Relaciones EEUU - Israel

Sebastian

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Excarcelado tras 30 años el estadounidense que espió para Israel

Fue uno de los topos más famosos en la historia americana y cumplía condena por vender información a Israel en los 80


Amanda Mars Nueva York 20 NOV 2015 - 21:20 CET


El espía Jonathan Pollard, puesto este viernes en libertad condicional, junto a su esposa, Elaine Zeitz, en Manhattan. / MIKE SEGAR (REUTERS)

De madrugada y lejos de cualquier cámara de televisión, Jonathan J. Pollard, uno de los espías más famosos de la historia en Estados Unidos, salió este viernes de la cárcel del Carolina del Norte en la que ha pasado los últimos 30 años de su vida por vender información a Israel. Pollard, nacido estadounidense, fue descubierto en 1985, en una época en la que la que algunos casos de corrupción y frecuente aparición de topos destapó las debilidades de los servicios de inteligencia americanos, y condenado a cadena perpetua dos años después.

Pollard tenía 31 años cuando fue arrestado, queda ahora libertad bajo condiciones y vivirá probablemente en el área de Nueva York, aunque no se ha confirmado esta información por parte de sus abogados, pero no podrá mudarse de momento a Israel. El Gobierno israelí, que no había reconocido abiertamente aún que trabajaba para ellos, le concedió la nacionalidad en los 90. Aprovechando su puesto como analista en los servicios de inteligencia de la Marina de EE UU, estuvo pasando grandes cantidades de información información armamentística y de seguridad a cambio de dinero y joyas.

El descubrimiento causó estupor en la Administración de Ronald Reagan porque se consideró una traición por parte de su aliado israelí y también cuestionó la credibilidad de los servicios de inteligencia americanos. La CIA incluye Capturar a Jonathan Pollard, de Ronald J. Olive, entre las lecturas recomendadas a sus agentes y recuerda que este se incorporó a la Marina estadounidense tras haber sido rechazado para la CIA.

Pollard, nacido en Texas y formado en la Universidad de Stanford y la escuela de Derecho y Diplomacia de Tuffs, contaba a sus compañeros de estudios fantasías sobre el espionaje y se declaraba coronel del Mossad, según relata en su libro Olive, que es quien capitaneó la investigación que acabó en el arresto. La obra pone sobre la mesa los errores del sistema que hicieron posible que un hombre que cometía numerosas torpezas en su trabajo secreto, y que tan solo estuvo en esa unidad durante 18 meses, pudiese convertirse en un proveedor de información tan importante.

Desde su condena por espionaje y traición en 1987, los diferentes dirigentes israelíes han pedido su excarcelación a la Administración de Estados Unidos, argumentando que la condena era demasiado grave para la filtración de unos documentos que no causaron daños. Y este asunto siempre ha estado sobre la mesa entre las negociaciones entre ambos países socios, pero precisamente por lo simbólico del caso, era más difícil una concesión por parte de EEUU.

Los abogados han presentado una demanda contra la Comisión de Libertad Condicional de Estados Unidos, en la que solicitan que se eliminen la exigencia de no poder viajar o llevar un brazalete de identificación. "La idea de que, después de haber luchado y finalmente obtenido su liberación tras 30 años en la cárcel, el señor Pollard revele ahora información caduca de más de 30 años de antigüedad a alguien es absurda. Aparte de que la información no tiene ningún uso, revelarla resultará en una rápida vuelta a la cárcel", indicaron sus letrados, Eliot Lauer y Jacques Semmelman, en un comunicado.
http://internacional.elpais.com/internacional/2015/11/20/actualidad/1448020674_394996.html
 

Sebastian

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Israel celebra la liberación de Pollard, el espía convertido en ídolo nacional

Cumple condena en EE UU por espionaje desde 1987
Su figura ha adquirido relieve hasta ser modelo de patriotismo para la extrema derecha


Beatriz Lecumberri Jerusalén 20 NOV 2015 - 16:18 CET


Jonathan Pollard, en una imagen de 1998. / Karl DeBlaker (AP)

"Esperamos con impaciencia la liberación de Jonathan Pollard", fueron las palabras del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, al conocer que este judío norteamericano detenido en 1985 y condenado a cadena perpetua en 1987 por espionaje, que ha salido este viernes de la cárcel estadounidense donde purgaba su pena.

Espía, traidor, héroe o simplemente un bocazas, la controvertida figura de Pollard ha ido adquiriendo relieve en Israel con el paso de los años hasta convertirse en un modelo de patriotismo para la extrema derecha o en una víctima de un excesivo celo de la justicia estadounidense para la gran parte de los israelíes, quienes apoyan mayoritariamente su liberación por considerar que ya ha pagado caro por sus errores.

"Al principio, en los ochenta, los israelíes estaban enfadados porque consideraban que nunca se debió espiar a EE UU. Pero con el paso del tiempo los ciudadanos comenzaron a ver que a Pollard se le estaba castigando en exceso y su condena era inusualmente larga", declara a EL PAÍS Eytan Gilboa, investigador del centro de estudios estratégicos Begin-Sadat, de la universidad israelí de Bar Ilan.

