Quién gobierna en el océano

Brunner

Forista Sancionado o Expulsado
Cierto, este "IMpwerio"los EEEUU es el centro industrial y comercial de tgodo el mundo..porque crees que todos se deseperan por tratar de vender aqui y de atraer a capital norteamericano...
 

Comrade

Colaborador
Colaborador
Brunner dijo:
Cierto, este "IMpwerio"los EEEUU es el centro industrial y comercial de tgodo el mundo..porque crees que todos se deseperan por tratar de vender aqui y de atraer a capital norteamericano...

Todos quieren hacer negocios con EE.UU para que sea mas facil infiltrar al SOVIET.
 

pulqui

Colaborador
Brunner dijo:
Cierto, este "IMpwerio"los EEEUU es el centro industrial y comercial de tgodo el mundo..porque crees que todos se deseperan por tratar de vender aqui y de atraer a capital norteamericano...


Yo no estoy discutiendo eso, ni estoy criticando a los EEUU. Pero no todo dura para siempre y no lo digo yo, si no también analistas norteamericanos.
 

Artrech

Colaborador
Colaborador
pulqui dijo:
Artrech, me parece que el artículo está hablando de acá a unos cuantos (muchos) años; a parte, un imperio no lo es solamente por su poderío militar.

El articulo dice "dentro de poco tiempo". De todas maneras, puede ser que a largo plazo aparezcan nuevas superpotencias, pero eso no significa que EEUU va a desaparecer. Yo mas bien diria que puede haber un mundo mas multilateral superpotnecisticamente (que palabra cree!) hablando.
 

pulqui

Colaborador
Jajaja ¡¡ me mató esa palabra !!

Coincido con vos, creo que vamos a un mundo multipolar. Lo que siginifica, por otra parte, la pérdida de poder relativo de los EE.UU.
 

Procer

Colaborador
Ctulhu Brunner???...me habia olvidado, aguante Shub-niggurath!!, el real dueño del Oceano y sus alrededores...
 

Armisael

Forista Borgeano
Colaborador
Procer dijo:
Ctulhu Brunner???...me habia olvidado, aguante Shub-niggurath!!, el real dueño del Oceano y sus alrededores...

Y Nyarlathotep, su agente exterior y RRPP:p :D

Salutti.;)
 

pulqui

Colaborador
De hecho, China va a conceder 200 millones de dólares a Pakistán para construir un puerto de aguas profundas en Gwadar, a apenas 390 millas náuticas del estrecho de Ormuz. Pekín también intenta colaborar con la Junta Militar de Myanmar para crear otro puerto de aguas profundas en la Bahía de Bengala.


DEBATE
China tiene la llave para Myanmar

Por: Jamie F. Metzl *

Tres hechos definieron los límites de las conversaciones que el negociador Ibrahim Gambari de las Naciones Unidas llevó a cabo en sus visitas a los generales que gobiernan Myanmar y a la líder opositora detenida en su hogar, Aung San Suu Kyi.

En primer lugar, a pesar del heroico liderazgo de los monjes budistas y la comunidad pro-democracia, cerca de 50 años de desgobierno militar y tácticas del terror han agotado al pueblo birmano, al que probablemente le sea difícil mantener su actitud desafiante ante el régimen si no se ven divisiones claras entre los generales gobernantes.

En segundo lugar, los generales birmanos saben que enfrentan un difícil dilema: mantener el poder o arriesgarse a ir a prisión, al exilio o incluso morir.

Finalmente, en tanto China dé apoyo político, financiero y militar a los gobernantes birmanos, es casi imposible que ocurra un cambio significativo. Hasta que China decida que en Myanmar le conviene más un gobierno con mayor legitimidad que el actual e incompetente régimen militar, es poco lo que puede ocurrir.

La decisión de China de bloquear una condena por parte del Consejo de Seguridad de la ONU al ataque del régimen birmano a los monjes budistas y otros manifestantes pacíficos subraya su apoyo, de larga data, a la junta militar. En enero pasado, China y Rusia vetaron una resolución que condenaba el historial de derechos humanos de Myanmar y llamaba al gobierno a detener los ataques sobre las minorías étnicas, liberar los prisioneros políticos y comenzar una transición hacia la reconciliación nacional y la democracia.

Se debe tener en cuenta que Estados Unidos y sus aliados, frente a temores estratégicos durante la Guerra Fría, también apoyaron regímenes repugnantes y opresivos en países como Zaire, Chile e Indonesia. Sin embargo, EE.UU. y Occidente se dieron cuenta en momentos clave de que los tiempos habían cambiado y que era imperioso quitar respaldo a tales dictadores.



Copyright Clarín y Project Syndicate, 2007.

* EX MIEMBRO DEL CONSEJO DE SEGURIDAD DE BILL CLINTON


http://www.clarin.com/diario/2007/10/05/opinion/o-03310.htm
 

pulqui

Colaborador
Por extraño que parezca, el Pacífico, como principio organizador de los asuntos militares del planeta, también se cernirá sobre Africa. No es un secreto que uno de los principales motivos detrás de la decisión del Pentágono de establecer su nuevo Centro de Mando Africano es contener y vigilar la creciente red de proyectos de desarrollo que China ha emprendido a lo largo de las regiones subsaharianas.



Reciben con escepticismo a un nuevo comando estadounidense en África

Hasta hace pocos años atrás era bastante raro observar fuerzas militares estadounidenses en las ricas áreas marítimas petroleras del Golfo de Guinea, en África Occidental. Este año, el plan es estar por allí diariamente.

La importancia estratégica de África y de sus recursos naturales está creciendo, y el Ministerio de Defensa creó el mes pasado un nuevo comando militar unificado para el continente, denominado AFRICOM.

La primera misión militar norteamericana asociada a tal decisión, comenzó el lunes con el arribo del USS “FORT MC HENRY” a Dakar, la capital de Senegal, para comenzar un período de seis meses de ejercicios de adiestramiento para las fuerzas navales africanas alrededor del Golfo de Guinea.

Para los comandantes americanos, AFRICOM significa consolidar la responsabilidad con el continente, que previamente estaba repartida entre otros tres comandos regionales, cada uno de los cuales tenían en África un interés secundario.
Sin embargo, la creación de AFRICOM ha provocado tanto escepticismo en el continente, que todavía permanece sin resolución una de las cuestiones más básicas: dónde estará localizado.

Algunos países africanos están preocupados por la posibilidad de que el nuevo comando involucre más profundamente al continente en la guerra global contra los grupos terroristas.

Otros se preguntan si esto no significa una manera de proteger la jugada competitiva estadounidense sobre el petróleo y otros recursos del África, crecientemente buscados por potencias en crecimiento como China o India. El continente ha superado al Golfo Pérsico en su carácter de primer proveedor de petróleo a los Estados Unidos.

“Los africanos perciben que AFRICOM representa algo más que lo que están tratando de venderles”, afirmó Wafula Okumu, analista en el Instituto Sudafricano de Estudios de Seguridad. “Si fuera presentado de una diferente manera y mejor explicado, podría resultar un éxito”.

Los funcionarios estadounidenses admiten que el interés estratégico americano está primero. Pero el responsable de las operaciones militares de AFRICOM, Vicealmirante Robert T. Moeller, afirmó que el comando permitirá a los EEUU “hacer más con nuestros socios africanos, cuando tenga sentido hacerlo y donde sea del interés de ellos hacerlo”.
“Existe la errónea creencia de que AFRICOM es parte de un esfuerzo estadounidense para militarizar África, y es no es, definitivamente, el caso”, agregó Moeller en una entrevista a AP.

Las Fuerzas Armadas de los EEUU están bien atrincheradas en África, gastando alrededor de 250 millones de dólares al año en programas de asistencia militar, dijo Stephen Morrison, director del programa africano del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington.

