Noticias sobre el conflicto militar ruso-ucraniano

Sebastian

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Rusia frente a Ucrania

No es la guerra fría, no se enfrentan dos cosmovisiones o sistemas económicos

Carlos Taibo 19 ABR 2014 - 20:50 CET13

A duras penas es imaginable que Rusia sea una potencia meramente regional. Basta con echar una ojeada a su ubicación, en el centro de las tierras emergidas del norte del planeta, para percatarse de que sus movimientos tienen por fuerza que ejercer efectos sobre el panorama entero del planeta, y ello incluso en los momentos de mayor postración.
Un Estado que cuenta con fronteras con la UE, que considera que Oriente Próximo es su patio trasero, que sigue desplegando una parte de sus arsenales en la linde con China, que mantiene contenciosos varios con Japón y que choca con EE UU a través del estrecho de Bering no puede ser una potencia regional. Pero Rusia arrastra, por añadidura, una singularísima condición geoestratégica.
Con fronteras extremadamente extensas, a caballo entre Europa y Asia, se trata de una potencia continental que debe encarar por igual enormes posibilidades y riesgos evidentes. Agreguemos que estamos ante un Estado que es un productor principal de hidrocarburos, que disfruta de derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU y que cuenta con un arsenal nuclear importante.
Una de las consecuencias plausibles de todo lo anterior es el hecho de que nos hallamos ante uno de los pocos Estados del planeta en los cuales las influencias externas son limitadas o, en su defecto, resultan ser poco eficientes.

Por lo demás, si Rusia se beneficia de evidentes potencialidades, arrastra también taras no menos relevantes. Recordemos que, al menos en lo que respecta a su territorio europeo, es un país geográficamente desprotegido, que carece llamativamente de una salida permanente y hacedera a mares cálidos, que está ubicado en latitudes demasiado septentrionales como para permitir el despliegue de una economía diversificada, que cuenta con ríos que en la mayoría de los casos discurren de sur a norte y a duras penas pueden ser objeto de un uso comercial estimulante o, en fin, que atesora una riqueza ingente en materias primas que se encuentran, sin embargo, en regiones tan alejadas como inhóspitas.

Hay quien, en otro orden de cosas, se pregunta por qué Rusia forma parte del grupo que integran las economías emergentes y que conocemos con el acrónimo de BRIC. La pregunta es legítima por cuanto Rusia no es ni una economía emergente, ni un Estado que muestre una realidad en ebullición, ni un país del Tercer Mundo que haya dejado atrás viejos atrancos.
Al cabo, y por añadidura, hay diferencias fundamentales entre el modelo ruso y el que se revela en los otros espacios mencionados. Si una de ellas es el peso, mucho mayor, que tienen en Rusia, sobre el total de las exportaciones, las que se refieren a la energía, otra la aporta un gasto militar porcentualmente mucho más elevado. Para que nada falte, y a diferencia de China, India y Brasil, Rusia es un país con población envejecida y en crisis demográfica abierta.
A la postre las razones que medio justifican la presencia de Moscú entre los BRIC remiten a las dimensiones del país, a su poderío militar, a la riqueza en materias primas y, en cierto sentido, a la voluntad de contestar, en un grado u otro, la hegemonía occidental.

Los acontecimientos recientes en Ucrania ratifican, por otra parte, un diagnóstico cada vez más extendido: tendremos que acostumbrarnos a lidiar con conflictos sucios en relación con los cuales será cada vez más difícil mostrar una franca adhesión a la posición de alguno de los contendientes. Conflictos como los de Palestina o el Sáhara occidental, que provocan reacciones de inmediata solidaridad con palestinos y saharauis, van a ser más bien infrecuentes en la etapa en la que nos adentramos.
Y es que sobran los motivos para guardar las distancias ante la conducta de todos los agentes importantes, autóctonos y foráneos, que operan en Ucrania. El registro de los naranjas es tan lamentable como el de los azules: unos y otros comparten sumisiones externas, querencias represivas y oligarcas beneficiarios. Pero no es más halagüeño el balance que aportan las potencias occidentales, decididas a mover pieza en provecho de sus intereses más descarnados, y una Rusia que sigue jugando la carta de un imperio que impone reglas del juego en sus países vecinos.