El nombre de Pollard, un exanalista de la Marina estadounidense que soñaba con ser agente del Mossad y entregó miles de documentos secretos a Israel, ha estado presente en las conversaciones bilaterales de todos los primeros ministros de Israel con sucesivos presidentes estadounidenses, desde Ronald Reagan hasta Barack Obama. A lo largo de estos 30 años, todos los jefes de Gobierno israelíes han querido interceder con mayor o menor éxito en favor del preso, sobre todo desde que adquirió la nacionalidad israelí en 1995 y fue reconocido como un espía israelí en 1998.

"Creo que el caso Pollard no ha tenido repercusiones negativas en las relaciones bilaterales. Tal vez las agrió al principio, cuando lo arrestaron. Pero luego ha habido desacuerdos mucho más importantes entre EE UU e Israel por razones de mucho más peso, sin mencionar la complicada relación entre Obama y Netanyahu", explica Gilboa.

"Lo más importante para Israel es que Obama ha dicho que las relaciones de cooperación militar o en materia de inteligencia entre nuestros dos países están en su mejor momento. Y además, no hay que olvidar que EE UU nos espía también", relativiza el experto.

De todos los jefes de Gobierno israelíes, Netanyahu ha sido sin duda quien ha pedido la liberación de Pollard con mayor vehemencia. Este caso no ha agriado las relaciones bilaterales pero sí ha estado omnipresente. En 2011, el primer ministro escribió una carta a Obama pidiendo clemencia para el espía, al que había visitado incluso en prisión.

Su liberación es, por tanto, una victoria para Netanyahu, pese a que Pollard no podrá abandonar el territorio estadounidense en los próximos cinco años, a no ser que Obama lo autorice.

A lo largo de estos años la liberación del espía estadounidense ha sido usada también como moneda de cambio. Periodistas israelíes y estadounidenses filtraron que el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, se dijo dispuesto a levantar su condena si Israel daba pasos significativos hacia la creación de un Estado palestino.

El anuncio de su libertad, a finales del pasado julio, hizo también correr el rumor de que era una compensación para Israel por el acuerdo nuclear iraní firmado por aquellos días entre Teherán y la comunidad internacional, una hipótesis negada por Washington, que asegura que su decisión se ha basado en razones humanitarias.
http://internacional.elpais.com/internacional/2015/11/20/actualidad/1448008937_245538.html
 

Sebastian

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Obama despide a un Netanyahu más fuerte y arrogante


A Obama le quedan nueve meses de su segundo mandato. Cuando llegó a la Casa Blanca en enero de 2009 se propuso resolver el conflicto israelí-palestino. La oposición frontal de Israel le ha hecho fracasar. Netanyahu ha conseguido su objetivo y el proceso de judaización del Gran Israel atraviesa por su mejor momento.


EUGENIO GARCÍA GASCÓN

JERUSALÉN.- En la recta final de su segundo mandato, Barack Obama deja a un Israel más seguro y decidido en los objetivos que se ha marcado y con la ocupación de los territorios ocupados palestinos más consolidada que nunca. El presidente americano se va a despedir de la Casa Blanca sin haber hecho nada para acabar con un conflicto cuya resolución parece ya de todo punto imposible.

El portavoz del departamento de Estado John Kirby ha vuelto este viernes a referirse al último borrador de resolución que los palestinos han distribuido estos días en el Consejo de Seguridad de la ONU para condenar los asentamientos judíos por enésima vez, y lo ha hecho con la vaguedad de siempre.

“Estamos muy preocupados por las tensiones que hay en el terreno y existe un sentido de urgencia sobre la solución de los dos Estados. Vamos a considerar todas nuestras opciones para adelantar nuestro objetivo compartido de una paz duradera entre israelíes y palestinos, pero no voy a comentar sobre el borrador de resolución del Consejo de Seguridad”, ha dicho Kirby.

Los Estados Unidos han permitido año tras año que se llegue a una situación que es prácticamente irreversible y la fomentan de muchas maneras, por ejemplo vetando las resoluciones internacionales, atiborrando de armas a Israel o dando al Estado judío una considerable ayuda económica y política que le permite incrementar la ocupación.
Esta misma semana 394 de los 435 miembros del Congreso han firmado una carta en la que se pide Obama que no haga nada contra Israel en el Consejo de Seguridad. Esto significa que más del 90 por ciento de los congresistas están en contra del borrador de resolución que ha hecho circular el presidente Mahmud Abás, un porcentaje que explica muy bien, aunque no la justifica, la parálisis absoluta de la administración estadounidense.