Desde 2002, alrededor de 1.800 militares americanos han estado estacionados en Djibouti, como parte de los esfuerzos por sofocar las redes terroristas en el Cuerno de África, particularmente en Somalia. También se han destinado fondos para la Iniciativa Contra-terrorista Transahariana, focalizada en el entrenamiento de ejércitos en naciones del norte y oeste de África, desde Argelia hasta Nigeria.

Moeller dijo que AFRICOM no proveerá nuevas bases militares a los EEUU en el continente, y que no habrá cambios sustanciales en el rol de su país en la zona para el futuro previsible. Su propósito es el de ayudar a los africanos con el entrenamiento militar y apoyarlos en operaciones de paz y de ayuda humanitaria, cruciales para el mantenimiento de la estabilidad y la prevención de conflictos, agregó.

Las potencias regionales, incluidas Libia, Nigeria y Sudáfrica, han expresado profundas reservas. Según los analistas, esto se debe en parte a que perciben que AFRICOM puede socavarles su actual influencia. Hasta ahora, sólo Liberia ha expresado públicamente su disposición para acoger a AFRICOM, aun cuando países críticos como Nigeria dieron la bienvenida a la continuación de los programas de entrenamiento estadounidenses.

Bajo el comando del General William E Ward, AFRICOM estaría plenamente operacional dentro de un año, dedicando los próximos 12 meses a su alistamiento.

Con un presupuesto de u$s 50 millones para el presente año fiscal, AFRICOM es responsable por la actividad en 53 países del África, incluidas las naciones isleñas que rodean el continente. Solamente Egipto quedará dentro de la órbita del Comando Central de los EEU, a raíz de su proximidad e importancia para Medio Oriente.

Kurt Shillinger, analista del Instituto Sudafricano de Asuntos Internacionales, opinó que el Pentágono ha fallado en calmar las preocupaciones de los africanos que “ven esto como un caballo de Troya a través del cual EEUU persigue y defiende sus intereses clave en el África”.

Según datos provistos por la Administración estadounidense de Energía, las naciones africanas proveen a ese país más del 24% de su petróleo, superando al Golfo Pérsico (con un 20%). Una gran parte de ese crudo proviene de, o pasa por el Golfo de Guinea.

Moeller afirmó que el incremento de la seguridad en el golfo es en parte una cuestión de interés los mercados abiertos. Los EEUU quieren trabajar con “socios africanos para asegurar que los recursos provenientes del continente estén disponibles para la comunidad global”, acotó.

El conflicto interno de Nigeria – el mayor productor petrolero de África – ha interferido esporádicamente con el flujo de crudo, y las plataformas de explotación costa afuera están escasamente protegidas, dado que la mayor parte de los países tiene armadas muy pequeñas.

La presencia naval norteamericana en el Golfo de Guinea –medida en “días de buque” – se ha incrementado más del 50% desde el año pasado.

Por primera vez en un comando global estadounidense, AFRICOM tendrá un segundo comandante civil, responsable de la supervisión de los asuntos cívico-militares y de la coordinación con otras agencias gubernamentales americanas.
Funcionarios de AFRICOM dijeron que el cargo realza la importancia de las operaciones humanitarias entre los objetivos estadounidenses en África, pero también que ha desatado controversias.

“¿Porqué utilizar fuerzas militares para promover el desarrollo, cuando existen instituciones dentro del gobierno americano que están más capacitadas y son más aceptables?, se preguntó Okumu, del Instituto de Estudios de Seguridad.

Los analistas dijeron que han existido críticas sobre este comando, dentro del mismo gobierno americano, especialmente en el Departamento de Estado.

Shillinger expresó que algunos funcionarios de la Agencia para el Desarrollo Internacional de los EEUU, se mostraron preocupados porque sus programas podrían resultar “estigmatizados” por los vínculos directos con las fuerzas militares, que ya han mezclado programas de asistencia con operaciones de combate en Irak y Afganistán, guerras ambas impopulares en la mayor parte de África.

Moeller sostuvo que las relaciones entre el comando y las otras agencias americanas con los africanos serán “de colaboración”, descartándose el ejercicio de liderazgo de EEUU sobre las operaciones de asistencia o las políticas.
Por ahora, AFRICOM tiene un staff de más de 200 miembros, y está basado en Stuttgart, Alemania.

Moeller explicó que el lugar de establecimiento del comando es una cuestión a ser decidida “con nuestros socios africanos”. En lugar de un cuartel central, podría haber varias oficinas en cinco regiones, con un staff de una o dos docenas de miembros en cada una.

Theresa Whelan, subsecretaria asistente de defensa para asuntos africanos, estimó que el 80% de los integrantes del comando – calculados en unos 800 – estará desplegado fuera de África.

“Tener una presencia en el continente es en cierto modo un objetivo”, dijo Moeller, pero “en definitiva es algo que tendrá que tener el acuerdo de los africanos”.

El USS “FORT MC HENRY”, un buque de desembarco anfibio, puede aproximarse al tema. El buque y sus helicópteros pueden servir como base móvil de entrenamiento para fuerzas africanas en materia de seguridad marítima.

(Fuente: AP, MiamiHerald.com; 07/11/079)

MARITIMENEWS

16/11/07
Traducción de NUESTROMAR
 

KILLBILL

Forista Sancionado o Expulsado
The Wall Street Journal. Julio 19 de 2007
Por Gordon Fairclough.

La marina china crece a la par con la economía

La dependencia del petróleo y otras materias primas importadas empuja al país a desarrollar su fuerza militar

En un lado de una colina rocosa en esta región, a orillas del Mar Amarillo, se encuentra un destartalado pueblo pesquero. Sus barcos de madera descansan en la playa. Pero el otro lado de la colina esconde una serie de amarraderos bien vigilados que albergan algunas de las naves más sofisticadas de las fuerzas navales de China: los submarinos de ataque.

Estas sigilosas embarcaciones son una prueba de los ambiciosos esfuerzos de China por modernizar sus fuerzas armadas, especialmente la marina, una rama que durante mucho tiempo se ha visto descuidada.

Mucha gente cree que las relaciones más directas de China con la economía mundial y su dependencia de las importaciones de petróleo y materias primas asegurarán el “auge pacífico” del país, tal como han prometido los líderes políticos de Beijing. Pero esos mismos intereses económicos y la necesidad de protegerlos— también están empujando a China a desarrollar su poder militar.

“Los océanos son nuestro salvavidas. Si desapareciera el comercio, la economía se derrumbaría”, dice Ni Lexiong, investigador en el Instituto Nacional de Defensa de shanghai y un ávido defensor de que China se transforme en una potencia naval.

Para los estrategas chinos, el acelerado crecimiento económico del país —que a su vez apuntala el control del poder político en manos del Partido Comunista— y los avances en temas militares están ligados de forma inextricable. “Los asuntos de seguridad relacionados a la energía, los recursos naturales, las finanzas, la información y las rutas internacionales de comercio están aumentando”, señala un informe del gobierno publicado en diciembre que traza las políticas de defensa del país.

Como resultado, China dice que invertirá unos US$45.000 millones en sus fuerzas armadas este año, un incremento de casi 18% frente a 2006. También ha emprendido una compra masiva de buques, adquiriendo navíos avanzados de Rusia, además de construir sus propios buques. Con el tiempo, la estrategia podría
cambiar el equilibrio de poder marítimo, primero en Asia y luego en el resto del mundo.

Las autoridades del país insisten en que el mundo no tiene nada que temer de una China mejor armada. La fuerza naval, parte de lo que oficialmente se conoce como el Ejército Popular de Liberación de China, sigue siendo más pequeña que la de otras potencias mundiales. Por ejemplo, la marina de Estados Unidos tiene más de 100 buques de combate, incluyendo 11 portaaviones. China, en cambio, cuenta con 76 buques y ningún portaaviones, según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos.

Gran parte de las preocupaciones de China deriva de su dependencia del petróleo extranjero.

China importa casi el 50% del crudo que consume y depende más del suministro de Medio Oriente que EE.UU.

