Vamos por partes, dijo Jack:
El jefe de la Casa Militar es un Teniente Coronel actualmente. A ese cargo lo fueron "devaluando" respecto de otras épocas en que era cubierto por un General o equivalente.
En cuanto al tema de discusión, a mi criterio está totalmente descolgado. Vamos a la cita textual del discurso:
Políticas de género: bueno, acá me voy a ir con una deuda, si bien hemos avanzado muchísimo en materia de género y ha aumentado un 50 por ciento el ingreso de mujeres a nuestras Fuerzas Armadas y el 15 por ciento de los efectivos son congéneres, yo decía en cada discurso que no quería irme si ver una generala, un general, no sé cómo se dice. Alguna vez un Almirante me chicaneó porque me dijo:” ¿Y cómo le va a decir al Almirante? Almiranta”. Y yo le respondí: “bueno, ya encontraremos el término, Almirante, ya la vamos a encontrar”. Pero hoy charlando esto con el ministro Rossi, me decía que tal vez, en uno o dos años más, podamos tener una mujer con las palmas, no sé qué llevan los almirantes, pero siempre me impresionan mucho las palmas, debe ser porque… ¿qué llevan? Laureles, que son palmas también o no, bueno no importa.
En primer lugar, me parece un enfoque totalmente superficial del asunto (al margen de, una vez más, defecarse en el protocolo y el respeto que la gente con la que compartió la cena merece; "¿qué llevan? ¿palmas o laureles? bueh, no importa"). O sea, quiero una mujer conduciendo porque... quiero una mujer conduciendo. El género por el género mismo. ¿El debate está en si se llamará almirante o almiranta? Meu deus...
Y es un vicio que creo tienen casi todas las iniciativas de esta clase. Entiendo que para dar empujones a situaciones en las que hay mucho por hacer esté bueno de vez en cuando algún gesto, pero insistir por capricho es un error. ¿Está bueno que hayan puesto mujeres como edecanes, por el simple hecho de ser mujeres? ¿Cuál era el significado de ese puesto en la carrera militar?
Además, ni ella ni su ministro tienen la más remota idea de lo que hablaron. Si así fuera, deberían saber que en los escalafones castrenses hay un mínimo de años para cada grado. Si lo que quieren es ver a una mujer con "palmas o laureles" en un par de años, será cuestión de que alguna de las profesionales asimiladas llegue. Ni más ni menos que eso. Si lo que quieren es que además sean Jefes de Estado Mayor General, son capaces de poner a una dentista para conducir una fuerza por simple antojo.
Resumiendo, muchas mujeres entraron a los institutos de formación para cuerpo comando. Será cuestión de que avancen en sus carreras y lleguen a lo más alto. Para eso deberán mostrar lo que valen (como debiera ocurrir con cualquier miembro de las FFAA), y cumplir con cada etapa de sus carreras. No creo que haga falta que sean Rambos, que levanten pesas de 150 kg con un brazo o que corran los 100 mts. en 5 segundos. Seguramente, en varios años habrá una mujer con "palmas o laureles", como seguramente ocurrirá en muchos otros países del mundo. Lo que espero, personalmente, es que el próximo presidente de la Argentina tenga como política de Defensa algo un poco más profundo que nombrar a una "almirante o almiranta".