Esto ha sido así desde el principio. Veinte días después de alojarse Obama en la Casa Blanca, el 10 de febrero de 2009, Netanyahu ganó las elecciones y asumió ya de una manera abierta las posiciones más radicales de la derecha nacionalista y religiosa que se pueden resumir en las palabras de Dany Dayan, el máximo representante de los colonos judíos durante muchos años: el statu quo tal como lo entiende Israel es la mejor solución al conflicto.

Israel entiende el statu quo como mantener la expansión colonial en los territorios ocupados y seguir construyendo a destajo mientras se acorrala a la población palestina en guetos, e incluso entiende el statu quo como pedir cínicamente el apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea para combatir la resistencia a la ocupación, explicando descaradamente que el problema es el ocupado y no la ocupación.

El 18 de mayo de 2009 Netanyahu efectuó su primera visita a la Casa Blanca. Obama había designado al senador George Mitchell como enviado para el conflicto. Mitchell había resuelto el problema de Irlanda del Norte a finales de los noventa, pero enseguida se vio obligado a dimitir al comprender que los israelíes no querían la paz sino continuar con la ocupación.

Uno de los ideólogos más cercanos a Netanyahu fue en esa época, y lo sigue siendo hoy, Yoram Hazony, fundador del influyente Centro Shalem de Jerusalén, un think tank ultraconservador y religioso, desde el que Hazony asesoró a Netanyahu. Su teoría es sencilla: es preciso judaizar el Gran Israel (incluidos los territorios ocupados) en todos los ámbitos.

Antes que nada es necesario reforzar el patriotismo, hay que judaizar el sistema judicial y hay que judaizar aún más la educación. El ejército y los servicios de seguridad ya se hallan en un proceso avanzado de judaización pero Hazony ha escrito que el ejército tiene que avanzar más en esa dirección. Lo cierto es que el proceso de judaización está progresando rápidamente en todas las instituciones del Estado.

Sostiene Hazony que es un error hablar de Israel como “un estado judío y democrático”, a pesar de lo que han sostenido durante años al respecto políticos israelíes de la derecha y la izquierda, puesto que ‘judío’ y ‘democrático’ son conceptos incompatibles y contradictorios y es preciso que triunfe el judaísmo. Un Estado democrático no puede ser un Estado judío, ha escrito Hazony, lo que bien mirado es una obviedad.

Poco después de iniciar su primer mandato, Obama dio un discurso en El Cairo donde se refirió al conflicto israelí-palestino. En esos primeros meses como inquilino de la Casa Blanca, el presidente todavía no había comprendido que Israel no tenía ningún interés en la paz. Pocos días después Netanyahu le respondió desde la Universidad Bar Ilan de Tel Aviv, diciendo que la paz no dependía de la retirada israelí y urgiendo a la comunidad internacional, y a los palestinos en particular, a que reconocieran a Israel como Estado judío.

El 23 de septiembre de ese año de 2009, Obama dio marcha atrás y ya no habló nunca más de una congelación total de las colonias judías. Desde entonces el presidente americano ha sido consistente con esa posición, y aunque es cierto que en algún momento ha condenado verbalmente la ocupación, nunca ha adoptado ninguna medida para suprimirla.

Desde entonces han transcurrido siete años. Las relaciones entre Obama y Netanyahu no han sido siempre cordiales. El año pasado Netanyahu fue al Congreso a criticar con dureza la posición de Obama con respecto a Irán. Los congresistas se levantaron de sus asientos en decenas de ocasiones para ovacionar calurosamente a Netanyahu, algo que no hacen con su presidente.

Durante el mandato de Obama, que ha sido el primer presidente que no ha permitido ninguna condena de Israel en el Consejo de Seguridad, la situación del conflicto se ha agravado. Está claro que su resolución ya no depende de Estados Unidos. Los palestinos estos días están haciendo un llamamiento desesperado a Europa, pero los dirigentes europeos, todos ellos grandes paladines de la democracia, tienen otros asuntos de los que ocuparse.
http://www.publico.es/internacional/obama-despide-netanyahu-mas-fuerte.html
 

Sebastian

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Netanyahu vuelve a ser bienvenido en la Casa Blanca tras la era Obama

Trump invita al primer ministro israelí a visitarle en Washington en la primera oportunidad posible


Juan Carlos Sanz
Jerusalén 9 NOV 2016 - 21:39 CET
Donald Trump intentó despejar la incertidumbre con la que fue inicialmente recibida su elección en Israel con una inmediata invitación al primer ministro Benjamín Netanyahu a visitarle en la Casa Blanca “en la primera ocasión posible”. El nuevo comandante en jefe de Estados Unidos, un país que aporta 38.000 millones de dólares en un programa de 10 años para garantizar la defensa israelí, había suscitado resquemores sobre su supuesta neutralidad en el conflicto de Oriente Próximo.