Casi el 72% del petróleo que importa China viene del Golfo Pérsico y África en grandes buques petroleros que atraviesan el estrecho de Malacca, un cuello de botella estratégico entre la isla indonesia de Sumatra y Malasia.

China también depende del mundo para el abastecimiento de otras materias primas —de cobre y carbón a mineral de hierro—, necesarias para alimentar los motores de lo que la que es la cuarta economía del mundo.

“La globalización económica implica la globalización de las fuerzas militares como mecanismo de defensa”, escribió el año pasado Zhang Wenmu, profesor de estudios estratégicos en la Universidad de Aeronáutica y Astronáutica de Beijing, en China Security, una revista de temas militares. “Con la expansión de estos complejos intereses, los riesgos para el bienestar de China no han disminuido, sino que de hecho han aumentado”, agrega.
 

KILLBILL

Forista Sancionado o Expulsado
El regreso de Cheng Ho
Edgar Schmid

[I]Dentro de pocos años, cuando hayamos caído en el monocultivo sojero, cuando seamos “la quinta potencia minera” pero nos paguen a lo sumo el 2% de las regalías, cuando se haya acabado el petróleo continental argentino pero los ingleses lo estén extrayendo off–shore en Malvinas y veamos cómo las flotas asiáticas depredan nuestros caladeros de pesca –mientras pagan regalías a los kelpers– quizás entonces algunos tomen conciencia de lo que significa Poder Naval y Poder Nacional.
Pero será muy tarde


1. Nace el imperio naval–capitalista.

En el siglo XV, cuando China era la civilización mejor organizada del mundo, hubo un almirante, Cheng Ho, que partió con una expedición de grandes juncos, algunos hasta de 150 metros de eslora, a explorar el océano Índico y sus costas. Llegó hasta África y hasta volvió con algunas jirafas de muestra como retratan algunas pinturas de la época.

A su regreso los burócratas de la Corte Imperial debieron decidir que se hacía. Hay quienes dicen que éstos temieron que una política china tendiente al Índico crearía en el Sur una clase comercial que no podrían controlar en el futuro. Lo cierto es que con mentalidad de “muralla china” resolvieron cerrar los puertos y concentrarse en la amenaza manchú en el Norte. Fue un grave error geopolítico a largo plazo.


Poco después, portugueses, gallegos, vascos y bretones, estaban explorando el Atlántico Norte y el rey Enrique el Navegante, de la misma generación que Cheng Ho, fundó la escuela de Sagres para enseñar cartografía, navegación, astronomía, construcción y armamento naval. Sagres se convirtió en el “Cabo Cañaveral” de la época, y allí estudiaron Cristóbal Colón, Vasco da Gama, Pedro Álvarez Cabral.

En los siguientes 400 años, lo que empezó como una competencia contra Venecia, la potencia comercial-financiera que retenía el monopolio de la ruta a Oriente, cambió al mundo cuando los europeos con costa en el Atlántico Norte –Mar del Norte comenzaron a desarrollar un nuevo tipo de capitalismo que incluía desarrollo de la industria naval, banca, seguros, monopolio comercial, desarrollo de grandes corporaciones, colonialismo, piratería, tráfico de esclavos, de armas, de oro y de opio. Finalmente hasta los chinos pagaron la consecuencia de su aislamiento –y nulo desarrollo naval– cuando fueron agredidos por mar en las guerras del opio con todas sus consecuencias.

Desde hace 400 años, los conceptos de capitalismo pujante, poder imperial y hegemonía naval, están estrechamente ligados, como lo demostró el almirante Alfred Mahan de la US Navy en la década de 1890, en el momento en que Estados Unidos debía decidir si se quedaba en una república aislada en su gran territorio (como los chinos siglos antes), o se expandía hacia fuera para ser el imperio del siglo XX. Su libro sobre la influencia del poder naval en la historia, resumió concisamente la experiencia de ingleses, holandeses y franceses e inclusive influyó sobre alemanes como el kaiser, a quien empujó a abandonar la geopolítica de Bismarck (hacia Eurasia), para salir al Atlántico desafiando a Gran Bretaña.

Como lo demostró Karl Haushofer, y hoy lo ve Zbignieb Brzezynski, la constante de la historia por la hegemonía imperial yace en el enfrentamiento del “imperio naval” contra la masa terrestre de Eurasia. Gran Bretaña extrajo su fuerza del Rimland (las tierras costeras de Asia), primero con India, luego con el despojo de China y el control del Golfo Pérsico.

Los desafiantes del Imperio Naval a lo largo del siglo XX, los que surgían de la masa de Eurasia, nunca actuaron de consuno. Así Alemania abandonó el consejo de Bismarck y terminó atacando a Rusia una Guerra de los Treinta Años II para beneficio de quienes Nostradamus anticipó como “ingleses de ultramar”.

Y Rusia a su vez rompió con el otro gigante –China– para priorizar incursiones dentro del imperio naval, pero no tuvo recursos sustentables para el tipo de carrera armamentista que le imponían los centros financieros del imperio naval. Fue derrotada.

2. La reacción de Eurasia.

Decía un viejo samurai de Kurosawa: “Se aprende más de la derrota que de la victoria. En la victoria se aplica lo que ya se sabe. En la derrota se aprende lo que sabe el enemigo”.

La gran derrotada de la Guerra Fría I, Rusia, ya se ha repuesto y recomienza la Guerra Fría II pero con una hasta el momento exitosa Estrategia Asimétrica. Es muy probable que el sucesor de Vladimir Putin sea el actual vicepresidente y ministro de defensa Sergei Borisevich Ivanov, también de San Petersburgo, con una diferencia de edad de sólo cuatro meses –Putin nació el 7 de octubre de 1952 e Ivanov el 31 de enero de 1953– y su compañero en la Universidad en Leningrado, en la Escuela Superior de KGB “Bandera Roja”, de Minsk (bajo la dirección del general Yuri Andropov). Y luego, cuando Putin –ex analista de Inteligencia en Alemania– asumió la dirección del SFB (nuevo nombre de la KGB) nombró a Ivanov como Director de toda el Área de Análisis de Inteligencia Estratégica, para luego llevarlo como vicepresidente y ministro de Defensa.

Es muy posible que en marzo del 2008, al terminar el segundo mandato de Putin, sea reemplazado por Ivanov. En ese caso, la diferencia sería sólo de matices personales pero la geoestrategia de fondo seguiría siendo la que estableció el núcleo duro de la KGB-cracia. Y posiblemente Putin se ponga al frente del partido hegemónico al que ambos pertenecen, Rusia Unida (Yedinaya Rosilla), cumpliendo un papel similar de “Gran Elector” como hasta hace un tiempo cumplían los ex presidentes mexicanos en el PRI.

Por eso es importante hoy ver las orientaciones en estrategia naval que adelanta Ivanov como vicepresidente y ex ministro de Defensa. Hoy en día, la Armada rusa incluye cuatro flotas: la del Mar Negro, la del Norte, la del Báltico y la del Pacífico.

A principios del siglo XIX la flota más importante era la del Mar Negro (en Sebastopol contra Turquía y para salir al Mediterráneo), luego pasó a ser la del Báltico (en Kronstadt contra Alemania), y más tarde, después de terminada la Segunda Guerra Mundial, la del Norte (en Murmansk contra Estados Unidos y Gran Bretaña), recordó Ivanov durante una visita a Jabárovsk, ciudad situada en la costa rusa del Pacífico. La región noratlántica, en opinión de Ivanov, no supone ya un peligro para Rusia. “¿Contra quién vamos a pelear allí?”, preguntó él retóricamente. “Las relaciones con la OTAN no son tan malas, mientras que aquí hay más riesgos. Aquí están Estados Unidos, China, Corea, Japón y no existen en absoluto algunas reglas del juego”. En Europa “hay un sistema de acuerdos y mecanismos que no se tienen en el Pacífico”, agregó Ivanov.

