Me faltó tiempo”, reveló el ex presidente de Colombia. Su objetivo era que el Ejército ingrese al país vecino para buscar a los líderes de las FARC y el ELN, como lo hizo en Ecuador
Durante una conferencia en una universidad en Medellín, Álvaro Uribe explicó que tuvo tres opciones para "resolver" las denuncias sobre la presencia en Venezuela de guerrilleros de las FARC. "Nosotros teníamos pruebas de los campamentos guerrilleros en Venezuela, filmaciones de personas nuestras que ingresaron allá. Entonces, yo tenía tres opciones: primero, quedarme callado; segundo, realizar un operativo militar en Venezuela, (pero) me faltó tiempo; y tercero, lo que hicimos, denunciar ante la OEA", expresó el ex mandatario.
El ex jefe de Estado dijo entender que el presidente Juan Manuel Santos, ministro de Defensa en ese entonces, sea prudente frente al tema, pero indicó que "una cosa es tener una actitud prudente y otra cosa es legitimar esa dictadura, como él lo ha hecho".
Según Uribe "los bandidos que ha entregado Venezuela, son premios de consolación para hacerle creer a la comunidad internacional que está cooperando", debido a que "allá siguen los grandes jefes de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y varios narcotraficantes".
A lo largo de su Gobierno, el ex presidente protagonizó una complicada relación con su homólogo de Venezuela, Hugo Chávez, quien en 2008 envió tanques de guerra a la frontera por el ataque que militares colombianos realizaron en territorio ecuatoriano para abatir a alias "Raúl Reyes", uno de los jefes de las FARC.
Poco antes de terminar el gobierno de Uribe, Chávez rompió las relaciones a raíz de nuevas denuncias del entonces presidente colombiano en el sentido de que Venezuela daba refugio a jefes de las FARC. Sin embargo, las relaciones se restablecieron pocas horas después de que Santos jurara como presidente en agosto de 2010, tras lo cual comenzó un acercamiento con Chávez que recibió de diversos sectores políticos en Colombia y muchas críticas de Uribe, que comenzó a alejarse de su sucesor.
Pese a que la situación diplomática entre los dos países mejoró sustancialmente, la rivalidad entre Uribe y el mandatario venezolano continuó. En varias ocasiones, el ex jefe de Estado colombiano ha calificado el gobierno de Chávez como una dictadura, ha dicho que el presidente es un "asesino" y ha apoyado en eventos políticos a la oposición venezolana desde Colombia.
Aunque el gobierno del presidente Santos ha preferido no afirmar que los jefes guerrilleros, como alias "Timochenko", están en territorio venezolano, el actual ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, ha reiterado que "es claro que no se encuentran en Colombia".
infobae
Durante una conferencia en una universidad en Medellín, Álvaro Uribe explicó que tuvo tres opciones para "resolver" las denuncias sobre la presencia en Venezuela de guerrilleros de las FARC. "Nosotros teníamos pruebas de los campamentos guerrilleros en Venezuela, filmaciones de personas nuestras que ingresaron allá. Entonces, yo tenía tres opciones: primero, quedarme callado; segundo, realizar un operativo militar en Venezuela, (pero) me faltó tiempo; y tercero, lo que hicimos, denunciar ante la OEA", expresó el ex mandatario.
El ex jefe de Estado dijo entender que el presidente Juan Manuel Santos, ministro de Defensa en ese entonces, sea prudente frente al tema, pero indicó que "una cosa es tener una actitud prudente y otra cosa es legitimar esa dictadura, como él lo ha hecho".
Según Uribe "los bandidos que ha entregado Venezuela, son premios de consolación para hacerle creer a la comunidad internacional que está cooperando", debido a que "allá siguen los grandes jefes de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y varios narcotraficantes".
A lo largo de su Gobierno, el ex presidente protagonizó una complicada relación con su homólogo de Venezuela, Hugo Chávez, quien en 2008 envió tanques de guerra a la frontera por el ataque que militares colombianos realizaron en territorio ecuatoriano para abatir a alias "Raúl Reyes", uno de los jefes de las FARC.
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Poco antes de terminar el gobierno de Uribe, Chávez rompió las relaciones a raíz de nuevas denuncias del entonces presidente colombiano en el sentido de que Venezuela daba refugio a jefes de las FARC. Sin embargo, las relaciones se restablecieron pocas horas después de que Santos jurara como presidente en agosto de 2010, tras lo cual comenzó un acercamiento con Chávez que recibió de diversos sectores políticos en Colombia y muchas críticas de Uribe, que comenzó a alejarse de su sucesor.
Pese a que la situación diplomática entre los dos países mejoró sustancialmente, la rivalidad entre Uribe y el mandatario venezolano continuó. En varias ocasiones, el ex jefe de Estado colombiano ha calificado el gobierno de Chávez como una dictadura, ha dicho que el presidente es un "asesino" y ha apoyado en eventos políticos a la oposición venezolana desde Colombia.
Aunque el gobierno del presidente Santos ha preferido no afirmar que los jefes guerrilleros, como alias "Timochenko", están en territorio venezolano, el actual ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, ha reiterado que "es claro que no se encuentran en Colombia".
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