Los pilotos apuntan contra Defensa por las fallas en el radar de Ezeiza
La asociación que los nuclea aseguró que la salida de operaciones del sistema se debe a la "desinversión" por parte del Ministerio de Defensa. Las demoras en los vuelos perjudican a más de 16.000 personas por día. Hay alarma ya que pilotos y controladores trabajan "a ciegas"
La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) responsabilizó al Ministerio de Defensa por la salida de servicio del radar de tránsito aéreo de Ezeiza.
Los pilotos convocaron a una conferencia de prensa urgente, alarmados tras la segunda falla en el radar en menos de dos días. Allí aseguraron que los problemas se deben a la “inoperancia” y la “desinversión” para brindar las tareas.
"Existe un alto grado de desinversión de parte de la Fuerza Aérea y unos niveles de inoperancia nunca vistos antes. Esto se está degradando y desarmando a pedazos. El sistema está francamente colapsado", expresó el secretario gremial de APLA, Pablo Biro.
Por su parte, el titular del gremio, Jorge Pérez Tamayo, dijo que “cuando algo así sucede en los Estados Unidos o Europa, de inmediato hay una solución porque se ponen a funcionar radares secundarios”.
“Acá el sistema colapsó. Los controladores terrestres trabajan como en los años 50 y eso provoca no sólo demoras sino también una degradación importante en la seguridad”, agregó.
En un tono más crítico, Tamayo dijo que lo primero que debería hacerse es “poner dinero para reemplazar la plaqueta del radar que se quemó. Hay que tratar de reparar esto lo más rápido posible para que el funcionamiento sea seguro. Luego debería cambiarse toda la infraestructura, que es de los años 50”.
“Aún reparando el actual radar de Ezeiza estaríamos utilizando tecnología de varias décadas atrás. Resulta incompatible operar un flujo cada vez mayor de aviones de nueva generación con un soporte de tierra obsoleto e inadecuado”, explicaron los pilotos acerca de la responsabilidad de la cartera de Defensa, que conduce Nilda Garré, al no hacer un llamado a licitación.
A ciegas
En un comunicado, APLA explicó que los afiliados están "instruidos" para "maximizar" las normas de seguridad de sus acciones, dado que sin el radar los pilotos y controladores están trabajando "a ciegas, tratando de imaginar el espacio aéreo en base a reportes de los pilotos sobre la posición de aviones moviéndose a 800 kilómetros por hora”.
Asimismo, dijeron que “en los últimos meses hemos llevado a cabo una intensa labor, realizando conferencias alertando a la opinión pública sobre el colapso del sistema de control de tránsito aéreo. La falta de radar es tan sólo una muestra más de la grave situación que denunciamos. Lamentablemente, este escenario se sigue agravando día a día debido a la ineficacia en la gestión y administración”.
“La falta de equipamiento, inversión y capacitación sólo garantiza la degradación de la seguridad y eficiencia del sistema. La urgencia de traspasar la aviación civil a manos de civiles especializados en el tema no es un mero capricho; es una necesidad para dar el punto de partida en la ardua tarea que llevará revertir esta grave situación. Mientras tanto es nuestra obligación colaborar en la búsqueda de una solución definitiva que garantice un funcionamiento adecuado acorde a los tiempos que vivimos”, agregaron los pilotos.
El radar "Baires", ubicado en Ezeiza, había sufrido un serio desperfecto la semana pasada, cuando un rayo cayó y provocó que saliera de servicio, aunque en esta ocasión nada tenía que ver con ese incidente.
Muchos viajeros mostraron su alarma por la continuidad de los trastornos en el servicio y demandaron una rápida puesta a punto de los sistemas de monitoreo de los despegues y aterrizajes.
Aerolíneas Argentinas informó que la extensión del problema provocó "reprogramaciones, demoras y posibles cancelaciones en la programación de los vuelos hasta que se solucione el inconveniente", afirmó el gerente del Área Corporativa del Grupo Aerolíneas-Austral, Jorge Molina.
Las demoras, que perjudican a unos 16 mil pasajeros diarios, ya son habituales en los más de 80 vuelos diarios que se realizan desde o hacia el aeroparque.