“Sistema de acuerdos y mecanismos”, es un eufemismo para decir que se alcanzó una conformidad geopolítica de cooperación con la “Vieja Europa”, más específicamente con Francia y Alemania, que incluye la no-carrera de armas que los desgastaría inútilmente.

Es muy difícil sostener una guerra en dos frentes. Hace un siglo –guerra ruso-japonesa de 1905– Rusia tenía la flota principal en el Báltico y la secundaria en Port Arthur. Al estar desconcentrada, los japoneses pudieron derrotar a los marinos rusos por separado. Ahora Ivanov hace un despliegue a la inversa y pone el grueso sobre el Pacífico, al fin y al cabo, es por tráfico de mercaderías y recursos naturales, el océano más importante reemplazando al Mediterráneo medieval y al Atlántico del último medio milenio.

Al mismo tiempo, Ivanov subrayó que “lo anterior no significa que Rusia quiera verse involucrada en conflictos ajenos o vaya a hacerlo obligatoriamente”. La intención de Rusia es continuar reforzando la flota del Pacífico, por lo cual el segundo o el tercer submarino nuclear de nueva generación, tipo “Yuri Dolgoruki”, se pondrá en dotación de este contingente naval, dijo Ivanov.

En la estrategia asimétrica, los rusos no intentarán competir en cantidad/calidad simultáneamente. Se concentrarán en priorizar la calidad y la rentabilidad mediante la exportación. De los 160 submarinos nucleares que tenían, ha comenzado el desguace de 140 de la vieja clase Tiphoon (clasificación OTAN) para concentrarse en los estratégicos “Dolgoruki”.

Estados Unidos está aprendiendo la lección que desde Yale le imparte Paul Kennedy (“Auge y Caída de las Grandes Potencias”): es necesaria la flota para construir el imperio, pero en largos períodos de paz, mantener esa flota puede ser un gran desgaste financiero. Así, Estados Unidos empieza a exigir a las economías de Asia que colaboren en la Flota del Pacífico.

Corea del Sur tiene un plan de 15 años para la expansión de su poder marítimo en todas las dimensiones, incluso capacidades militares. Ahora mismo Corea Sur está construyendo tres grandes destructores que desplazan más de 7,000 toneladas y poseen armamento sumamente poderoso. Claramente, éstos no se diseñaron para detener los submarinos enanos norcoreanos que salen furtivamente de la costa. Pero, los coreanos señalan que Japón está en medio de un incremento naval aun mayor.

La edición 2006 de “The Military Balance” por el International Institute for Strategic Studies de Londres registra que la Armada japonesa incluye 54 “naves principales de combate de superficie”, es decir, destructores y fragatas, buques de guerra que poseen armas, proyectiles, torpedos y cargas de profundidad. La vieja y gloriosa Armada Imperial de Togo y Yamamoto está de vuelta.

Nadie quiere quedar como el iniciador de la carrera naval y los japoneses, sin embargo, apuntan al aumento sumamente rápido de la Armada china que ya despliega 71 destructores y fragatas por no mencionar 58 submarinos (comparados con los 18 submarinos de Japón).

Todavía el aumento naval chino está en sus fases tempranas, como la US Navy estaba en los 1890 cuando Mahan escribía. El mes pasado el Congressional Research Service, un cuerpo no conocido por la hipérbole o declaración dramática, emitió un informe notable de 95 páginas titulado “Modernización Naval China: Implicancias para las capacidades de la US Navy.” Los detalles son extensos, y parece impresionante.

Quizás el hechos más importante se envuelve en la primer nota a pie de página: “Para el 2010, la fuerza de submarinos de China será casi doble del tamaño de flota de submarinos americanos Toda la flota naval chinas está proyectada para superar el tamaño de la flota americana para el 2015”.

Esta cita realmente viene de la American Shipbuilders Association (complejo militar industrial), con intereses muy distintos en esta materia. Y es duro creer que el gobierno americano permitiría jamás tal cambio dramático en los equilibrios navales si éstos se dieran. Pero no se puede contradecir el hecho importante que todos en Asia, al parecer, creen vital reforzar el poder marítimo. Incluso un poder pequeño como Vietnam está, según “The Military Balance,” aumentando el gasto de “defensa significativamente durante la década actual, con la armada que recibe infusiones sustanciales de nuevo equipo”.

3. Sun Tzu se hace a la mar.

El 27 de diciembre, en una reunión de delegados en una reunión de la Armada del PLA (Ejército de Liberación Popular), y el Partido Comunista Chino, el presidente Hu Jintao dijo que “la armada debe fortalecerse y modernizarse” y más, que la armada debe prepararse “para la lucha militar en cualquier momento”. Dos días después, Beijing publicó un papel perfilando su postura militar que también enfatizó la importancia del desarrollo de una armada poderosa. Mientras la modernización de la armada china ha estado progresando a paso rápido durante varios años, el reciente énfasis dado a su desarrollo preocupa a Washington y otros poderes regionales.

China apunta por el estatus de “agua azul”, o capacidad de proyectar poder en aguas profundas, por su armada, pero tiene poca experiencia más allá de sus regiones costeras. Su flota actual está dificultada por unidades obsoletas que planea reemplazar en los próximos años con naves modernas. Está actualizando su flota de la superficie comprando destructores rusos clase Sovremenny –ya tienen 17– mientras también sigue con dos nuevas clases de destructores con proyectiles guiados.

Para su flota submarina, China está trabajando con Rusia para actualizar sus submarinos diesel, mientras progresa en la construcción de sus unidades domésticamente diseñadas que ha ido despacio. Su búsqueda de submarinos nucleares y portaviones también está progresando despacio, debido a las dificultades técnicas y una falta de imperativo estratégico detrás de los proyectos.

En su reciente documentos, no se alteraron significativamente los planes de Beijing para su armada. Sin embargo, se dio más preminencia a la importancia de ganar que a la capacidad de proyectar fuerza lejos de sus áreas costeras. China ha publicado documentos esporádicamente sobre sus planes de defensa en los últimos ocho años, en parte para calmar los nervios sobre los aspectos militares de su ascenso en poder.

El enfoque de la armada se debe principalmente a la importancia de asegurar recursos naturales, en especial petróleo, para alimentar la expansión continua de su economía. La confianza de China en suministros de energía extranjera significa que es más importante para su armada poder proteger sus líneas navales de comunicación y mantener abiertos los “puntos de ahogo” a su comercio.

Otras metas para su armada incluyen la capacidad de controlar áreas de soberanía incierta (Islas Spratly), reclamar protección de las zonas económicas exclusivas (significativamente en el Mar de China Oriental) y el desarrollo de una flota capaz de predominar sobre cualquier otro país asiático (con excepción de Japón e India que intentará contrapesar en lugar de desafiar directamente).

La capacidad de volver a tomar Taiwán por la fuerza si permanece necesario el enfoque principal de la Armada de PLA. Un hecho no mencionado en el papel es que mucho de los planes de Beijing para su armada parece incluir desarrollar la capacidad de detener a los Estados Unidos de proteger Taiwán en semejante conflicto. Con este fin, China no parece estar siguiendo una carrera de armas directa con Estados Unidos que tendría poca esperanza de ganar.

Más bien, el desarrollo de Beijing de submarinos diesel y nucleares parece ser un esfuerzo por ganar la capacidad de hacer un asedio submarino a Taiwán. Esto pondría presión sobre Taipei mientras posiblemente evita las consecuencias potenciales de una invasión, a saber un contraataque americano.

Mucho de la reacción del documento chino se enfoca en el 15 % de aumento de China en gasto de defensa. En 2006, China dice haber gastado 36 mil millones de dólares en su ejército, aunque la Agencia de la Inteligencia de Defensa de Estados Unidos cree que la cifra real puede ser de dos a tres veces esa suma. Beijing defiende este aumento notando que su gasto militar sólo es 1.4% de su PBI en 2006, mientras los Estados Unidos gastó 6.2% de su PIB en lo militar.