Sin apresurarse exageradamente –como el egipcio Abdelfatá al Sisi, cuyo país es el segundo receptor de ayuda militar norteamericana en la región con 1.300 millones de dólares anuales– el primer ministro felicitó a Trump y le calificó de “verdadero amigo de Israel”. Será el primer presidente republicano con el que coincidirá Netanyahu en sus casi 10 años como jefe de Gobierno. Su relación con el mandatario saliente, Barack Obama, ha sido todo menos fluida. Ahora confía en ser recibido con mayor asiduidad en la Casa Blanca en aras del “del vínculo de hierro” que, según su mensaje de felicitación, une ambos países con “valores, intereses y un destino compartidos”.

Pese a las sombras de aislacionismo generadas durante la campaña del candidato republicano, Netanyahu ha mantenido abierta una vía privilegiada de relación con Trump a través del magnate de los casinos Sheldon Adelson, promotor del fallido proyecto de juego Eurovegas cerca de Madrid, quien ha contribuido con grandes sumas la elección de Trump y respalda abiertamente también los intereses locales del líder del Likud. Adelson financia a fondo perdido la edición del diario gratuito Israel Hayon, sin duda el más favorable a la política del Gobierno entre toda la prensa del Estado hebreo.

Trump ha jugado además la baza del acercamiento a Israel mediante la presencia a lo largo de la campaña de las presidenciales de su yerno, el judío ortodoxo Jared Kushner. El ahora presidente electo legó incluso a prometer que, en contra de la política tradicional de Washington, trasladaría de Tel Aviv a Jerusalén la Embajada estadounidense, una medida rechazada por la mayor parte de la comunidad internacional, al implicar el reconocimiento de una capitalidad en disputa con los palestinos, que aspiran a que la parte oriental de la Ciudad Santa albergue algún día sus instituciones estatales.

Los sectores más nacionalistas del Gobierno de Netanyahu, aparentemente reforzados por el discurso radical y antiislámico del republicano, dan por hecho que la elección de Trump representaba el fin de la idea de un Estado palestino. Pero en Ramala el presidente Mahmud Abbas se hizo eco del supuesto halo de neutralidad que se ha atribuido al mandatario electo —y sobre todo de su impredecible talante–- para solicitarle que colabore en una solución negociada para impedir “la inestabilidad en la región”. “Estamos dispuesto a tratar con él sobre el establecimiento del Estado de Palestina dentro de las fronteras anteriores a 1967”, aseguró un portavoz de la Autoridad Palestina en un mensaje que aún no ha tenido respuesta.
http://internacional.elpais.com/internacional/2016/11/09/actualidad/1478723182_790411.html
 

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Irán y palestinos, en la agenda del primer encuentro entre Netanyahu y Trump

Agencia EFE12 de febrero de 2017

Jerusalén, 12 feb (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, viajará mañana a Washington, donde el miércoles mantendrá su primer encuentro oficial con el presidente de EEUU, Donald Trump, con el que pretende consensuar una línea política respecto a Irán y los palestinos.

En la esperada reunión, Netanyahu confía en constatar el "apoyo incondicional" que le ofreció Trump durante la campaña electoral para los comicios presidenciales de EEUU del 8 de noviembre de 2016 y adelantó que le propondrá renovar las sanciones a Irán tras los ensayos con misiles balísticos del pasado mes.

Netanyahu destacó hoy que a pesar de que Trump y él se conocen desde hace años, esta es la primera vez en que se entrevistan con los actuales cargos que desempeñan, dijo en la reunión semanal del Gobierno israelí, según se informó en un comunicado.

En este sentido, subrayó que se trata de un encuentro "muy importante para la seguridad de Israel, que está fortaleciendo su presencia internacional y por encima de todo, sus intereses nacionales".

El primer ministro israelí ha debatido con funcionarios de seguridad, del Ministerio de Asuntos Exteriores y otros expertos el contenido de la reunión,y ha trabajado para perfilar el mensaje que debe transmitir al presidente estadounidense, precisa la nota.

"Mis objetivos son cuidar de la seguridad del Estado de Israel, fortalecer la alianza inquebrantable con EE.UU. y otros intereses nacionales íntimamente ligados con nuestra relación" con este país, afirmó Netanyahu, quien afirmó actuar con "responsabilidad" y "prudencia" para lograrlo.

El ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman, cree que en la la conversación entre Trump y Netanyahu se dará prioridad a la cuestión nuclear iraní pero la derecha nacionalista presiona para que suponga también un punto de inflexión en la política con los palestinos y pide que deseche oficialmente la solución de los dos estados y avance hacia la anexión de territorios palestinos.

"Las dos palabras -Estado palestino- son un desastre histórico", publicó ayer en su Facebook el primer socio de Gobierno y líder del partido ultranacionalista y pro colono Hogar Judío, Naftalí Bennet, sobre la cita del miércoles: (esas palabras) "No deben ser dichas. Es nuestro examen", dijo.

Netanyahu, que por lo menos oficialmente acepta la solución de los dos estados, declaró el pasado mes frente a los diputados de su partido Likud que estaba dispuesto a dar a los palestinos "algo menos que un Estado", reduciendo la soberanía atribuida en esta solución.

