Por qué Afganistán no es Vietnam
PABLO PARDO desde WASHINGTON
30 de julio de 2009.-
1.- Porque Afganistán no ha sido "la tumba de los imperios".
Es un cliché, sobre todo en EEUU. Pero no es cierto. Veamos la Historia. Entre 1879 y 1919, Reino Unido controló la política exterior afgana, en virtud del tratado firmado tras la Segunda Guerra Angloafgana.
Es más, el moderno Afganistán es precisamente consecuencia del deseo británico de tener un Estado tapón que separara a la India del Imperio ruso. Así quedó Afganistán como lo que es hoy: un retal de nacionalidades partidas entre varios países: pashtunes (entre Afganistán y Pakistán por la aberración histórica de la Línea Durand); tayikos (entre Afganistán, Tayikistán y Uzbekistán); uzbecos (entre Uzebkistán y Afganistán); turcomanos (entre Turkmenistán y Afganistán); baluchis (Pajkistán, Irán y Afganistán); aimaks (Afganistán e Irán); y así sucesivamente. El único gran grupo etnolinguístico del país que no tiene representación fuera son los hazaras, que precisamente fueron considerados ciudadanos de tercera hasta la invasión estadounidense de 2001.
2.- Porque la Unión Soviética no perdió la Guerra de Afganistán
Es otro cliché, esta vez con el sesgo ideológico al anterior. Lo cierto es que el comunismo resistió en Afganistán mas que en la URSS. La URSS desapareció el 25 de diciembre de 1991. El régimen comunista afgano duró hasta el 19 de abril de 1992, cuando, ante la falta de ayuda de Moscú, el sindicalista reconvertido en líder de una milicia (y ahora en aliado de EEUU) Abdul Rashid Dostum se amotinó y se unió al líder islamista Ahmad Shah Masud para tomar Kabul.
De hecho, cuando en 1989 la URSS se retiró, el Ejército Rojo -o su aliado afgano- controlaba todas las ciudades del país. Incluso tenía bases en el valle del Panjshir, donde operaba Masud, el líder de la resistencia más capaz (y que, debido a que era el más independiente, nunca recibió nada de EEUU ni de Arabia Saudi ni de Pakistán, por más que Tom Hanks y Julia Roberts nos mientan en ese horror cinematográfico llamado "La guerra de Charlie Wilson" que masacra el excelente libro de George Crile). Es cierto que la URSS no podía imponerse en todo el territorio. Pero el igualmente cierto que la oposición, dividida y cada vez más manipulada por Arabia Saudí y Pakistán, no era una alternativa.
3.- Porque Estados Unidos no está solo
En Vietnam, EEUU sólo tuvo apoyo testimonial de Corea del Sur, Australia y algún aliado más (España, por ejemplo, envió a doce médicos militares). En Afganistán hay soldados de 42 países. Muchos de ellos apenas juegan--apenas jugamos--un papel significativo. Otros, como Reino Unido, Canadá u Holanda, sí. Un país musulmán, Turquïa, dirigió la ISAF en 2005.
4.- Porque los talibán están divididos
El Vietcong, como buena organización marxista-leninista, estaba unificado. Los islamistas afganos, no. En realidad, los afganos nunca han estado unificados, así que eso no es raro. Por un lado están los seguidores de Guilbuddin Heckmatyar que, paradojas de la vida, fue el guerrillero anticomunista favrotido de EEUU en los 80, cuando recibió la mitad de los 3.000 millones de dólares--2.100 millones de euros--que Washington envió a las fuerzas que combatían a Moscú. Sus fuerzas se sitúan en el noreste, alrededor de la provincia de Kunar. Más al sur están los talibán, también divididos. Por un lado están grupos muy cercanos a Al Qaeda, como los que dirige Jalaluddin Haqqani, que fue, precisamente, amigo de Charlie Wilson y que en los 80 cobraba directamente de la CIA. Por otro, hay grupos más tradicionalistas, como los de Abdul Ghani Baradar, contra los que ahora mismo combaten EEUU y el Reino Unido en Helmand. Además, al igual que pasaba con la URSS, hay decenas de bandas que hacen la guerra por su cuenta, normalmente a tiempo parcial. Un dato: en febrero de 1989, cuando Moscú acabó de retirarse, tenía censadas 729 organizaciones guerrilleras diferentes.