China a veces pasa penurias asegurando a sus vecinos que su ascenso no constituye una amenaza a la región, y busca disuadir a Washington de creer que está siguiendo una carrera de armas. Muchos en Washington son rápidos al desechar tales nociones, cuando la modernización militar de China se cita a menudo como razón estratégica para aumentar el gasto militar en nuevas tecnologías y proyectos de defensa de gran potencia.

La cooperación militar mejoró bastante entre China y Estados Unidos en 2006. Un informe del Pentágono sobre China en mayo del año pasado describió la modernización militar de China en muchos de los mismos términos que el último documento de Beijing, aunque repitió el argumento que “China tiene el más grande potencial para competir militarmente con los Estados Unidos”. Fuerzas chinas y americanas organizaron sus primeras maniobras conjuntas de búsqueda y rescate en el Pacífico y el Mar Sur de China el año pasado, y Washington tuvo la fea impresión de ver emerger un submarino chino cerca de un portaviones americano.

Los oficiales en Beijing y Washington también son rápidos al señalar las solapadas preocupaciones de seguridad de energía pues son los importadores de petróleo más grandes del mundo. Con este fin, puede esperarse que China continúe con medidas para disuadir los miedos americanos de una próxima carrera de armas, mientras construye una fuerza capaz de detener a la US Navy de interferir en un ataque en Taiwán. Quizás Washington reaccione a su vez y coopere en aspectos de interés mutuo, mientras continúa citando el aumento militar de China como razón para actualizar sus propios sistemas.

A China le gustaría suavizar los miedos que su modernización militar causaría en India y Japón. Al asumir el primer ministro japonés Shinzo Abe el año pasado, China invirtió su posición y aceptó una visita de Estado del nuevo primer ministro. Beijing también usó reuniones de alto nivel con Nueva Delhi para resaltar los crecientes lazos económicos entre sus países y bajar su actual disputa fronteriza.

Mientras Beijing está esforzándose por mostrar a Washington que es una “parte responsable” y que sus vecinos no tienen nada que temer del ascenso de China, continúa apoyando a gobiernos que Estados Unidos considera “regímenes delincuentes” y su política de aislar diplomáticamente a Taiwán sigue constante. Por tanto, al mismo tiempo que participaba en más misiones de mantenimiento de paz de las Naciones Unidas en el 2006, también estuvo más cerca de Irán y continuó apoyando a Sudán pues National China Oil está perforando en Dafur.

Mientras esta política dual persista, Washington y los rivales regionales de China, continuarán mirando la modernización militar de Beijing con cautela. De hecho, dos días después de publicado el documento china, Japón anunció que había organizado un ejercicio conjunto de la Armada Imperial con la US Navy en el Mar de China Oriental el mes anterior basado en el guión que China había invadido las disputadas Islas de Senkaku/Diaoyu.

La reciente divulgación del “white paper” chino tenía varios propósitos. Buscaba disuadir a Taiwán de romper su compromiso “una China”, mientras también calmaba los miedos regionales de una presencia militar mayor en el vecindario. También apuntaba a convencer a Washington que no estaba siguiendo una carrera armamentista, mientras demostraba al mismo tiempo que estaba desarrollando las capacidades para detener la intervención americana en el Estrecho de Taiwán. Nada de esta información debe sorprender: la parte de la política de China en todos estos frentes es seguir una política militar más transparente, aunque es muy sospechoso que hay mucho más gasto no declarado que el considerado en el informe.

Mientras hay poco de nuevo en el papel de China, el énfasis dado a la armada, así como el discurso de Hu antes de su descargo, es un aspecto para tomar en cuenta. China cree que necesitará desarrollar una armada de agua azul para proteger su ascenso económico. Esto le permitirá proteger líneas de comunicación por mar para los inmensos recursos naturales que exige asegurar que su economía continúe creciendo a su nivel actual. De alguna manera, esta meta debe llevar a Washington y Beijing más cerca. No obstante, otros factores continuarán poniendo presión en su relación.

El obstáculo principal es Taiwán, pero ninguna parte parece inclinada para alterar el statu quo. El ascenso de China en Asia también será un desafío a la hegemonía de Washington allí. Como tal, puede esperarse que las discrepancias se continuarán resaltadando en Beijing y Washington, mientras sus militares también se mueven poco a poco hacia relaciones más cercanas enfocadas en preocupaciones de seguridad mutuas.

4. El Vietcong en las Islas de Paracelso.


Desde el fin de la guerra en 1975, Vietnam se había conformado no con una armada sino con una pequeña fuerza guardacostas, compuesta por lanchas rápidas y con la misión de reprimir el contrabando y la piratería, y proteger las actividades pesqueras dentro de las doce millas náuticas. Una fuerza pequeña que cuyo jefe tiene el rango de capitán de navío en otras armadas. En suma, una actividad que en Argentina sería propia de la Prefectura Naval.

Pero he aquí que de fines del 2006 a principios del 2007, aparece una delegación naval vietnamita en Rusia, y termina encargando cuatro corbetas tipo Guepard 3.9 como las que ya están en servicio en el Mar Negro. Son naves dotadas de misiles antinaves y antieaéreos, y cargas antisubmarinas, es decir, para el combate en alta mar. ¿Qué pasó?

Vietnam es un estado costero del Mar de la China del Sur. Otros estados son China, Taiwán, Filipinas, Malasia, Brunei, Indonesia a través del estrecho de Malaca y Tailandia. Justo en el centro del Mar de la China del Sur, se encuentran las Islas de Paracelso y el archipiélago de Spratly, a las que los chinos –sus viejos descubridores– llaman “islas de soberanía incierta”.

Pero en esa suma de pequeñas islas deshabitadas, cayos, atolones y corales, se descubrió que hay petróleo y gas. Las fuentes occidentales minimizan las cantidades; los chinos alegan que es muchísimo más. Un inmenso porcentaje de las reservas probadas hasta hoy está en tierra y bajo control de empresas estatales. Ahora viene la lucha por la exploración y control de las reservas off–shore en aguas relativamente poco profundas y fuera de las aguas territoriales.

En el reclamo ya está China desde el Norte, los Estados Unidos jugando desde el Este en Filipinas –donde son “locales” desde la guerra de 1898– y los ingleses desde Brunei. Tampoco se puede desechar a Malasia como un poder pujante y jugador en la disputa. Y por qué no a Indonesia –fuerte productor de petróleo y gas de la región– que cada vez se acerca más a los acuerdos con la Rusia de Putin: en 2006 acaba de convertirse en su nuevo comprador de armas con pedido de submarinos, blindados y aviones de combate.

Tampoco hay que olvidar a Japón –¿por qué tanto poder naval?– que en diciembre de 1941, después del ataque a Pearl Harbor, lanzó una campaña naval relámpago sobre toda la región, que incluyó la captura se Sumatra, Java y Singapur. Históricamente, las materias primas de Japón vienen de ahí.

Vietnam ve a esas islas como fuente de conflicto y no piensa quedar neutral. Ha empezado con las corbetas rusas.

5. El ocaso de la Europa naval.

Volvamos al escenario europeo. Aquí la tendencia parece estar en la dirección opuesta, con presupuestos navales que se limitan y tamaños de flotas que son reducidas. El caso más publicado en las noticias es que la Armada Real puede estar planeando en poner en “naftalina” mucho de su flota de destructores y fragatas (sólo 25 en número, actualmente menos de la mitad del total de Japón).

Los miembros conservadores del Parlamento –muy enojados– están exigiendo un debate sobre el hecho que los gastos de defensa representan un porcentaje más pequeño de PIB que en cualquier momento desde los años 30. Esos críticos están más molestos aún porque la Armada francesa posee ahora más naves de combate de superficie que Gran Bretaña por primera vez en 250 años (desde la Guerra de los Siete Años 1756-63 que finalizó con el triunfo del modelo colonial anglo–holandés).