No parece, en paralelo, que nos encontremos ante una reaparición de la guerra fría. Al respecto cabe invocar dos argumentos principales. El primero señala que en el momento presente no se enfrentan dos cosmovisiones y dos sistemas económicos diferentes. Aunque el capitalismo occidental y el ruso muestren modulaciones distintas, es fácil apreciar una comunidad de proyectos e intereses.
El segundo de esos argumentos subraya que existe una distancia abismal entre el gasto en defensa de las potencias occidentales y el que mantiene Rusia. Son varios los Estados miembros de la OTAN que, cada uno por separado, han decidido preservar un gasto militar más alto que el ruso. Pero por detrás se aprecian también enormes disparidades en el tamaño de las economías: no se olvide que el PIB ruso, en paridad de poder adquisitivo, es un 15% del de la UE. Y hay enormes distancias, en suma, en lo que se refiere a población y peso en el comercio mundial.
Mientras la Unión Europea cuenta con 500 millones de habitantes y corre a cargo del 16% de las exportaciones registradas en el planeta, y China tiene 1.300 millones de habitantes y protagoniza el 8% del comercio mundial, Rusia está poblada por algo menos de 145 millones de personas —un 2,4% de la población total— y realiza un escueto 2,5% de las exportaciones.

Pareciera, en fin, como si Rusia no hubiera recibido agravio alguno y se comportase como una potencia agresiva ajena a toda contención. La realidad es bastante diferente. En lo que al mundo occidental se refiere, Rusia lo ha probado casi todo en el último cuarto de siglo: la docilidad sin límites del primer Yeltsin, la colaboración de Putin con Bush hijo entre 2001 y 2006, y, en suma, una moderada confrontación que era antes la consecuencia de la prepotencia de la política estadounidense que el efecto de una opción propia y consciente.
Moscú no ha sacado, sin embargo, provecho alguno de ninguna de esas opciones. Antes bien, ha sido obsequiado con sucesivas ampliaciones de la OTAN, con un reguero de bases militares en países cercanos, con el descarado apoyo occidental a las revoluciones de colores y con un displicente trato comercial.
No es difícil, entonces, que, en un escenario lastrado por la acción de una UE impresentablemente supeditada a los intereses norteamericanos, Rusia entienda que está siendo objeto de una agresiva operación de acoso, y ello por mucho que las diferencias no las marquen ahora ideologías aparentemente irreconciliables, sino lógicas imperiales bien conocidas.

Extracto del libro Rusia frente a Ucrania, de Carlos Taibo, de Libros de la Catarata. A la venta a final de mes.
http://internacional.elpais.com/internacional/2014/04/19/actualidad/1397933430_885236.html
 
Ucrania: Cinco muertos en un ataque contra un puesto de control en Slaviansk
Publicado: 20 abr 2014 | 4:48 GMT Última actualización: 20 abr 2014 | 5:23 GMT





El canal Rossía 24 informó que entre las víctimas hay tres vecinos locales y dos atacantes. Cuatro personas han resultado heridas, una de las cuales se encuentra en estado grave.

El ataque se produjo hace unas horas, cuando en el puesto de control solo había vecinos desarmados que inspeccionan vehículos en la entrada de la ciudad e informan a las fuerzas de autodefensa sobre la aparición de unidades del Ejército, comunicó el canal ruso.

Varios vehículos se acercaron al puesto de control y comenzaron a disparar. Las autodefensas acudieron al lugar y abrieron fuego como respuesta. Las autodefensas lograron capturar dos vehículos de los atacantes, en los que encontraron objetos con simbología de Sector Derecho y una gran cantidad de armas.

Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad...feedly&utm_medium=rss&utm_campaign=actualidad
 

Nocturno Culto

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Colaborador
Last April 16 to 18 in the state in the eastern region within Ukraine joined the protesters chinreo Ukrainian armed group disguised as a Russian regular army or the people not know what hit Russia are showing the pictures.
You can also change depending on the country, the situation in Ukraine is greater implications for us.
Source: difficult to distinguish country into eastern Ukraine

 

Barbanegra

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La 'Nueva Rusia' tampoco obedece al Kremlin
Rusia ha asimilado muy rápido que sus aliados en Kiev -el presidente depuesto Victor Yanukovich y la élite prorrusa que lo acompañó en los buenos tiempos- han sido descabalgados del poder. Pero el retrovisor de la Historia ha brindado a Moscú la posibilidad de recuperar durante el mes pasado la península de Crimea, cedida por las autoridades soviéticas en los años 50, y de intentar retomar el control de los territorios del Este ucraniano: Donetsk, Lugansk, Jarkov, Odessa...