Trump se pronunció por primera vez el jueves para un periódico israelí, Israel Hayom (Israel Hoy) sobre los asentamientos en territorio palestino y dijo que las colonias "no ayudan al proceso" de paz y que el Gobierno israelí debe "actuar con responsabilidad".

"No queda mucha tierra. Cada vez que tomas tierra para un asentamiento, queda menos territorio. No soy alguien que cree que avanzar en las colonias sea bueno para la paz, pero estamos examinando varias opciones", declaró.

Una semana antes, la Casa Blanca señaló en la misma línea que "la construcción de nuevos asentamientos no ayuda" a conseguir la paz: "aunque no creemos que la existencia de colonias sea un impedimento para alcanzarla", matizó.

Aún así, el Gobierno estadounidense aclaró que todavía no tiene una posición al respecto, pero los analistas creen que estas últimas declaraciones reflejan un cambio de visión sobre el conflicto palestino israelí que podría haber llegado tras el encuentro con el rey de Jordania, Abdalá II, y las mediaciones de Arabia Saudí.

Desde que Trump asumió la presidencia de Estados Unidos, el pasado 20 de enero, el Ejecutivo israelí ha relanzado su política colonizadora con la aprobación de más de 6.000 viviendas en asentamientos de Jerusalén Este y Cisjordania y ha dado luz verde a una ley para regularizar 4.000 casas en territorio cisjordano.

También el traslado de la Embajada de EEUU de Tel Aviv a Jerusalén será otro de los puntos más importantes de la agenda y Trump afirmó este fin de semana que "no es una decisión fácil".

"Se ha discutido durante muchos años. Nadie quiere tomar esta decisión, y yo estoy pensando en ello seriamente", afirmó.

El jefe de la inteligencia palestina, Majed Faraj, mantuvo por primera vez estos días contactos en Washington con miembros del Ejecutivo estadounidense, tras los que salió optimista y asegura que Trump está reconsiderando estos planes, según la prensa local.

No obstante, los palestinos se mantienen a la expectativa del contenido de la reunión, después del revés que les ha infligido Washington, que ha rechazado la candidatura del ex primer ministro palestino Salam Fayad como enviado de la ONU a Libia.

Netanyahu, que tiene previsto regresar a Israel el jueves, se alojará en la "Blair House", frente a la Casa Blanca y residencia oficial de invitados y mandatarios extranjeros, un estatus del que no disfrutaba desde 2012.
https://es.noticias.yahoo.com/irán-palestinos-agenda-encuentro-netanyahu-trump-154228188.html
 

Sebastian

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Trump congela su plan de trasladar la embajada de EE UU a Jerusalén
El presidente de EE UU evitará la polémica promesa electoral en su viaje por Oriente Próximo

Cuando lo anunció, en el fragor de la batalla electoral, sonó a barrabasada marca de la casa. Cuando se reafirmó en ello, con la presidencia ya ganada, puso a Oriente Próximo en alerta naranja. Pero no hay mudanza a la vista: Donald Trump ha decidido congelar sine díe su idea de trasladar de Tel Aviv a Jerusalén la embajada de Estados Unidos en Israel. Descarta así, al menos por el momento, lanzar esa bomba diplomática por lo que tiene de provocación para los palestinos, ya que supone el reconocimiento de la ciudad como capital israelí, cuando se trata de un territorio disputado y objeto de negociación.

La promesa electoral empezó a enfriarse en los últimos días y este miércoles, a punto de comenzar el primer viaje internacional de Trump como presidente, que le llevará a Israel, se ha dado por finiquitada, según fuentes de la Administración citadas por Bloomberg. Otras fuentes, citadas por CNN o Reuters, también confirmaron que no habrá anuncio incendiario precisamente en medio de esa gira, si bien añaden que el plan no está enterrado para siempre. La realidad de la política internacional amortigua los excesos del neoyorquino, que se ha topado con la preocupación -en privado- de los propios israelíes por las consecuencias que pudiera tener semejante mudanza.

“No creemos que sea inteligente hacerlo ahora”, dijo la citada fuente, “hemos dejado muy claro cuál es nuestra posición”, añadió, pero “no queremos provocar a nadie cuando todo el mundo se está comportando muy bien”. La del traslado de la embajada, aunque polémica, no era una promesa inédita entre los candidatos americanos, el demócrata Bill Clinton también lo planteó en el pasado, pero nunca cristalizó. Queda por ver si Trump lo da oficialmente por muerto en algún momento lo deja en suspenso indefinidamente.

El republicano ha llegado a la Casa Blanca con un mensaje de mayor proximidad con Benjamin Netanyahu frente a su predecesor, Barack Obama. En el primer encuentro como presidente que mantuvo con el primer ministro israelí a mediados de febrero, el americano se alejó del compromiso de crear un Estado palestino -la llamada “solución de los dos Estados”- , pero tampoco defendió, al menos en público, su incendiaria propuesta sobre la embajada. A primeros de mayo también recibió al líder palestino, Mahmud Abbas, y anunció el inicio de un proceso de diálogo en busca de un acuerdo de acabe con este interminable conflicto.