Pero el presupuesto naval de Francia no está subiendo mucho, y también están las armadas de Alemania, Italia, España y los Países Bajos con presupuestos en jaque. Todavía nadie en Europa le presta atención a la carrera de armas navales en Asia.

Esto lleva a una pregunta obvia, final: ¿qué asumen los estrategas navales en Asia sobre el futuro del mundo que los estrategas en Europa no hacen? ¿Por qué los programas de televisión pública en China muestran el ascenso de la armada de Elizabeth I mientras el Ministerio de Defensa británico “pone en naftalina” o desecha buques de guerra con nombres que se remontan a más de 400 años?

Es probable que Asia vea más conflictos interestatales futuros que Europa Occidental, que China esté determinada a refrenar la hegemonía americana en el Pacífico y que todos los demás estén asustados por el crecimiento militar chino. En todo caso, estas economías en rápido crecimiento pueden permitirse el lujo de combinar “cañones y manteca”.

6. Lo que se pierde en una guerra no se recupera por elecciones

Mientras los “países en serio” de Asia planifican a medianos y largos plazos, nuestra clase política es incapaz de ver más allá de las elecciones de octubre. En un mundo que marcha al fin del petróleo, Argentina no tiene reservas para más de ocho años.

De última, el control de la energía, de las fuentes de gas y petróleo, es el gran motor de la política internacional actual, de la agresión Estados Unidos/Reino Unido/Israel en el Golfo Pérsico y de la reacción de Eurasia. Lo que está sucediendo allá nos indica que el tsunami globalizador llegó a su cota más alta y “las aguas están bajando”, que los Estados vuelven a retomar protagonismo en defensa de los intereses de los pueblos. Pero nuestra clase política sigue en su limbo de internas, la “lucha de ratones” como la calificó Scalabrini Ortiz.

El último 2 de abril hemos asistido con náuseas a otra sobredosis de desmalvinización. No casualmente, ningún medio informó sobre las tareas de exploración petrolera que llevan a cabo los ingleses de la FOGL (Malvinas Oil Gas Ltd) al este de Malvinas.

No nos engañemos. Nuestra “democracia con derechos humanos” no es producto de luchas populares como lo fueron en su momento el “cordobazo” y otras para derribar a la dictadura de entonces. Nuestra democracia llegó impulsada por las fragatas inglesas de Malvinas. La caída del Proceso fue el resultado de una cúpula liberal (civil y militar) incapaz de luchar contra el imperio más allá de cierto punto. Pero nuestra clase dirigente “democrática” procede como si ellos hubieran derrotado el Proceso.

En política, lo que legitima a un gobierno es la “legitimidad de fines”: el bien común y la supervivencia nacional. Los “medios democráticos” tendrán sólo eso: “legitimidad de medios” y de nada sirven si pierden de vista la “legitimidad de fines”, bien común y supervivencia nacional.

Dentro de unos pocos años, cuando hayamos caído en el monocultivo sojero, con todas sus consecuencias sociales; cuando seamos “la quinta potencia minera” pero nos hayan pagado a lo sumo el 2% de las regalías y eso según las cifras que las multinacionales nos declaren; cuando se haya acabado el petróleo continental argentino, pero los ingleses lo estén extrayendo off–shore desde el Este de Malvinas al Banco Burward frente a Islas de los Estados, frente a nuestras narices; cuando renunciado definitivamente al Poder Naval, veamos cómo las flotas de Oriente depredan nuestros caladeros de pesca –mientras pagan regalías a los kelpers– quizás entonces algunos tomen un poco más de conciencia de lo que significa Poder Naval y Poder Nacional. Pero mucho me temo que será muy tarde.

“En este mundo, quien no planifica es planificado”, dice Peter Drucker. Y Argentina es un país “planificado”, pasivo, un país sin asertividad, condición que sobra en Eurasia y que tanto preocupa a Brzezynski.

Nuestra clase dirigente padece de un gravísimo autismo. Como el avestruz, ha metido la cabeza en el pozo de la “democracia con derechos humanos” y no ve lo que pasa en el resto del mundo, de lo duras y despiadadas que son las luchas geopolíticas. Lo pagaremos con nuestra desaparición.
 
Dentro de unos pocos años, cuando hayamos caído en el monocultivo sojero, con todas sus consecuencias sociales; cuando seamos “la quinta potencia minera” pero nos hayan pagado a lo sumo el 2% de las regalías y eso según las cifras que las multinacionales nos declaren; cuando se haya acabado el petróleo continental argentino, pero los ingleses lo estén extrayendo off–shore desde el Este de Malvinas al Banco Burward frente a Islas de los Estados, frente a nuestras narices; cuando renunciado definitivamente al Poder Naval, veamos cómo las flotas de Oriente depredan nuestros caladeros de pesca –mientras pagan regalías a los kelpers– quizás entonces algunos tomen un poco más de conciencia de lo que significa Poder Naval y Poder Nacional. Pero mucho me temo que será muy tarde.

“En este mundo, quien no planifica es planificado”, dice Peter Drucker. Y Argentina es un país “planificado”, pasivo, un país sin asertividad, condición que sobra en Eurasia y que tanto preocupa a Brzezynski.

Nuestra clase dirigente padece de un gravísimo autismo. Como el avestruz, ha metido la cabeza en el pozo de la “democracia con derechos humanos” y no ve lo que pasa en el resto del mundo, de lo duras y despiadadas que son las luchas geopolíticas. Lo pagaremos con nuestra desaparición.



lei por ahi ,q a alguien le pagan(del gobierno) para q entren al foro,y esten al tanto de lo q se habla y q se dice,en zona militar,ojala q le lleve y comente de este articulo ,y haber si se dejan de idioteses y pensar en como robar mas y mejor y se plantean ,como quedar en la historia,como buenos politicos,y pòr hacer grande a la argentina
 
Le pagan para entrar al foro¡¡ que curro mama, yo entro gratis nomas, y si le pagan, posta este gobierno gasta en cosas al pedo.

PD: El que gobierna el oceano es el H2O
 
CONDOR COMAHUE dijo:
Le pagan para entrar al foro¡¡ que curro mama, yo entro gratis nomas, y si le pagan, posta este gobierno gasta en cosas al pedo.

PD: El que gobierna el oceano es el H2O


EQUIVOCADO nnononono , quien gobierna es poseidon
 

FENIX

Forista Sancionado o Expulsado
Ataque planeado Usraelí contra Irán: ¿habrá guerra?

Michel Chossudovsky
Global Research
Traducción Horacio J. Garetto

Los medios de comunicación han fallado en informar sobre la historia de las preparaciones de guerra norteamericanas contra Irán. Algo, muy poco, comenzó recién a aparecer a principios de 2007.

Aunque estamos en presencia de algo confirmado por informes y documentos oficiales militares sin embargo el hecho es que la opinión pública ha sido mantenida en la oscuridad y desinformada en lo que respecta a estas preparaciones de guerra.

Una guerra contra Irán viene siendo considerada ya desde mediados de los 90’. Durante la administración de Bill Clinton el Comando Central ya había formulado planes para teatros de guerra que incluían primero a Irak y luego a Irán:

“…El objetivo siempre es proteger los intereses vitales de los Estados Unidos en esa región, de forma ininterrumpida, y asegurar el acceso de EU y de sus aliados al Golfo Pérsico”.

(USCENTCOM, http://www.milnet.com/milnet/pentagon/centcom/chap1/stratgic.htm#USPolicy , emphasis added)

Concordantemente con las secuencias planeadas por el Comando Central ya en el año 1995 los planes para atacar Irán fueron reactivados en medio de la ola de la invasión de Irak en el año 2003, bajo lo que se denomina TIRANNT (Theater Iran Near Term). Consiste en un modelo de teatro de guerra directamente diseñado contra Irán que examina todas las alternativas a ese respecto.