El presidente Vladimir Putin ha rescatado un término vetusto, Nueva Rusia, para reivindicar que cualquier injerencia del Kremlin estos días al otro lado de la frontera no es sino una recuperación de territorios regalados «Dios sabe por qué». Tanto en la caída de Yanukovich como en la de Crimea fueron cruciales las armas y ni en Rusia ni en Kiev se reniega del terreno ganado en cada caso. Pero ahora las metralletas, el desafío ya cotidiano a la autoridad de turno y la exaltación del nacionalismo ruso o ucraniano son una bomba difícil de desactivar para todos los actores implicados en la tarea de evitar una guerra en Europa.

Los rebeldes que proclamaron hace días la República Independiente de Donetsk enarbolando su ligazón histórica con Rusia dicen ahora que no se sienten «ligados» a unos acuerdos de Ginebra en los que Moscú habló en nombre de la Federación Rusa, no en el suyo. Así que el compromiso ruso de propiciar el desarme de estos grupos se ha topado con un primer gesto de rebeldía.

De hecho, una encuesta elaborada por el Instituto de Sociología Internacional de Kiev asegura que un 52,2% de habitantes de la región de Donetsk no desea unirse a Rusia. Cuando se pregunta en todos los territorios rusófonos del Este la proporción de los que se oponen asciende a 69,7%. Pero este pedazo de tierra tampoco reconoce la autoridad de Kiev: el 74% cree que el presidente es ilegítimo.

Acumulación de tropas en la frontera ucraniana
En las barricadas de Donetsk la situación sigue siendo tensa. La presencia de los milicianos prorrusos se palpa en el centro de la ciudad. Los observadores que la OSCE ha desplegado sobre el terreno han apuntado que la distensión que perseguía el acuerdo alcanzado el pasado jueves en Ginebra no ha empezado todavía, pues en cada uno de los focos de tensión hay poca información sobre qué pasos dar.

Mientras, Moscú sigue siendo un actor clave en el conflicto y preocupa la acumulación de tropas cerca de la frontera ucraniana. «Tenemos fuerzas en la región que limita con Ucrania, algunas están emplazadas allí de manera permanente, y otras han llegado de refuerzo como reacción a lo que está ocurriendo dentro de la propia Ucrania», admitió Dimitri Peskov, el portavoz del Kremlin.

La OTAN ha denunciado que la Federación Rusa mantiene en la actualidad un contingente de 40.000 soldados desplegados en la frontera con Ucrania. El presidente ruso, Vladimir Putin, se justificó en el canal Rossia 1 diciendo que Ucrania «es un país donde ha habido un golpe de Estado, por lo que naturalmente cualquier país va a tomar precauciones en lo que se refiere al refuerzo de la seguridad».

Por su parte, Ucrania ha dado algunos primeros pasos para aplicar los acuerdos de Ginebra, como la suspensión de la fase activa de la operación antiterrorista y el inicio de un debate público sobre la reforma constitucional. La que no ha sido suspendida es la campaña de incautación de armas ilegales entre la población civil lanzada por el Ministerio del Interior. Kiev se propone además conceder mayores competencias presupuestarias, impositivas y administrativas a las regiones, a lo que se suma la posibilidad de blindar el estatus de oficial en sus territorios al idioma ruso.

Sin embargo, el grupo ultranacionalista ucraniano Pravy Sektor no piensa devolver las armas. Y no hay planes de desalojar la Maidán, la plaza central de Kiev que fue epicentro de la protesta que hizo caer al régimen de Yanukovich. Esto es otro cuello de botella, pues las milicias prorrusas insisten en que antes deben desarmarse grupos ultranacionalistas del Oeste.


http://www.elmundo.es/internacional/2014/04/19/5352da49268e3ef2268b4571.html
 

Barbanegra

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Al menos dos muertos en un enfrentamiento en Ucrania
Un tiroteo cerca de un improvisado puesto de control de los separatistas prorrusos cerca de la ciudad ucraniana de Slaviansk provocó la muerte de al menos dos personas en la madrugada del domingo.

