El 24 de Mayo del 2001, un Cessna 152 biplaza despegó desde un aeropuerto del Lìbano con un solo ocupante abordo y comenzó a volar a lo largo de toda la costa libanesa ingresando en dos oportunidades al espacio aéreo israelí sin tener autorización para ello y sin mantener ningún contacto radial. Luego de sobrevolar la estación de radar de Rosh Ha Nikra, el vuelo fue catalogado como hostil por el centro de vigilancia aérea de Israel.
Un Bell AB-205 perteneciente a Naciones Unidas que se encontraban en la zona, trató de establecer contacto con el Cessna, pero la presencia del helicóptero no fue advertida por el piloto, quien ahora sobrevolaba los alrededores de la ciudad israelita de Haifa. Dos F-16 de la base aérea Ramat David fueron alertados, pero la diferencia de velocidad entre ambos modelos malograron la intercepción. En tanto el solitario Cessnita seguía volando zonas más calientes de Israel, incluso la central eléctrica de Ma’or David.
Ya cerca del mediodía, dos helicópteros AH-64A Apache despegaron en alerta y lograron interceptar al Cessna. Sobre Mikhmoret, un poblado costero situado entre Haifa, unos de los Apache, apuntó con láser al Cessna y le disparó un misil Hellfire, el cual impactó sobre la aeronave, la cual de inmediato se desintegró en el aire. Las partes más visibles fueron la proa con el motor, que cayeron a tierra en llamas.
En la fotografìa, se aprecia claramente uno de los Apache y la proa del Cessna cayendo en llamas.
Este incidente no tomó mucho estado público, ya que cuando se comenzaron a filtrar los primeros rumores, todo fue tapado por la conmoción que causaron los atentados del 11 de Septiembre en EEUU. Lo cierto es que el Apache, aún tratándose de la serie inicial- fue capaz de realizar un derribo aire-aire utilizando un misil diseñado para combatir carros de combate y blindados. La gran pregunta es si no hubiera sido más lógico y económico utilizar el cañón de 30 mm o verificar si un pequeño Cessna 152 representaba una amenaza real para Israel.
No por nada me acuerdo del Cessna 172 que aterrizó en la Plaza Roja de Moscú o casualmente el otro 172 que se estrelló contra la Casa Blanca en Washington. Evidentemente los israelìes no perdieron el tiempo ni dudaron, ya que un Cessna por pequeño que sea, puede causar un daño mayor por ejemplo en una central eléctrica o en un puesto de radar. Dispara y luego pregunta.....
Un Bell AB-205 perteneciente a Naciones Unidas que se encontraban en la zona, trató de establecer contacto con el Cessna, pero la presencia del helicóptero no fue advertida por el piloto, quien ahora sobrevolaba los alrededores de la ciudad israelita de Haifa. Dos F-16 de la base aérea Ramat David fueron alertados, pero la diferencia de velocidad entre ambos modelos malograron la intercepción. En tanto el solitario Cessnita seguía volando zonas más calientes de Israel, incluso la central eléctrica de Ma’or David.
Ya cerca del mediodía, dos helicópteros AH-64A Apache despegaron en alerta y lograron interceptar al Cessna. Sobre Mikhmoret, un poblado costero situado entre Haifa, unos de los Apache, apuntó con láser al Cessna y le disparó un misil Hellfire, el cual impactó sobre la aeronave, la cual de inmediato se desintegró en el aire. Las partes más visibles fueron la proa con el motor, que cayeron a tierra en llamas.
En la fotografìa, se aprecia claramente uno de los Apache y la proa del Cessna cayendo en llamas.
Este incidente no tomó mucho estado público, ya que cuando se comenzaron a filtrar los primeros rumores, todo fue tapado por la conmoción que causaron los atentados del 11 de Septiembre en EEUU. Lo cierto es que el Apache, aún tratándose de la serie inicial- fue capaz de realizar un derribo aire-aire utilizando un misil diseñado para combatir carros de combate y blindados. La gran pregunta es si no hubiera sido más lógico y económico utilizar el cañón de 30 mm o verificar si un pequeño Cessna 152 representaba una amenaza real para Israel.
No por nada me acuerdo del Cessna 172 que aterrizó en la Plaza Roja de Moscú o casualmente el otro 172 que se estrelló contra la Casa Blanca en Washington. Evidentemente los israelìes no perdieron el tiempo ni dudaron, ya que un Cessna por pequeño que sea, puede causar un daño mayor por ejemplo en una central eléctrica o en un puesto de radar. Dispara y luego pregunta.....