"El Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea, los marines, todos tienen preparados planes detallados y han gastado cuatro años construyendo bases y entrenando para la operación “Libertad de Irán”. El almirante Fallon, el Nuevo jefe del Comando Central [renunciado en marzo de 2008], heredó planes bajo el nombre de TIRANNT (Theatre Iran Near Term)." (New Statesman, 19 Feb 2007)

El trabajo al que se hace referencia en la cita de abajo fue publicado hace tres años por Global Research, en el mes de mayo de 2005. Se titulaba Planned US Israeli Attack on Iran y detallaba la primera fase de esos preparativos de guerra en relación con Irán.

(Véase http://www.globalresearch.ca/articles/CHO505A.html)

Ese universo de planificaciones militares está hoy en estado más avanzado. Y asimismo evolucionan las estructuras de las alianzas militares. La OTAN es hoy parte de una alianza militar.

Con los auspicios de la OTAN, relacionados al Pentágono, están los británicos, los alemanes, los franceses, los turcos, todos jugarán un rol de responsabilidad importante en el caso de un ataque contra Irán y contra Siria.

A este respecto conviene tener presente que la OTAN e Israel firmaron un acuerdo de cooperación militar de amplio alcance en el año 2005. También, que existe un acuerdo de cooperación militar entre Israel y Turquía.

De acuerdo con declaraciones y documentos militares que tienen estado público Estados Unidos, Israel y otras fuerzas aliadas están en avanzado estado de preparación. En realidad buena parte de esa planificación ya está lista desde el año 2005.

Pero importantes variables intervienen en la evaluación de la conveniencia de una guerra contra Irán. Un importante número de factores en contrario de esta decisión también están en curso de ponderación.

Ruidos de sables

Ahora bien, todo ese conjunto de preparativos militares se los aprovecha también a menudo para otros objetivos. Esos escenarios de guerra asociados a ultimátums y preparaciones militares también sirven para forzar a otros países a resignar soberanía, a abrir su economía a los inversores occidentales, a privatizar y vender los mejores activos a las compañías norteamericanas, etc. Estas amenazas son efectivas solo si un país carece de capacidades defensivas. La fortaleza de su economía es también de la mayor importancia.

Hay ruidos de sables en relación con Irán. El objetivo final es neutralizar a Irán como poder regional y el de tomar posesión de su fastuosa riqueza petrolera, aproximadamente un 10% del total mundial.

¿Cuáles son las capacidades militares de Irán, a saber su habilidad para defenderse a sí mismo y también para infligir daño a Estados Unidos y sus aliados?

La respuesta a esta cuestión tiene dos aspectos esenciales. Primero, Irán tiene avanzados sistemas de defensa aérea, tanto con tecnologías propias como rusas. Pero además, según los expertos militares occidentales tiene perfeccionados sistemas de misiles con los que puede provocar importantes daños a las instalaciones militares de USA en Iraq, en el Golfo Pérsico y en Israel.

En los últimos años Irán se ha estado preparando activamente para una guerra. Con los ingresos petroleros pudo financiar mejoras en su preparación. Está en una situación muy diferente de la que tenía Irak antes de la invasión de 2003, que había sido blanco de ataques aéreos angloamericanos por más de diez años más otros diez de debilitantes sanciones económicas.

Este factor es el que ha venido operando a favor de demorar las hostilidades.

Los militares norteamericanos son plenamente conscientes de la posibilidad de una escalada. Si se lanza un ataque aéreo el ejército de Irán podría cruzar la frontera de Irak y atacar las instalaciones norteamericanas. Esta circunstancia ha venido ayudando a poner un freno.

Pero en lugar de un vasto bombardeo que podría tener una fuerte réplica los yanquis podrían lanzar ataques aéreos limitados con la idea de que Irán no conteste. Según especula Philip Giraldi el ataque sería como una especie de pin pong cortito, circunscripto a golpear solo a la gente de al-Qods y evitar bajas entre la población civil. Mediante amenazas y negociaciones secretas Washington podría intentar asegurarse de que Irán no replique.

Las capacidades militares americanas

El almirante Fallon, que fue recientemente despedido como Jefe Supremo del Comando Central del Ejército tenía plena conciencia de las habilidades militares y de la capacidad de réplica iraní. Esta comprensión fue transmitida a comienzos de 2003 en el marco de los escenarios de guerra TIRANNT.

Antes de ser renunciado el almirante Fallon desechó la posibilidad de una guerra “mientras el estuviera”.

El almirante Mullen, Jefe de la Junta de Jefes de Estados Mayores, reconoció las debilidades americanas. Dijo que las guerras de Irak y de Afganistán pueden haber socavado la capacidad militar de librar guerras contra adversarios de gran envergadura, incluido Irán (citado por el diario israelí Haaretz, octubre 22 de 2007)

En una entrevista con el New York Times, Mullen dijo:

"...los riesgos pueden ser altos, muy altos….... estamos ya en conflictos con dos países … tenemos que pensar muy bien antes de meternos en un tercero en esa parte del mundo”

Estas declaraciones fueron hechas al comienzo de su mandato como Comandante de la Junta de Jefes de Estado Mayor en octubre de 2007.

Las dudas del almirante Mullen no se originan en una postura política divergente sino en una evaluación realista de las capacidades militares americanas. Mullen ve que están sobreextendidos y que enfrentan severos problemas para conseguir reclutas para la guerra.

Pero además tácitamente se reconoce que el Pentágono y las fuerzas de la coalición enfrentan una fiera resistencia tanto en Afganistán como en Irak.

La designación del general Petraeus como jefe del Comando Central

La designación del general Petraeus como jefe del Comando Central tiene por objetivo neutralizar las oposiciones eventuales que pueda haber dentro de las Fuerzas Armadas. Refuerza la posición del vicepresidente Cheney y sus posibilidades de asegurarse de que si ordena el ataque tenga el apoyo sin fisuras de las Fuerzas Armadas.

El objetivo es preparar el escenario para un ataque utilizando como pretexto que Irán sería responsable de la caída de soldados norteamericanos en Irak (Ver “Iran should be "Set Up for an Attack" by Muriel Mirak-Weissbach, Global Research, May 2008). Irán es acusado también de intervenir en Afganistán y Líbano. A este respecto los ataques israelíes del 2006 al Líbano son parte de una amplia agenda militar de guerra contra Irán y contra Siria. (ver Mahdi D. Nazemroaya, Global Research, May 2007)

Enfrentamientos armados en el Líbano

Los recientes enfrentamientos armados en el Líbano entre el Hezbollah contra el movimiento 14 de mayo apoyado por Estados Unidos y por Israel precipitaron el país en el caos. Las peleas brotaron después de que el gobierno pro norteamericano de Siniora anunció medidas enérgicas contra el Hezbollah.

El Hezbollah tomó el control de partes del Beirut occidental lo cual podría preparar el escenario para una intervención de la OTAN de “mantenimiento de la paz”. Una mayor implicación de la OTAN y más militarización de toda la costa este del Mediterráneo, los dos forman parte del escenario de guerra contra Irán y contra Siria: las referidas fuerzas de “mantenimiento de la paz de la OTAN”, actuando por cuenta de Israel, en realidad apuntan a Siria, al Hezbollah y al Hamas.

Estos acontecimientos fueron deliberados. Tenían por objetivo desestabilizar el país. Forman parte de los planes militares de EU. Están preparado el escenario de una confrontación con Siria.

La estructura de las alianzas militares

Conocer la estructura de las alianzas militares es crucial. Norteamérica cuenta con Israel y con la OTAN.

Los aliados de Iran son China, Rusia y los estados miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (SCO).