5.- Porque nunca va a haber una ofensiva del Tet
La clave para la retirada de EEUU de Vietnam fue la ofensiva del Tet, en 1968. Fue una operación militar desastrosa para el Vietcong. Pero su éxito político fue tal que la opinión pública de EEUU pasó a oponerse a la guerra. El Tet exigió una coordinación masiva de los comunistas vietnamitas que es inalcanzable para los talibán.
6.- Porque Pakistán no es Vietnam del Norte
Sin Vietnam del Norte, el Vietcong no habría ganado nunca. Allí tenía su retaguardia y, aunque EEUU lo bombardeaba de forma masiva, nunca lo invadió. Como contraste, los talibán sólo dominan regiones de Pakistán. Es cierto que tienen bajo su jurisdicción una buena parte de ese país, ya que la actitud del Gobierno de Islamabad es siempre ambivalente con esos grupos (algo similar al PNV con ETA), pero no tienen todo el país trabajando para ellos. Además, una buena parte de la población de Pakistán se opone a los talibán. Otra cosa, eso sí, s la posibilidad de que los talibán o Al Qaeda se hagan con alguna bomba atómica pakistaní. En ese caso, la situación sería muy diferente.
7.- Porque los talibán son sólo pashtunes
Los pashtunes suponen el 40% de la población afgana. El resto del país nunca aceptaría pacíficamente un control total de la vida política por ese grupo. No hay más que ver dónde se producen los combates entre EEUU y sus aliados de la OTAN: siempre en zonas pashtunes o, al menos, mixtas. En los 90, sólo la ayuda militar pakistaní y saudí (y la complicidad de EEUU) permitió a los talibán tener cierto control sobre Afganistán, aunque con numerosos focos de resistencia en las áreas no pashtunes. Por el contrario, el Vietcong era popular en todo Vietnam.
8.- Porque el Golfo no es China ni la URSS
Sin la ayuda militar china y soviética, el Vietcong nunca habría podido ganar. Hay que recordar que en 1972 el Ejército regular de Vietnam del Norte llevó a cabo una invasión en toda regla de Vietnam del Sur. Los talibán carecen de equipo y de dinero para ello. Lo mas a que pueden aspirar es a atentados suicidas y emboscadas. Aunque cuentan con apoyos en Pakistán, Arabia Saudí y otros países del Golfo, no tienen el respaldo de una superpotencia.
Fuente:
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/07/30/cronicasdesdeeeuu/1248972899.html
Willy
PABLO PARDO desde WASHINGTON
30 de julio de 2009.-
1.- Porque Afganistán no ha sido "la tumba de los imperios".
Es un cliché, sobre todo en EEUU. Pero no es cierto. Veamos la Historia. Entre 1879 y 1919, Reino Unido controló la política exterior afgana, en virtud del tratado firmado tras la Segunda Guerra Angloafgana.
Es más, el moderno Afganistán es precisamente consecuencia del deseo británico de tener un Estado tapón que separara a la India del Imperio ruso. Así quedó Afganistán como lo que es hoy: un retal de nacionalidades partidas entre varios países: pashtunes (entre Afganistán y Pakistán por la aberración histórica de la Línea Durand); tayikos (entre Afganistán, Tayikistán y Uzbekistán); uzbecos (entre Uzebkistán y Afganistán); turcomanos (entre Turkmenistán y Afganistán); baluchis (Pajkistán, Irán y Afganistán); aimaks (Afganistán e Irán); y así sucesivamente. El único gran grupo etnolinguístico del país que no tiene representación fuera son los hazaras, que precisamente fueron considerados ciudadanos de tercera hasta la invasión estadounidense de 2001.
2.- Porque la Unión Soviética no perdió la Guerra de Afganistán
Es otro cliché, esta vez con el sesgo ideológico al anterior. Lo cierto es que el comunismo resistió en Afganistán mas que en la URSS. La URSS desapareció el 25 de diciembre de 1991. El régimen comunista afgano duró hasta el 19 de abril de 1992, cuando, ante la falta de ayuda de Moscú, el sindicalista reconvertido en líder de una milicia (y ahora en aliado de EEUU) Abdul Rashid Dostum se amotinó y se unió al líder islamista Ahmad Shah Masud para tomar Kabul.
De hecho, cuando en 1989 la URSS se retiró, el Ejército Rojo -o su aliado afgano- controlaba todas las ciudades del país. Incluso tenía bases en el valle del Panjshir, donde operaba Masud, el líder de la resistencia más capaz (y que, debido a que era el más independiente, nunca recibió nada de EEUU ni de Arabia Saudi ni de Pakistán, por más que Tom Hanks y Julia Roberts nos mientan en ese horror cinematográfico llamado "La guerra de Charlie Wilson" que masacra el excelente libro de George Crile). Es cierto que la URSS no podía imponerse en todo el territorio. Pero el igualmente cierto que la oposición, dividida y cada vez más manipulada por Arabia Saudí y Pakistán, no era una alternativa.