Los separatistas dieron una cifra de muertos superior, diciendo que habían sido atacados por los paramilitares nacionalistas ucranianos.

El incidente ha provocado las primeras muertes en el este de Ucrania desde que se alcanzase un acuerdo internacional a cuatro bandas el viernes en Ginebra para reducir la tensión de la situación en el este de Ucrania, donde los separatistas se han rebelado contra los líderes de Kiev, apoyado por Occidente.

Aunque la Policía del Ministerio del Interior dijo en su sitio web que una persona murió y tres más fueron heridas por armas de fuego en un incidente entre "dos grupos de civiles", untestigo de Reuters en el lugar dijo que vio dos cadáveres en un camión.

Un combatiente separatista dijo que la cifra era superior, diciendo que los atacantes -que dijo que eran ultranacionalistas ucranianos-, mataron a un separatista inmediatamente y a otros dos en un tiroteo tras llegar al puesto de control en coches y abrir fuego.

Añadió que dos de los atacantes, que dijo que pertenecían al grupo de nacionalista de extrema derecha Sector Derecho, que destacó en el derrocamiento del presidente Viktor Yanukovich en febrero, murieron después de que llegasen refuerzos de los separatistas.

El grupo Sector Derecho negó su implicación en el tiroteo y culpó a las fuerzas especiales rusas.

Rusia dijo que los enfrentamientos demuestra que Kiev no está desarmando a los militantes.

Dos periodistas de Reuters en el lugar vieron a dos cadáveres, uno de ellos con heridas de armas de fuego en la cabeza y la cara. Uno llevaba uniforme de combate y el otro iba con ropa de civil. Sus cuerpos yacían en un camión, y uno de ellos estaba cubierto con una sábana.

La gente del lugar traía flores y tocaba los cuerpos en señal de despedida.

El incidente es un revés para la esperanza de una tregua durante la Semana Santa y la desmilitarización de la región bajo un acuerdo firmado por Estados Unidos, Rusia, Ucrania y la Unión Europea.

Los enviados de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) han llegado a la región para tratar de persuadir a los separatistas de que depongan las armas.

Los separatistas controlan Slaviansk, una de las alrededor de 10 ciudades del este de Ucrania donde se habla ruso en las que se han rebelado contra el Gobierno de Kiev tras el derrocamiento de Yanukovich.

El ministerio del Interior, Arsen Avakov, no dijo nada sobre el incidente en su página de Facebook, donde habitualmente realiza comentarios sobre cualquier enfrentamiento.

Un fotógrafo de Reuters en el lugar dijo que había dos coches calcinados en el puesto de control, que estaba cerca de un grupo de viviendas a unos 18 km al oeste de la ciudad.

Los rebeldes han ocupado edificios estatales como comisarías y oficinas de seguridad en varias localidades y han declarado su apoyo a una "república popular de Donetsk" independiente.

El combatiente separatista, que se identificó como Vladimir, dijo que cuatro coches llegaron al puesto de control sobre las 2:00 a.m.

"Uno de nuestros hombres se acercó. Le dispararon en la cabeza y cayó de inmediato. Había disparos de francotirador. Tuvimos tres muertos y cuatro heridos", dijo.

Añadió que los separatistas trajeron refuerzos y que entonces mataron a dos de los atacantes

REUTERS
 

Beretta 951

futuro licenciado en historia
omingo, 20 de abril de 2014
Tiroteo en Donetsk con varios muertos

Anoche se produjo un tiroteo entre proucranianos y prorusos en un control de carretera cerca de Slaviansk. Los rebeldes prorusos han responsabilizado a miembros del grupo "Sector Derecha" del ataque. También han mostrado armas, documentos y dinero capturados. Todo ello sería ayuda americana, según su versión.