China y Rusia tienen acuerdos militares de cooperación de amplio alcance con Irán. Desde 2005, Irán tiene el estatus de miembro observador en la Organización de Cooperación de Shanghai (SCO). Esta organización a su vez está vinculada con el Tratado de Seguridad Colectiva (CSTO), un conjunto de acuerdos militares de cooperación entre Rusia, Armenia, Bielorrusia, Uzbekistan, Kazajstan, Kirguistán y Tajikistan.

En octubre de 2007, la gente del Tratado de Seguridad Colectiva (CSTO) y los de la Organización de Cooperación de Shanghai (SCO) firmaron un Memorandum de Entendimiento poniendo las bases de la cooperación militar entre las dos organizaciones. Este acuerdo entre el SCO-CSTO, un hecho de gran importancia pero sin embargo apenas mencionado en los multimedias occidentales, implica la creación de una alianza militar completa (full-fledged) entre China, Rusia y los miembros del SCO/CSTO. Es importante tener presente que esta gente realizó ejercicios militares conjuntos en el año 2006, en coincidencia con los realizados por Irán. (Para más detalles ver Michel Chossudovsky, Russia and Central Asian Allies Conduct War Games in Response to US Threats, Global Research, August 2006)

EU y sus aliados buscan debilitar la estructura de lazos militares que tiene Irán con Rusia y con China. En este último país están los cuarteles generales de la Organización de Cooperación de Shangai.

Esto indica que la alianza militar euroasiática que subyace debajo de la OCS se fortaleció. Irán actualmente tiene estatus jurídico de observador. Pero su gobierno ya manifestó deseos de ser miembro pleno de la SCO. Pero además en el último año Irán fortaleció sus vínculos energéticos petroleros y gaseros mediante oleoductos y gasoductos que llegan hasta la India pasando por Pakistán. La inclinación de la India hacia el lado de Irán en el terreno petrolero y gasero debilita la influencia de Washington en la región.

"Lo que Teheran está buscando es "nada menos que un rediseño de una nueva relación entre las naciones de Eurasia, cuya colaboración en el desarrollo de una infraestructura de nivel continental-- energía nuclear, gas y oleoductos petroleros y gaseros y transporte –debería todo ello establecer las bases de una auténtica independencia política y económica”( Muriel Mirak Weissbach, May 2008)

La historia alecciona mucho respecto de la importancia de las alianzas militares. Los Estados Unidos y sus socios de la OTAN están buscando socavar la formación de una alianza militar cohesionada que pueda desafiar y contener el expansionismo de la dupla US-OTAN en Eurasia, combinando las capacidades militares no solo de India y de China, Rusia, sino también de varias antiguas repúblicas soviéticas lo cual incluye Bielorrusia, Armenia, Kazajstan, Tajikistan Uzbekistán y Kirguistán.

La decision de ir a la Guerra

La decisión de ir a la Guerra no la toman los altos mandos militares.

Esa decisión la toman civiles.

El Ejército de E.U. tiene una jerarquía y una estructura de comando. Las órdenes vienen de arriba, emanan del gobierno civil, o sea, hoy, de la administración Bush. Van hacia abajo a través de la estructura de comando. Una vez dada la orden de ir a la guerra no se discute, no se debate, es ejecutada por el aparato militar. Además, con toda probabilidad, puentearán al Congreso, en una flagrante violación del art. 1 Sección 8 de la Constitución. No les importa.

En la práctica el presidente y comandante en jefe del Ejército no deciden. Ellos también obedecen órdenes. Aplica los dictacts de poderosos intereses corporativos.

La guerra es motivada por el afán de ganancias. “La guerra es buena para los negocios”, se repite constantemente, como un mantra. Es una operación para ganar dinero. Son miles de millones de ganancias para Wall Street, para los gigantes petroleros, para el complejo militar industrial, ni hablar de los especuladores en monedas, en barriles de petróleo, y en los mercados de materias primas agrícolas.

El objetivo de la guerra propuesta es para extender las fronteras de la economía global capitalista, eventualmente, si se puede, tomar el control de la riqueza petrolera iraní. Las tremendas implicaciones éticas y políticas de usar armas nucleares tácticas en un teatro de guerra convencional no preocupan a los tipos que deciden la guerra.

El rol central del vice presidente Dick Cheney

A diferencia de otras administraciones, en esta de George W. Bush, el vicepresidente juega un rol importantísimo, en realidad, eclipsa al presidente. En la práctica, rodeado de un ejército de consejeros y funcionarios, es el hombre que controla la Casa Blanca. Es el vértice, además de un poderoso aparato corporativo, por medio de sus vínculos con Halliburton y el rol que esta empresa cumplió en la definición de una agenda militar determinada por el apetito de ganancia.

Cheney jugó personalmente un rol clave en activar planes de guerra contra Irán.

“ Al principio del segundo mandato de Bush, Cheney tiró una bomba. Dijo que Irán estaba en el tope de la lista de los estados canallas, enemigos de Norteamérica y que Israel debería bombardearla (Michel Chossudovsky, May 2005)

Dick Cheney es de hecho la cabeza del estado. Bush es meramente figurativo. Recientemente jugó un rol clave en presionar a los estados árabes de la línea del frente en apoyar un ataque contra Irán.

Al vice presidente Cheney le importan muy poco las consecuencias probables y las vidas que se puedan perder como consecuencia del uso de armas, ya sea convencionales, ya sean nucleares, contra Irán. Tiene plena conciencia de que aún un ataque aéreo limitado puede desatar un enorme conflicto que abarque todo el Medio Oriente y todo el Asia Central, hasta las fronteras occidentales con China. Todos estos escenarios ya fueron considerados. Se los tiene presente.

La crisis más seria de la Historia Moderna

Estamos en la encrucijada más seria de la historia moderna. Estos planes de guerra están en paralelo con un proceso de reestructuración económica y con una bastante bien instalada depresión económica mundial. La guerra y la globalización son procesos que están íntimamente relacionados. La militarización de Medio Oriente y de Asia Central tienen que ver con el proyecto de extender el sistema del “libre mercado” hacia esas nuevas fronteras.

A su vez la Guerra intensifica la crisis económica. La economía civil está colapsando, eclipsada y socavada por el complejo militar industrial, el que sí que, en un sentido bien real, y no figurado, produce armas de destrucción masiva. Concurrentemente los altos precios del crudo, de los alimentos de primera necesidad, empujados por la especulación en los mercados de commodities, empobrecieron a millones de personas.

El movimiento antiguerra tiene que actuar de forma inequívoca, contundente, para prevenir esta nueva fase de la guerra. No es fácil. Altos funcionarios, militares y del Congreso se han arrogado la autoridad para mantener una agenda de guerra ilegal. Se precisará de un amplio movimiento de masas, nacional e internacional, que desafíe la legitimidad de los que dicen que gobiernan en nuestro nombre.

Criminales de Guerra ocupan posiciones de poder. Las ciudadanías están hipnotizadas en el apoyo a los gobernantes que nos dicen que están comprometidos con nuestra “seguridad y nuestro bienestar”. A través de la desinformación de los medios se nos presenta a la guerra con un rostro humano.

Para revertir la marea de la guerra las bases militares tienen que cerrarse, la maquinaria de la guerra (entre otras la producción de sistemas de armas avanzados) tiene que ser detenida y la construcción de un estado policial tiene que ser desmantelada.

Hay que enfocarse asimismo en las grandes corporaciones, en las grandes petroleras, en los grandes bancos, en los grandes contratistas de la defensa, todos los cuáles devinieron parte integral de la maquinaria de guerra militar.

Con solo los sentimientos antiguerra no vamos a ningún lado. Los criminales de guerra de Estados Unidos, de Israel y de Gran Bretaña tienen que ser echados de sus oficinas.

Lo que es absolutamente necesario es revelar el verdadero rostro del Imperio Americano y la subyacente criminalización de la política exterior norteamericana que usa la “guerra contra el terrorismo” y la amenaza de al Qaeda para conseguir el apoyo del público a favor de una agenda permanente de guerra (Michel Chossudovsky, 1 de mayo de 2005).
 
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