Me temo que la deflagración de gas, si es que sucedió, fue energéticamente de rango muy inferior a la prueba de control y, por supuesto, al evento registrado por el CTBTO. Pero aún así, los efectos sobre la tripulación deben haber sido claramente terminantes.
Hago el siguiente comentario que me parece interesante respecto de esta cuestión: Bruce Rule, quien es el autor principal de la que hoy es la teoría más aceptada sobre las causas de la pérdida del Scorpion, afirmó haber encontrado el rastro hidrofónico de una explosión de baterías revisando (cuarenta años después del hundimiento) los registros del SOSUS para esas fechas. El rastro pasó desapercibido durante todo ese tiempo,
lo que nos da una idea de qué tan tenue era. Y no es que no buscaron en 1968... Tal evento tiene registro
algo más de 20 minutos antes del momento en que se escuchó (creo que en una estación sismológica en Canarias) la implosión del casco. O sea: después de la supuesta explosión de baterías, de la que Rule asume que mató a toda la tripulación del Scorpion, el sub cayó hacia su Crush Depth durante 20 minutos sin control, pero con el casco intacto.
Extrapolando estos datos (con todas las prevenciones del caso) a nuestro asunto con el San Juan: el registro hidrofónico de una eventual deflagración de gas de las baterías a bordo podría haber quedado
afuera de los gráficos provistos por el CTBTO. Y tampoco podemos descartar que, de haber quedado adentro, no tuviera la potencia suficiente como para mover el amperímetro.
Van mis saludos, y mi agradecimiento por el intercambio