En este foro se habla de historia, no de historia alternativa. No obstante quisiera que pudiesen arrojar un poco de luz sobre esta acción pos-guerra. Tengo algunas fotos y mapas pero no se como postearlos.
En 1947 la mayor fuerza militar expedicionaria que los EE. UU. haya enviado a la Antártida hasta el presente comienza a desplegarse desde las bases norteamericanas en el Mar de Ross (al sur de Nueva Zelandia) hacia el continente, divididos en tres grupos convergentes, iniciando una invasión de vastos alcances.
La Task Force 68 está compuesta por 13 barcos, 2 lanzadores de hidroplanos, un buque de comunicaciones, un submarino y un portaviones. Los efectivos embarcados suman 4.200. Lidera la operación el Almirante Richard Byrd.
Oficialmente la Operación Highjump eran simples maniobras que tenían por objeto "probar equipos militares y tropa en condiciones antárticas"
La expedición estaba planeada y equipada para una duración de 6 a 8 meses. La misión es esencialmente militar, se ha desestimado la participación de observadores extranjeros y ha contado con el concurso de un limitado número de científicos especializados.
En 1938 y 1939, la Sociedad Alemana de Investigaciones Polares respalda sendas exploraciones liderada por el capitán Alfred Ritscher, quien navega en el buque Schwabenland. La expedición arriba a la región conocida como Queen Maud Land y aerofotografía más de 600.000 km2.
Las circunstancias que se viven bajo el régimen NS llevarán a suponer que mas allá del carácter civil y científico de las mismas influyeron de forma decisiva consideraciones estratégicas y militares.
Durante la guerra, escuadrillas de submarinos alemanes habían estado incansable y frenéticamente yendo y viniendo de la Antártida. Los alemanes estaban construyendo enormes complejos subterráneos en las tierras antárticas, no escatimando recursos ni científicos.
Richard Byrd participa en la Operación High Jump como oficial a cargo de la misma en tanto que el comando de la Task Force 68.
Si el propósito declarado de la operación era el del entrenamiento de personal y puesta a prueba de equipos militares en condiciones extremas, ¿por qué era necesario enviar tantos barcos, unidades y soldados y por qué se prohibió la presencia a observadores extranjeros?
Durante esta operación Byrd había sobrevolado, por lo menos una vez, todo el territorio de Neuschwabenland, desde la dirección sur-oeste hasta las tierras altas de Ritscher (Ritscher Hochland) y las áreas Este del Polo Sur. Sin saberse por qué, Byrd regresa a Estados Unidos en Febrero de 1947 y declara en una entrevista que le hace un reportero que era "necesario para los Estados Unidos tomar acciones defensivas contra aviones de combate enemigos que vienen de las regiones polares"
Otras extrañas declaraciones realizadas en Estados Unidos por Byrd y otros militares en ruedas de prensa hablaban de avistamientos y encuentros con aeronaves de altas capacidades.
Si bien se estimó para la Operación High Jump una duración de seis a ocho meses, las fuerzas invasoras debieron retirarse al cabo de seis semanas, después de numerosas pérdidas no determinadas en material y hombres. Otras fuentes indican que la retirada empezó a las tres semanas, tras producirse decisivos combates.
No sabemos cuáles fueron las bajas reales de los invasores, pero se sabe por ejemplo que el submarino Sennet, oficialmente por causa de los hielos antárticos, llegó a sufrir serias abolladuras en su casco, debiendo ser retirado durante la operación a un puerto de Nueva Zelanda para ser reparado. También se sabe que se perdieron varios aviones de combate y material aéreo de alta tecnología, y que hubo pérdidas humanas, en concreto muertes de marines norteamericanos. ¿Todo esto en una operación de adiestramiento?
En los Estados Unidos fue muy difícil justificar a la opinión pública las bajas acaecidas en la Antártida, pero el caso fue oficialmente cerrado. Los militares llamaron a esta operación como "la guerra de los pingüinos", después de que el gobierno federal declarara una y otra vez a la suspicaz opinión pública norteamericana que en la Antártida sólo vivían pingüinos y que las bajas de personal militar se debían a desafortunados accidentes.
