No sólo el retorno de los combatientes de Daech a sus hogares afecta a Europa; Túnez, Marruecos y Libia ya lo viven como un nuevo problema a tratar, pero antes que ellos en la región son el Líbano y Jordania los que temen que se instale la violencia en sus territorios luego de la caída de los feudos en Siria y en Irak.
Interesante del artículo los números de combatientes por país que ya comienzan el operativo retorno, un problema nuevo que se liga al problema viejo de la migración desde las costas de África.
El pesado desafío del día después de la caída de Raqqa y Mosul, los dos últimos bastiones de Daech/EI en Siria e Irak
Repliegue. Después de Mosul en Irak, Palmira viene de ser recuperada por el ejército sirio. La victoria contra Daech en esos países marca el fin de eso que era considerado como un “Estado Islámico” pero instala el problema del repliegue de sus terroristas. El jefe de este grupo, al Baghdadi (según dicen herido), dirigió un mensaje a sus “tropas” en el cual reconoce la derrota y pide a los terroristas extranjeros retornar a sus países. Lo que implica que el problema terrorista toma otro cariz. Expulsados de sus santuarios del “Levante”, las decenas de miles de mercenarios, reclutados por Daech a través del mundo, no tienen otra elección que la de volver a sus países. Lo que no es una buena noticia para estos países por que estos terroristas no pierden la capacidad de generar perjuicios. Las cifras de estos terroristas extranjeros enrolados en Daech difiere entre una fuente y otra. Ellos serían “12.000 llegados de 50 países” para el departamento de Estado norteamericano. Para la ONU, son “15.000 llegados de 80 países”. Otras fuentes citadas por los medios llegan hasta estimar su número en “30.000 originarios de 100 países. Como sea, es el número por países el que puede determinar la nueva “cartografía” terrorista que se diseña. Europa deberá prepararse para el retorno, según estimaciones, de 5.000 de sus ciudadanos terroristas que se habían unido a Daech. La mayoría de ellos (cerca de 2.000) está constituida por ciudadanos franceses. Rusia y los países de la ex-URSS suman en total alrededor de 8.000 ciudadanos que estaban en Mosul y Alepo. Túnez suma la cifra aterradora de 6.000 ciudadanos en las filas de Daech. Marruecos 1.200 ciudadanos. Mientras que Argelia y Mauritania se reparten cerca de 300 individuos. Esto infiere una fuerte probabilidad de un “redespliegue” del terrorismo sobre la escena internacional. Con una predilección por zonas de combate ya existentes. Como Ucrania para la zona rusa, Libia para el Magreb mientras que los países de Europa más afectados serán siempre Francia, Alemania y accesoriamente Bélgica. Estos retornos son inevitables y sin embargo aún no son objeto de debate en la comunidad internacional. Más curioso aún es la evacuación total del terrorismo de los temas de la campaña electoral en curso en Francia. Al contrario, la canciller alemana, Angela Merkel, parece querer tomar la delantera. Ella estuvo el jueves en El Cairo y ayer en Tunisia. El objetivo para ella es secar “la ruta migratoria libia” con la idea de instalar campamentos en el Magreb para contener a los migrantes. Una idea difícil de pasar incluso con la “chequera” que Merkel agita de manera ostentatoria. Como lo había hecho con Turquía. Pero, sin embargo, una distracción está en curso. Un video de Daech amenazaría a China a través de los Ouighurs (musulmanes de la provincia de Xinjiang). Cosa de mostrar una dirección y tomar “tranquilamente” el sentido inverso. Es en los puntos de partida que habrá que esperar a los terroristas. Un retorno que no será fácil.
http://analisis-global.blogspot.com.ar/2017/03/el-pesado-desafio-del-dia-despues-de-la.html
Interesante del artículo los números de combatientes por país que ya comienzan el operativo retorno, un problema nuevo que se liga al problema viejo de la migración desde las costas de África.
El pesado desafío del día después de la caída de Raqqa y Mosul, los dos últimos bastiones de Daech/EI en Siria e Irak
Repliegue. Después de Mosul en Irak, Palmira viene de ser recuperada por el ejército sirio. La victoria contra Daech en esos países marca el fin de eso que era considerado como un “Estado Islámico” pero instala el problema del repliegue de sus terroristas. El jefe de este grupo, al Baghdadi (según dicen herido), dirigió un mensaje a sus “tropas” en el cual reconoce la derrota y pide a los terroristas extranjeros retornar a sus países. Lo que implica que el problema terrorista toma otro cariz. Expulsados de sus santuarios del “Levante”, las decenas de miles de mercenarios, reclutados por Daech a través del mundo, no tienen otra elección que la de volver a sus países. Lo que no es una buena noticia para estos países por que estos terroristas no pierden la capacidad de generar perjuicios. Las cifras de estos terroristas extranjeros enrolados en Daech difiere entre una fuente y otra. Ellos serían “12.000 llegados de 50 países” para el departamento de Estado norteamericano. Para la ONU, son “15.000 llegados de 80 países”. Otras fuentes citadas por los medios llegan hasta estimar su número en “30.000 originarios de 100 países. Como sea, es el número por países el que puede determinar la nueva “cartografía” terrorista que se diseña. Europa deberá prepararse para el retorno, según estimaciones, de 5.000 de sus ciudadanos terroristas que se habían unido a Daech. La mayoría de ellos (cerca de 2.000) está constituida por ciudadanos franceses. Rusia y los países de la ex-URSS suman en total alrededor de 8.000 ciudadanos que estaban en Mosul y Alepo. Túnez suma la cifra aterradora de 6.000 ciudadanos en las filas de Daech. Marruecos 1.200 ciudadanos. Mientras que Argelia y Mauritania se reparten cerca de 300 individuos. Esto infiere una fuerte probabilidad de un “redespliegue” del terrorismo sobre la escena internacional. Con una predilección por zonas de combate ya existentes. Como Ucrania para la zona rusa, Libia para el Magreb mientras que los países de Europa más afectados serán siempre Francia, Alemania y accesoriamente Bélgica. Estos retornos son inevitables y sin embargo aún no son objeto de debate en la comunidad internacional. Más curioso aún es la evacuación total del terrorismo de los temas de la campaña electoral en curso en Francia. Al contrario, la canciller alemana, Angela Merkel, parece querer tomar la delantera. Ella estuvo el jueves en El Cairo y ayer en Tunisia. El objetivo para ella es secar “la ruta migratoria libia” con la idea de instalar campamentos en el Magreb para contener a los migrantes. Una idea difícil de pasar incluso con la “chequera” que Merkel agita de manera ostentatoria. Como lo había hecho con Turquía. Pero, sin embargo, una distracción está en curso. Un video de Daech amenazaría a China a través de los Ouighurs (musulmanes de la provincia de Xinjiang). Cosa de mostrar una dirección y tomar “tranquilamente” el sentido inverso. Es en los puntos de partida que habrá que esperar a los terroristas. Un retorno que no será fácil.
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