En su gira, Trump se reunirá por separado con Netanyahu y con Abbas. Aunque la agenda no está confirmada, se espera que vea al primero en Jerusalén y al segundo en la ciudad cisjordana de Belén. Es una visita plagada de simbología y de sus consiguientes riesgos para un territorio turbulento desde hace décadas. El viaje del republicano también incluye una visita al Muro de las Lamentaciones, enclave sagrado para el judaísmo y también el Islam, anexionado a Israel en la guerra de 1967 y que los palestinos reclaman.
http://internacional.elpais.com/internacional/2017/05/17/estados_unidos/1495053003_854624.html
 

Sebastian

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Trump rectifica y decide no trasladar ahora a Jerusalén la embajada de EEUU

El presidente mantiene la sede diplomática israelí en Tel Aviv, como el resto de los países del mundo, para favorecer un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos


Amanda Mars
Washington 1 JUN 2017 - 18:57 CEST
Donald Trump activó este jueves su modo Realpolitik y anunció que la embajada de Estados Unidos seguirá en Tel Aviv, donde se ubican las embajadas del resto de países, y no se trasladará a Jerusalén, con el fin de favorecer las negociaciones de paz en Oriente Medio. La mudanza, —una de sus promesas electorales más polémicas—, hubiese resultado incendiaria porque significa el reconocimiento de la ciudad como capital israelí, cuando se trata de un territorio disputado.

"Nadie debería considerar este paso como una marcha atrás en el fuerte apoyo del presidente a Israel o a la alianza de Estados Unidos-Israel. El presidente ha tomado esta decisión para maximizar las posibilidades de una negociación exitosa y lograr un acuerdo entre Israel y los palestinos, cumpliendo su obligación de defender los intereses de seguridad nacional americanos", señala el comunicado de la Casa Blanca.

El tema israelí no ha sido el único asunto internacional en el que el republicano ha tenido que suavizar o, directamente, cambiar su postura. Aunque fue crítico durante la cumbre la OTAN, se ha guardado en el cajón aquella acusación de que la Alianza Atlántica "está obsoleta". Tampoco ha anulado el acuerdo nuclear con Irán, pese a maldecirlo, y ha abandonado la dialéctica hostil con China en asuntos de comercio.

La decisión de este jueves se materializa con la firma de una dispensa de la llamada Jerusalem Embassy Act, la ley de 1995 que establece ese traslado de la embajada estadounidense. Ningún presidente desde entonces —Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama— la ha aplicado, por la bomba diplomática que supone y se ha ido postergando a base de dispensas.

El primer ministro, Benjamin Netanyahu, hizo el comunicado de rigor lamentando una decisión que, a su juicio, "ayuda a mantener viva la fantasía palestina de que los judías y el estado judío no tienen conexión con Jerusalén". Pero, pese a la "decepción", añadió, el Gobierno valora la confirmación de "amistad" de Trump con su país. Hussam Zomlot, embajador de Palestina en Estados Unidos, dio la bienvenida a la decisión de Trump. "Esto está de acuerdo con la política estadounidense y el consenso internacional y le da una oportunidad a la paz", dijo en un comunicado.

El propio Trump empezó a enfriar la promesa de cambiar esta práctica en las últimas semanas, aunque tampoco este jueves ha querido dar por enterrado el compromiso: "Como ha dicho repetidamente, su intención es trasladar la embajada, la pregunta no es si ocurre, sino cuándo", recalca el comunicado.

Este cambio de tercio ya se empezó a vislumbrar tras sus reuniones en la Casa Blanca con Netanyahu, y el líder palestino, Mahmud Abbas, y tomó fuerza en la víspera de su viaje por Oriente Próximo. En esa gira, Trump se comprometió a “hacer todo lo posible para ayudar a las partes”. “He tenido un encuentro con el presidente palestino Abbas y puedo decir que está listo para la paz. Tras una reunión con mi buen amigo Benjamín, también puedo decir que tiende la mano a la paz. Pero hacer la paz no será fácil”, dijo.

El primer grano de arena ha sido evitar el incendio diplomático de llevarse la embajada a Jerusalén, algo respecto a lo que los propios israelíes se mostraban preocupados en privado, por cuánto elevaría la tensión en la zona.
http://internacional.elpais.com/internacional/2017/06/01/estados_unidos/1496326077_072003.html
 

Sebastian

Colaborador
Estados Unidos ya tiene su primera base militar permanente en Israel
Se ha desvelado hoy el acuerdo entre ambos países para situarla en la base de Bislach, cercad de Mitzpe Ramon

18 de septiembre de 2017. 20:30h larazon.es. Jerusalén.

