta la subordinación, se resquebrajará el orden y nos convertiremos en un cuerpo desarticulado, proclive a la decadencia. Si nos dejamos ganar por el descreimiento, por la ausencia de confianza en nosotros, en nuestros pares, subordinados y superiores, terminaremos destrozando la estima propia y ajena, así como la dignidad institucional, erigida sobre el esfuerzo de quienes nos precedieron en esto”.
Martin tuvo la palabra antes que el ministro Puricelli y pidió en tono moderado por los salarios diciendo:
“Desde ya que la digna retribución que el trabajo merece no representa una cuestión menor. Tan sensible cuestión es materia actual y de tratamiento continuo en el sector político –su ámbito natural–adonde hemos acercado algunas propuestas y la visión que percibimos de la situación presente”.
El impacto de la medida gubernamental beneficiará a los suboficiales del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, pero también a la Gendarmería porque hay un
“enganche” en los salarios.
La suma involucrada en esta decisión
representará para el Estado entre $1.000 y $1.300 millones, según pudo saber
Infobae.
El aumento proyectado intentará desalentar las posibles protestas, que, a entender de Puricelli, “están siendo convocadas a través de las redes de internet por aquellos que antes tuvieron responsabilidad en el país y nos dejaron los problemas que aún nos aquejan”.
“No se crean los cantos de sirena. Que cumplan con la exhortación (Martin), que no lleven a ninguna insubordinación. Eso sería de la más baja estofa”, elevó la voz el funcionario, quien acostumbra tener un timbre moderado, pero la ocasión lo envalentonó para recordar el discurso de la
presidente Cristina Kirchner en el Congreso.
“Hemos ganado una década. La Argentina hoy en defensa nacional está más fuerte y segura que en el siglo XX, cuando tenía una de las principales flotas de Latinoamérica. Sabemos dónde estamos parados en la integración regional”, señaló Puricelli.
Cuestionó a las cúpulas militares que apoyaron las gestiones de 1955 que “
destruyeron la fábrica militar”, como “las políticas de José Alfredo Martínez de Hoz”. “Es necesario recuperar nuestra industria militar para emplearla en nuestro instrumento operacional. Y no tener dependencia tecnológica”.
Monseñor Germán Carmona, del obispado castrense, dio las palabras iniciales invocando a “nuestra señora Stella Maris para esta nueva zarpada”.
Y el cierre del acto corrió por cuenta de Puricelli, que al final de su discurso –con anuncio incluido– apuntó:
“Espero que el próximo año saluden con más fuerza”.