3.- Porque Estados Unidos no está solo
En Vietnam, EEUU sólo tuvo apoyo testimonial de Corea del Sur, Australia y algún aliado más (España, por ejemplo, envió a doce médicos militares). En Afganistán hay soldados de 42 países. Muchos de ellos apenas juegan--apenas jugamos--un papel significativo. Otros, como Reino Unido, Canadá u Holanda, sí. Un país musulmán, Turquïa, dirigió la ISAF en 2005.
4.- Porque los talibán están divididos
El Vietcong, como buena organización marxista-leninista, estaba unificado. Los islamistas afganos, no. En realidad, los afganos nunca han estado unificados, así que eso no es raro. Por un lado están los seguidores de Guilbuddin Heckmatyar que, paradojas de la vida, fue el guerrillero anticomunista favrotido de EEUU en los 80, cuando recibió la mitad de los 3.000 millones de dólares--2.100 millones de euros--que Washington envió a las fuerzas que combatían a Moscú. Sus fuerzas se sitúan en el noreste, alrededor de la provincia de Kunar. Más al sur están los talibán, también divididos. Por un lado están grupos muy cercanos a Al Qaeda, como los que dirige Jalaluddin Haqqani, que fue, precisamente, amigo de Charlie Wilson y que en los 80 cobraba directamente de la CIA. Por otro, hay grupos más tradicionalistas, como los de Abdul Ghani Baradar, contra los que ahora mismo combaten EEUU y el Reino Unido en Helmand. Además, al igual que pasaba con la URSS, hay decenas de bandas que hacen la guerra por su cuenta, normalmente a tiempo parcial. Un dato: en febrero de 1989, cuando Moscú acabó de retirarse, tenía censadas 729 organizaciones guerrilleras diferentes.
5.- Porque nunca va a haber una ofensiva del Tet
La clave para la retirada de EEUU de Vietnam fue la ofensiva del Tet, en 1968. Fue una operación militar desastrosa para el Vietcong. Pero su éxito político fue tal que la opinión pública de EEUU pasó a oponerse a la guerra. El Tet exigió una coordinación masiva de los comunistas vietnamitas que es inalcanzable para los talibán.
6.- Porque Pakistán no es Vietnam del Norte
Sin Vietnam del Norte, el Vietcong no habría ganado nunca. Allí tenía su retaguardia y, aunque EEUU lo bombardeaba de forma masiva, nunca lo invadió. Como contraste, los talibán sólo dominan regiones de Pakistán. Es cierto que tienen bajo su jurisdicción una buena parte de ese país, ya que la actitud del Gobierno de Islamabad es siempre ambivalente con esos grupos (algo similar al PNV con ETA), pero no tienen todo el país trabajando para ellos. Además, una buena parte de la población de Pakistán se opone a los talibán. Otra cosa, eso sí, s la posibilidad de que los talibán o Al Qaeda se hagan con alguna bomba atómica pakistaní. En ese caso, la situación sería muy diferente.
7.- Porque los talibán son sólo pashtunes
Los pashtunes suponen el 40% de la población afgana. El resto del país nunca aceptaría pacíficamente un control total de la vida política por ese grupo. No hay más que ver dónde se producen los combates entre EEUU y sus aliados de la OTAN: siempre en zonas pashtunes o, al menos, mixtas. En los 90, sólo la ayuda militar pakistaní y saudí (y la complicidad de EEUU) permitió a los talibán tener cierto control sobre Afganistán, aunque con numerosos focos de resistencia en las áreas no pashtunes. Por el contrario, el Vietcong era popular en todo Vietnam.
8.- Porque el Golfo no es China ni la URSS
Sin la ayuda militar china y soviética, el Vietcong nunca habría podido ganar. Hay que recordar que en 1972 el Ejército regular de Vietnam del Norte llevó a cabo una invasión en toda regla de Vietnam del Sur. Los talibán carecen de equipo y de dinero para ello. Lo mas a que pueden aspirar es a atentados suicidas y emboscadas. Aunque cuentan con apoyos en Pakistán, Arabia Saudí y otros países del Golfo, no tienen el respaldo de una superpotencia.
Fuente:
http://www.elmundo.es/elmundo/2009/07/30/cronicasdesdeeeuu/1248972899.html
Willy