Ves, ahí está el tema; vos sos de la postura de que se hace algo por la defensa si se incorpora algo o se moderniza y creer que hacer eso solamente es ser "pro-militar", "defender la soberanía" o cosas por el estilo y es una postura que no comparto.
Y creo que este ejemplo es el más claro, todos queremos que la Defensa sea una política de Estado, pues bien, para que sea de Estado (que pase de gobierno a gobierno) primero debe ser una política pública y para ser esto, debe tener leyes, decretos, resoluciones, que le den un marco de actuación, que defina que es la Defensa y para qué la queremos.
La Ley de Defensa se votó por unanimidad en 1988 y estuvo dormida durante casi 20 años su reglamentación, es decir, que por casi dos décadas, si vos averiguabas que entiende el Estado Argentino por Defensa y te remitías la "ley madre" obtenías que el Estado Argentino no lo decía, no lo ejecutaba, no lo implentaba, o sea que la política de Defensa era, justamente, la ausencia de la misma y como consecuencia de esto tenes, entre otras, atraso tecnológico, caminos a medio recorrer, capacidades duplicadas o triplicadas y no porque los respecitvos Generales, Almirantes o Brigadieres fueran malos o tontos, si no porque ellos se ocupaban de su "necesidad inmediata", esto es del EA, la ARA o la FAA, y no tenían porque ponerse a pensar en que les pasará a las otras fuerzas cuando no les alcanzan los recursos y el mismo Estado no emite opinión con respecto a la Ley que comenzaría a darle "sentido" a las partes.
Saldar todas estas deudas nos va a tomar mucho tiempo pero creo que el camino se ha comenzado a recorrer y esa es la política que apoyo (lo que no significa que no tenga críticas) la de convertir al MinDef. en un organismo que tenga la capacidad de conducir un sistema.
Desde luego que como todos quiero levantarme un día y ver que la ARA adquiere U214, el EA los Leopard 2A6 (¡qué joder!, si vamos por lo bueno que sea lo mejor
) y la FAA Gripen NG (
) pero antes de eso debemos "reorganizarnos".
Saludos Condor I.
puke:)ytampoco esa politica de desbastar toso o rematarlo como menem
