Por el C-24, entre otros.
No es necesario tener embajada en Londres para sentarse a negociar con ellos si tienen ganas de hacerlo.
Hoy, en un contexto diferente, hacemos lo mismo que antes de 1982 (aunque formalmente estábamos mejor parados en cuanto a negociaciones), seguimos siendo funcionales a sus intereses. Seguimos dando "gratis". No más cruceros, no más vuelos. Si quieren algo, que cedan algo. Y encima nos tenemos que bancar el cínico y psicopatico discurso de que se sienten "decepcionados" por nuestra "actitud" para con los isleños (no tenemos ninguna).