Entre el equipo capturado se puede ver una ametralladora MG3, versión modernizada de la MG-42 alemana. Sería curioso saber de dónde proviene porque no es un arma reglamentaria de Ucrania -ni EEUU-. El hecho de que haya visores occidentales tampoco es señal de un supuesto apoyo americano. Ucrania y otros países de la CEI disponen de muchos equipos personales extranjeros.

http://alejandro-8.blogspot.com.ar/2014/04/tiroteo-en-donetsk-con-varios-muertos.html
 

Sebastian

Colaborador
Rusia, indignada por la provocación en la ciudad ucraniana de Slaviansk
http://sp.ria.ru/trend/situacion_este_ucrania_abril_2014/

Rusia, indignada por la provocación en la ciudad ucraniana de Slaviansk

© REUTERS/ Gleb Garanich
14:05 20/04/2014
Moscú, 20 abr (Nóvosti).

Moscú siente indignación por la provocación que tuvo lugar en la ciudad de Slaviansk, este de Ucrania, y que muestra el poco interés de Kiev en desarmar a los extremistas, comunicó hoy el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia.

La noche del sábado al domingo, unos hombres armados atacaron un retén a la entrada de Slaviansk causando muertos y heridos. El "alcalde popular" de Slaviansk, Viacheslav Ponomariov, informó que murió un miliciano y otros dos resultaron heridos, y que también murieron o resultaron heridos siete atacantes.

"Causa asombro que la tragedia haya ocurrido ya después de la firma de la Declaración de Ginebra, que insta a las partes a abstenerse de cualquier acto de violencia y provocación", señala el comunicado.

Moscú exige a Ucrania cumplir rigurosamente sus compromisos sobre la desescalada de la situación en el sureste del país.

En las regiones del este de Ucrania, de mayoría rusoparlante, se suceden desde marzo protestas a favor de la federalización. Kiev lanzó una operación especial con participación del Ejército para dispersar las concentraciones de los partidarios de la federalización y atajar lo que considera un “auge del separatismo”.

Los enfrentamientos más violentos entre milicianos y los cuerpos armados se produjeron en las inmediaciones de las ciudades de Slaviansk y Kramatorsk.

Representantes de Rusia, EEUU, UE y Ucrania se reunieron el 17 de abril en Ginebra para buscar un arreglo de la crisis ucraniana. Las partes trazaron una serie de medidas para reducir la tensión, entre ellas, el desarme de las milicias y el desalojo de los edificios ocupados por los manifestantes.
http://sp.ria.ru/neighbor_relations/20140420/159818824.html
 

Sebastian

Colaborador
Kiev confía en los oligarcas para salvar el este de Ucrania

La crisis consagra el protagonismo político de los magnates locales

María Antonia Sánchez-Vallejo Madrid 20 ABR 2014 - 20:04 CET14


El magnate ucranio Rinat Ajmétov. / Irina Aleksandrova (RIA Novosti)

Frente a los 110 multimillonarios que atesoran un tercio de la riqueza rusa, la docena de oligarcas ucranios podría parecer en desventaja, tanto en número como en la cuantía, más modesta, de sus fortunas. Pero el tradicional protagonismo de estos últimos en la vida política del país, entre bastidores o como puntales del nuevo Gobierno de Kiev, les da una considerable ventaja con respecto a los rusos, que controlan la economía pero dependen de las decisiones del Kremlin y, sobre todo, del presidente Vladímir Putin.

Por eso el Ejecutivo de Arseni Yatseniuk ha depositado en manos de algunos de ellos la tarea de sujetar las riendas del Este ante el desafío prorruso, y delegado en Rinat Ajmétov, primus inter pares de todos ellos, una delicada mediación con los rebeldes del Este. Ajmétov, auténtico factótum en la región de Donbás, respaldó durante años al expresidente prorruso Víctor Yanukóvich para dejarle caer ante la protesta del Maidán y retirarse luego a un discreto segundo plano, aparentemente neutral y apenas roto hace diez días por sus contactos a dos bandas con Kiev y los rebeldes prorrusos.

Dos de esos oligarcas, Igor Kolomoyski y Serguéi Taruta, fueron nombrados a primeros de marzo gobernadores de Dnepropetrovsk y Donetsk, sendas provincias del Este y, la última, epicentro de la revuelta. Kolomoyski, que posee la tercera fortuna del país y tiene doble nacionalidad ucrania e israelí, es el fundador del PrivatBank, el más importante de los que operaban en Crimea (1.300 empleados, 715.000 clientes, 600 cajeros), y cuyo cierre fulminante ha contribuido a colapsar el sistema bancario en la península; crítico feroz de Yanukóvich, coqueteó en su día con Yulia Timoshenko.