El comandante de la defensa aérea israelí, TZvika Haimovich, a la derecha, junto al general John L. Gronski, firman el acuerdo en la base de Bislach, cercad de Mitzpe Ramon, hoy lunes.
Ap
Hoy el Ejército israelí ha desvelado que se ha establecido por primera vez una base militar norteamericana en su territorio, como parte de la estrecha cooperación militar entre ambos países, informó a Efe el comandante de la defensa aérea israelí, Tzvika Haimovich.

Este brigadier general dijo que la nueva base militar no contradice el empeño israelí por demostrar su autosuficiencia a la hora de defenderse de sus enemigos: “No es contradictorio con nuestras capacidades, cooperamos con EEUU, pero no a cualquier precio”.

El mensaje que Israel quiere transmitir a la zona es que “trabajamos junto al mayor ejército del mundo”, dijo.

Según Haimovich, varias docenas de soldados norteamericanos estarán estacionados de modo permanente en la base y operarán sistemas norteamericanos, no israelíes, subrayó.

El comandante del aire no quiso hablar sobre la posibilidad de que los soldados norteamericanos participasen en operaciones de combate, pero sí afirmó que “es mucho más significativo que eso. Hay una presencia americana aquí, una fuerza militar, no civil”.

La construcción de la base, en el sur del país, se ha estado gestando durante dos años y el proceso “ha sido fluido, porque la relación entre las aviaciones de ambos países, entre los comandantes de ambos ejércitos, es más fuerte que la relación entre los líderes políticos y las administraciones”, afirmó Haimovich.

La defensa aérea de Israel cuenta hoy con el sistema Cúpula de Hierro, diseñado para derribar misiles de corto alcance, y el sistema Arrow, capaz de interceptar misiles balísticos fuera de la atmósfera terrestre.

Además, dispone del sistema de defensa antimisiles Honda de David, diseñado para interceptar misiles balísticos tácticos, cohetes de medio y largo alcance, así como misiles de crucero lanzados desde un rango de 40 a 300 kilómetros de distancia.

EEUU e Israel han cooperado en el desarrollo de varios sistemas de defensa de misiles, incluyendo el Cúpula de Hierro.

http://www.larazon.es/internacional...-base-militar-permanente-en-israel-OE16035694
 

Iconoclasta

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Obama ya no considera a Jerusalén capital del Estado hebreo


La amistad entre EE.UU. e Israel parece ser cada vez más frágil.
La nueva plataforma de Barack Obama, presentada para las elecciones de noviembre a la Convención Nacional del Partido Demócrata, quitó una referencia clave: el compromiso de EE.UU. con Jerusalén como capital de Israel.
Así, para los comicios del 2008, la plataforma afirmaba que "Jerusalén es y seguirá siendo la capital de Israel. Las partes han acordado que Jerusalén es un asunto de negociación para alcanzar el estatus final. La ciudad debería permanecer indivisible y accesible a la gente de todas las religiones".
No obstante, esta vez el Partido Demócrata retiró de su plataforma el compromiso "inquebrantable". Es más, Israel también perdió su título del "principal aliado regional" de EE.UU. en Oriente Medio.

Romney no tolera la ‘vergüenza’

El candidato republicano Mitt Romney ya criticó a Obama por su "vergonzosa negativa" a reconocer a Jerusalén como la capital del Estado hebreo y prometió en caso de ser elegido presidente restaurar la relación con el país y mantenerse “hombro con hombro con el aliado cercano".

Amistad fría

Últimamente las relaciones entre los antiguos socios parecen enfriarse considerablemente, sobre todo debido al polémico tema del ataque militar que podría realizar Israel por su cuenta contra las instalaciones nucleares de Irán.
Así, esta semana EE.UU. envió un claro mensaje al Estado hebreo, advirtiendo que la Casa Blanca no apoyará dicho ataque contra la República Islámica, ni se dejará arrastrar a la guerra.
Esta postura ha ampliado la brecha existente entre el Gobierno israelí y la Administración de Barack Obama, que cree que aún queda tiempo para que Irán modifique su actitud y se inclina por esperar a ver los efectos de las sanciones ya impuestas.
http://dintelars.blogspot.com.ar/2012/09/obama-ya-no-considera-jerusalen-capital.html

No solo esto quedo atras, sino que ya son 3 los paises que mudaron sus embajadas a Jerusalem, y seguramente otros tantos seguiran.

https://www.infobae.com/america/mundo/2018/05/21/paraguay-inauguro-su-nueva-embajada-en-jerusalen/

Paraguay inauguró su nueva embajada en Jerusalén
 

Washington sancionará a la Corte Penal Internacional si investiga a Israel o a los
propios Estados Unidos
 
Trump: "Es hora de que EE.UU. reconozca plenamente la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán"
Publicado: 21 mar 2019 16:58 GMT | Última actualización: 21 mar 2019 17:19 GMT


Los Altos del Golán fueron tomados por Israel de Siria en la Guerra de los Seis Días de 1967, junto con Cisjordania de Jordania y la Franja de Gaza de Egipto.

https://actualidad.rt.com/actualidad/309330-eeuu-reconoсer-soberania-israel-altos-golan

El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha afirmado a través de su cuenta de Twitter que Washington debería reconocer la soberanía de Israel sobre el territorio disputado de los Altos del Golán.

