La operación militar turca en Siria inicia su fase terrestre
La agencia semioficial Anadolu ha anunciado este domingo la penetración, en territorio sirio de la región de Afrin, de tropas turcas y combatientes opositores vinculados al Ejército Libre de Siria (ELS). Esta primera acción terrestre ocurre en el segundo día de la bautizada como 'Operación Rama de Olivo', con la que las Fuerzas Armadas Turcas se han propuesto acabar con todo resquicio de milicias autonomistas kurdas en el norte de Siria. La ofensiva pone a prueba la ya atribulada relación entre Ankara y Washington.
El despertar dominical de la prensa turca fue unánimemente chovinista: "Turquía, un solo corazón", tituló en grandes letras de molde el periódico Hürriyet, uno de los periódicos menos rimbombantes. "Golpeamos a los traidores", proclamó a cuatro columnas el secularista Sözcu, nada sospechoso de congeniar con el Gobierno. Tales decisiones editoriales dan cuenta de la popularidad en Turquía de la orden del presidente Recep Tayyip Erdogan de invadir Afrin, que explica, en gran parte, el ataque que empezó este sábado.
Aproximadamente a las cinco de la tarde del sábado, según un comunicado de las Fuerzas Armadas Turcas (TSK), 72 cazas -número correspondiente al de militares turcos muertos durante la anterior operación turca 'Escudo del Éufrates'- empezaron a bombardear numerosos puntos de Afrin. "Se golpearon 108 objetivos usados por el PKK/KCK/PYD-YPG [organizaciones armadas kurdas hermanas] y DEAS [siglas para referirse al Estado Islámico, inexistente en Afrin] como refugios y arsenales", detalló el mensaje.
Según varias fuentes -la imposibilidad de acceder a la zona de operaciones dificulta la verificación independiente-, los bombardeos turcos se concentraron tanto en las zonas fronterizas del autodeterminado cantón de Afrin como en su capital homónima. El entorno del Gobierno turco elevó la cifra de muertos a más de un centenar. "Sólo se atacará a terroristas", matizó su jefe del Estado Mayor, Hulusi Akar. Medios kurdos declaran la muerte de al menos diez no combatientes y aseguran que se ha castigado zonas civiles.
Dentro de Afrin, una región que alterna zonas de riscos de difícil acceso con vastos campos de olivos, y que desde que estalló el conflicto sirio en 2011 hasta ayer no conoció la guerra de cerca, el temor se apoderó de la población. En algunas imágenes que circulan por internet pudo verse a civiles escondiéndose en cuevas y sótanos. "Mi hijo de cuatro años está aterrado cada vez que escucha el ruido de un avión", lamentó Nisrin, una ama de casa de Afrin, a la agencia France Presse, "¿Que crimen cometió?".
En comunicaciones a los periodistas, un alto funcionario turco asegura que el objetivo de esta última ofensiva es "liberar el área mediante la eliminación de su administración vinculada al PKK-YPG, que ha estado reprimiendo a la población local con métodos antidemocráticos y autoritarios". Turquía, la UE y EEUU consideran el grupo armado kurdoturco PKK "grupo terrorista". Sin embargo, a diferencia de Ankara, Estados Unidos no reconoce la hermandad entre este y la milicia kurdosiria YPG/J, a la que apoya.
Las YPG/J, brazo armado del partido kurdosirio PYD, se hicieron con el control de Afrin en 2012, tras un repliegue táctico del ejército sirio en la franja norte de Siria, de mayoría kurda. A partir de entonces, empezando por Afrin, una serie de formaciones políticas empezaron a consolidar allí una forma de autonomía defendida por fuerzas predominantemente kurdas, con participación árabe y turcomana menor. Su efectividad combatiendo al Estado Islámico en Kobane o Raqqa les granjeó la simpatía de Washington.
Pero lo que la Casa Blanca considera un aliado, para Turquía es una amenaza que ahora quiere eliminar con una ofensiva en pinza. En esta discrepancia radica el enfrentamiento entre los dos aliados en la OTAN. El Departamento de Estado ha instado al Gobierno turco a abstenerse de emplear la violencia en Afrin. Su capacidad de influir en Erdogan se ha demostrado fútil a juzgar por los hechos. Este domingo por la mañana, el periódico Yeni Safak ha anunciado el inicio de la intervención terrestre.
Unidades del ELS lideran la penetración, con el respaldo de la artillería turca desde la divisoria, y cobertura aérea. Según el periódico Yeni Safak, el primer ministro turco Binali Yildirim ha explicado que la operación tendrá cuatro fases, la primera de las cuales consistirá en crear una "zona de seguridad" de 30 km. de profundidad desde la frontera.
Un muerto y 32 heridos por un cohete
Hasta ayer, la mayor respuesta de las YPG/J, había sido lanzar tres proyectiles contra la localidad fronteriza turca de Kilis de madrugada, sin provocar daños humanos. No obstante, esta mañana un cohete lanzado desde el lado sirio ha provocado al menos un muerto y 32 heridos.
"Una persona de nacionalidad siria ha muerto y 32 han resultado heridas, dos de ellas graves", ha declarado a los medios Hussein Sanverdi, alcalde de Reyhanli, en la provincia fronteriza de Hatay.
Al menos tres proyectiles han impactado en la ciudad de Reyhanli, un día después de que Turquía iniciara una ofensiva contra las milicias kurdas YPG en el cantón kurdosirio de Afrín, en el extremo noroeste de Siria.
http://www.elmundo.es/internacional/2018/01/21/5a646c78ca4741440c8b4658.html