En 1947 la mayor fuerza militar expedicionaria que los EE. UU. haya enviado a la Antártida hasta el presente comienza a desplegarse desde las bases norteamericanas en el Mar de Ross (al sur de Nueva Zelandia) hacia el continente, divididos en tres grupos convergentes, iniciando una invasión de vastos alcances.
La Task Force 68 está compuesta por 13 barcos, 2 lanzadores de hidroplanos, un buque de comunicaciones, un submarino y un portaviones. Los efectivos embarcados suman 4.200. Lidera la operación el Almirante Richard Byrd.
Oficialmente la Operación Highjump eran simples maniobras que tenían por objeto "probar equipos militares y tropa en condiciones antárticas"
La expedición estaba planeada y equipada para una duración de 6 a 8 meses. La misión es esencialmente militar, se ha desestimado la participación de observadores extranjeros y ha contado con el concurso de un limitado número de científicos especializados.
En 1938 y 1939, la Sociedad Alemana de Investigaciones Polares respalda sendas exploraciones liderada por el capitán Alfred Ritscher, quien navega en el buque Schwabenland. La expedición arriba a la región conocida como Queen Maud Land y aerofotografía más de 600.000 km2.
Las circunstancias que se viven bajo el régimen NS llevarán a suponer que mas allá del carácter civil y científico de las mismas influyeron de forma decisiva consideraciones estratégicas y militares.
Durante la guerra, escuadrillas de submarinos alemanes habían estado incansable y frenéticamente yendo y viniendo de la Antártida. Los alemanes estaban construyendo enormes complejos subterráneos en las tierras antárticas, no escatimando recursos ni científicos.
Richard Byrd participa en la Operación High Jump como oficial a cargo de la misma en tanto que el comando de la Task Force 68.
Si el propósito declarado de la operación era el del entrenamiento de personal y puesta a prueba de equipos militares en condiciones extremas, ¿por qué era necesario enviar tantos barcos, unidades y soldados y por qué se prohibió la presencia a observadores extranjeros?
Durante esta operación Byrd había sobrevolado, por lo menos una vez, todo el territorio de Neuschwabenland, desde la dirección sur-oeste hasta las tierras altas de Ritscher (Ritscher Hochland) y las áreas Este del Polo Sur. Sin saberse por qué, Byrd regresa a Estados Unidos en Febrero de 1947 y declara en una entrevista que le hace un reportero que era "necesario para los Estados Unidos tomar acciones defensivas contra aviones de combate enemigos que vienen de las regiones polares"
Otras extrañas declaraciones realizadas en Estados Unidos por Byrd y otros militares en ruedas de prensa hablaban de avistamientos y encuentros con aeronaves de altas capacidades.
Si bien se estimó para la Operación High Jump una duración de seis a ocho meses, las fuerzas invasoras debieron retirarse al cabo de seis semanas, después de numerosas pérdidas no determinadas en material y hombres. Otras fuentes indican que la retirada empezó a las tres semanas, tras producirse decisivos combates.
No sabemos cuáles fueron las bajas reales de los invasores, pero se sabe por ejemplo que el submarino Sennet, oficialmente por causa de los hielos antárticos, llegó a sufrir serias abolladuras en su casco, debiendo ser retirado durante la operación a un puerto de Nueva Zelanda para ser reparado. También se sabe que se perdieron varios aviones de combate y material aéreo de alta tecnología, y que hubo pérdidas humanas, en concreto muertes de marines norteamericanos. ¿Todo esto en una operación de adiestramiento?
En los Estados Unidos fue muy difícil justificar a la opinión pública las bajas acaecidas en la Antártida, pero el caso fue oficialmente cerrado. Los militares llamaron a esta operación como "la guerra de los pingüinos", después de que el gobierno federal declarara una y otra vez a la suspicaz opinión pública norteamericana que en la Antártida sólo vivían pingüinos y que las bajas de personal militar se debían a desafortunados accidentes.