¿Podrías explicar esto, por favor, Flavio?
Me voy a extender un poco en la historia de todo esto y voy a expresar mi opinión de algunos porqué, que pueden aportar al tema que discutimos acá (El mejor fusil para el EA)
Ya antes de la IIWW se venía estudiando en algunas potencias el tema del cambio de los calibres de los fusiles militares porque los calibres de los fusiles a cerrojo manual eran demasiado potentes y sus vainas muy largas para operar correctamente en armas semiautomáticas o ametralladoras ligeras, su retroceso era muy grande, y la munición era mucho más pesada para transportar teniendo en cuenta el mayor consumo de las misma en este tipo de armas. Todos apuntaron a diámetros de punta parecidos a los que se venían usando (entre 6,5 y 8mm) y vainas más cortas, más parecidas a las de arma corta que se habían mostrado eficientes en mecanismos automáticos pero abotelladas. Ejemplos fueron 7,92x33mm Kurz alemán, el .276 Pedersen en EEUU, más tarde ya en la guerra aparecerían el 7,62x39mm ruso y luego el .280 British.
Del lado soviético luego de la guerra esto prosperó y el AK adoptó este calibre intermedio 7,62x39mm (algunos dicen que inspirado en el alemán), pero en occidente no fue tan simple el asunto, primero ya en el '32 el Garand en .276 Pedersen fue rechazado cuando se demostró que éste se podía recamarar para el potente .30-06, a mi parecer un error, pero el ethos yanqui del riflero, la potencia, la precisión a largo alcance, "un tiro, un muerto", etc. los traicionó y no vieron venir el cambio, a los soldados se los entrenaba para ir a la guerra y apuntar cada tiro, cuando llegaban al frente, los veteranos les decían que se olviden de eso, y usen el fusil en una forma más dinámica, para cubrirse ellos mismos con el fuego al desplazarse, etc... Así fue que les hubiera convenido para esto el .276 que en el Garand incluso cargaba más munición, era más liviano y tenía menor retroceso. Para variar los militares se prepararon para la anterior guerra (estática) y no para la siguiente (de movilidad y maniobra)...
Terminada la guerra, lo aprendido cayó casi todo en saco roto, en mi opinión por el orgullo yanqui, por la maldita tradición nuevamente, y un poco porque se aprende más de las derrotas que de las victorias. Por eso tras la guerra se adopta y fuerza a la recién nacida OTAN a adoptar el 7,62x51mm que seguía siendo demasiado potente y pesado, incluso el FAL nació en 7,92x33mm Kurz, los ingleses lo estaban estudiando en .280 British, y todo se abandona por la presión de EEUU.
Para ese momento ya en USA se estudiaba su propio calibre intermedio que luego impondrían a sus socios, pero (y acá vuelvo a expresar mi opinión...) a diferencia del resto que prácticamente se limitaban a acortar vainas de calibres pesados, con el resultado de munición con más caída, pero que conservaban más energía en distancias medias, los yanquis se basaron en un calibre deportivo para tiro varmint y benchrest muy preciso (.222 Remington) con una trayectoria muy tendida y que basaba su stopping power en el efecto hidráulico y la fragmentación de la munición muy liviana. Acá nuevamente los traiciona su ethos de la precisión del riflero useño, el "un tiro, una baja" y blablabla, más el mito muy de moda en esos años de que un herido ocupaba más hombres que se extraían al combate para atenderlo que un muerto, y todo ese verso. Incluso creo que a esa altura del partido cualquier desarrollo parecido a los históricamente realizados en USA y otras partes del mundo se parecería demasiado al 7,62x39 y sería como copiar a los rusos que lo venían usando desde 15 años antes, y el orgullo yanqui en plena guerra fría los llevó a buscar un camino diferente...
A pesar que a lo largo de los más de 50 años que está el .5,56x45 en servicio, se le han mejorado sus prestaciones mucho en sucesivas versiones, sigue siendo una munición con puntas livianas, inestable, y que pierde rápidamente la energía al perder velocidad, ya sea por la distancia del tiro, o por atravesar cubiertas o vegetación o en el caso que hablábamos de la carabina M4 que al tener el cañón casi 150mm más corto que el M-16 pierde unos 56 m/s (casi un 10%) de velocidad inicial (V° o velocidad en boca) y por esto pierde mucha de su capacidad de fracmentación y su efecto hidráulico, con la pérdida consecuente de su ya escasa capacidad de detención y ahora estudian un calibre más pesado (6,8x43mm)
Como verán no le tengo mucho cariño al 5,56x45mm, puedo estar equivocado.
Saludos.
Flavio.