Rusia niega otro incidente aéreo en el Báltico
El Ministerio ruso de Defensa negó el domingo las acusaciones de Suecia de que, por segunda ocasión este año, un avión militar ruso estuvo cerca de colisionar con un avión de pasajeros sobre territorio sueco, insistiendo en que las aeronaves nunca estuvieron a menos de 70 kilómetros (42 millas) de distancia.
Las autoridades suecas dijeron que la nave rusa había apagado sus transpondedores para evitar radares comerciales y pasó peligrosamente cerca de un avión de pasajeros que había despegado el viernes de Copenhague.
El portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov, dijo el domingo que el avión militar cumplía las normas del espacio aéreo internacional y volaba a una distancia segura de las rutas empleadas por los vuelos comerciales.
"No hubo prerrequisitos para un accidente aéreo", afirmó el ministro en un comunicado recogido por las agencias rusas de noticias.
El jefe de la fuerza aérea sueca, el mayor general Micael Byden, dijo el sábado que el incidente, registrado en espacio aéreo internacional, parecía "bastante serio" y el vuelo comercial recibió orden inmediata de cambiar de rumbo, pero que no había sido tan grave como el de marzo, cuando un avión ruso que volaba sin transpondedores estuvo a 100 metros (300 pies) de un avión de SAS que había despegado de Copenhague.
En los últimos meses, Rusia ha incrementado su presencia militar en la zona del mar Báltico conforme subían las tensiones con Occidente por el conflicto en Ucrania. La OTAN también realiza patrullas aéreas sobre el Báltico, y rota a las unidades militares de la alianza en los países miembros de la región.
Konashenkov dijo que en los últimos meses se han triplicado los vuelos de aviones militares de la OTAN a lo largo de la frontera rusa, y que el viernes había un avión de reconocimiento de la OTAN volando entre la nave rusa y el avión de pasajeros.
AP