Taruta, por su parte, es blanco de la ira de los prorrusos de Donetsk. De hecho, “la actual rebelión dio sus primeras señales hace semanas, con ataques de baja intensidad contra oficinas del imperio Taruta y comisarías de policía”, recordaba recientemente en Donetsk Andrei Purgin, líder del grupo radical República de Donetsk, responsable del asalto a la sede del Gobierno regional el 6 de abril. “La gente está harta del gobierno en la sombra de los oligarcas, pero que los nombren gobernadores es una afrenta que no vamos a permitir”.

“No es de extrañar que Kiev recurra a oligarcas para apuntalar zonas sensibles en el este del país; además, ya no tienen nada que hacer en Crimea, de donde se baten en retirada ante la llegada de los rusos. Los oligarcas son los primeros interesados en una Ucrania estable y unida. Si el Este sigue los pasos de Crimea tendrían todas las de perder ante sus colegas rusos, mucho más poderosos. Y para la mayoría de la población son un poder incontestable”, explicaba el periodista Andrei Grimov en Donetsk. Ajmétov ha reiterado en sus escasas declaraciones tras el vuelco en el poder en Kiev —la mayoría mediante comunicados— su apuesta por una Ucrania territorialmente íntegra y una salida negociada a la crisis.

Ajmétov no ha cumplido los 50, fue parlamentario en Kiev por el Partido de las Regiones de Yanukóvich y atesora 12.000 millones de dólares en bienes e inversiones, algunas de ellas en Crimea. “Ajmétov patrocinó durante años el Partido de las Regiones, muy poderoso en Crimea y esencial a la hora de inclinar la balanza hacia Rusia. Pero ahora guarda una exquisita equidistancia ante la crisis”, contaba recientemente el periodista Serguéi Mokrushyn en Simferópol. “Su última inversión aquí fue una gran cementera en Kerch [donde se construirá un puente sobre el mar de Azov]. Controla infraestructuras y tiene intereses en los puertos”.

Entre la península anexionada por Rusia el 21 de marzo y la patria chica de Ajmétov, Donetsk —conocida popularmente como la “capital del crimen organizado”, y con un inquietante aspecto de cámara acorazada—, hay, o había, muchos vínculos. “En Crimea no hay oligarcas obvios, solo millonarios que no pueden ser calificados de tales. Los que operaban hasta ahora son oligarcas ucranios con muchos intereses locales”, explica Mokrushyn. La nomenklatura del poder ucranio se expresaba también en las andanzas de Dmitro Firtash, el rey del gas detenido hace unas semanas en Viena y “dueño de una industria petroquímica en el norte de Crimea”, o Lev Mirimski, “que es miembro del Parlamento de Kiev”, añade Mokrushyn. Solo la clientela política de Ajmétov y Firtash reunía a 80 diputados del partido de las Regiones.

El poder financiero se declina con sangre desde que la descomposición de la URSS diera paso a una legión de oligarcas de origen no precisamente legal. Anna K. recuerda al inicio de los años noventa una guerra sin cuartel en Crimea. “Simferópol parecía Chicago. Tiroteos, explosiones, coches de los que caían cadáveres como fardos. Nuestros padres no nos dejaban volver solos del instituto.

Eran ajustes de cuentas por el reparto de los negocios”, explica esta abogada. De esa época datan los ostentosos mausoleos de gánsteres locales en el cementerio nuevo de la ciudad. De entonces data también la fortuna de muchos de los oligarcas de la región, de Ucrania a Crimea, y viceversa (o Rusia). Y aunque la corrupción ha ganado la partida a la actividad criminal —el mismo Serguéi Axiónov, primer ministro de Crimea, es un superviviente de la lucha de clanes de los noventa—, de la costumbre de resolverlo todo a tiros quedan resabios, recuerda Mokrushyn, como “el asesinato de cinco alcaldes en los últimos dos años por reparto de negocios”.
http://internacional.elpais.com/internacional/2014/04/20/actualidad/1398017074_749517.html
 
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