"Después de 52 años, es hora de que Estados Unidos reconozca plenamente la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, que tienen una importancia estratégica y de seguridad crítica para el Estado de Israel y la estabilidad regional", escribió el mandatario.


De "ocupados" a "controlados" por Israel

Los Altos del Golán fueron tomados por Israel de Siria en la Guerra de los Seis Días de 1967, junto con Cisjordania de Jordania y la Franja de Gaza de Egipto.

Tradicionalmente, Washington caracterizó en documentos oficiales a los territorios palestinos y los Altos del Golán como "ocupados". Sin embargo, la semana pasada se registró un cambio en la visión de Estados Unidos de la soberanía israelí sobre estos territorios.

En el reporte sobre los derechos humanos en Israel y los Altos del Golán, divulgado este 13 de marzo por Mike Pompeo, secretario de Estado de EE.UU., la descripción habitual sobre los territorios "ocupados por los israelíes" fue reemplazada por "controlados por los israelíes".

Con esos términos se describen el Golán, meseta del noreste de Israel que fuera conquistada en 1967 y cuya población es predominante drusa, y el Área C de Cisjordania, que abarca un 60 % del territorio de esa región y está totalmente bajo control militar israelí, conforme a los acuerdos de Oslo.

Este nuevo uso contradice la terminología oficial de la ONU e incluso el reporte anterior del Departamento de Estado de EE.UU.

En noviembre pasado, EE.UU. fue el único país que en la Asamblea General de la ONU apoyó a Israel al votar contra una resolución que califica el anexamiento de los Altos del Golán como "nulo y sin valor".
 


La presión de Trump provoca el veto de Israel a la entrada en ese país de dos
congresistas musulmanas de EEUU.
 

La congresista Rachida Tlaib, que a última hora recibe el visto bueno para visitar Israel,
rechaza el permiso.
 
El informe dice que Estados Unidos cree que Israel plantó dispositivos espías cerca de la Casa Blanca; Israel: mentiras

Netanyahu niega la historia de Politico de que Israel está vigilando la administración de Trump, dice que es "una mentira completa"; Washington se abstiene de reprender a Jerusalén sobre la materia

Por el personal de TOI
12 de septiembre de 2019, 2:00 p.m. 18

https://www.timesofisrael.com/us-believes-israel-planted-spy-devices-near-white-house-report/

La administración Trump concluyó que Israel es responsable de la colocación de equipos de vigilancia de teléfonos celulares cerca de la Casa Blanca y en otros lugares sensibles en Washington, DC, informó el jueves Politico. El primer ministro Benjamin Netanyahu rechazó rápidamente la acusación como una "mentira completa ... No una chispa de verdad".

Un ex alto funcionario estadounidense con conocimiento del asunto dijo que se suponía que los dispositivos se instalaron para espiar al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump y sus principales asesores, aunque no estaba claro si el intento fue exitoso.

En contraste con otros casos de espionaje extranjero, Washington se negó a castigar o reprender a Jerusalén sobre el asunto, según el informe.

Según el informe, que se basó en conversaciones con tres ex altos funcionarios estadounidenses con conocimiento del caso, los pequeños dispositivos, conocidos como "StingRays", engañan a los teléfonos celulares para que revelen su ubicación e identifiquen información al imitar una torre celular. Se dijo que un "análisis forense detallado" realizado por el FBI reveló que los dispositivos fueron plantados por Israel.

El Departamento de Seguridad Nacional y el Servicio Secreto desempeñaron un papel en la investigación, que también pudo haber involucrado a la NSA y la CIA, informó Politico.

"Estaba bastante claro que los israelíes eran responsables", dijo un ex alto funcionario de inteligencia de Estados Unidos.

Un ex funcionario dijo que tales investigaciones suelen estar encabezadas por la división de contrainteligencia del FBI. Los dispositivos se examinarían para "contarle un poco sobre su historia, de dónde provienen las piezas y piezas, cuántos años tienen, quién tuvo acceso a ellas y eso lo ayudará a conocer cuáles son los orígenes", dijo el funcionario. .

La Oficina del Primer Ministro emitió una declaración sobre el informe, calificando la acusación de "una mentira descarada".

“Existe un compromiso de larga data y una directiva del gobierno israelí de no participar en ninguna operación de inteligencia en los Estados Unidos. Esta directiva se aplica estrictamente sin excepción ", se lee en la declaración de la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu.

El propio Netanyahu luego desestimó el informe. Aterrizando en Sochi antes de las conversaciones con los líderes rusos, lo llamó "una mentira completa". No hay una pizca de verdad en ello. Nada."

El informe dijo que la administración Trump no reprendió al gobierno israelí por el presunto intento de espionaje, ni pública ni privadamente.

"La reacción ... fue muy diferente de lo que hubiera sido en la última administración", dijo un ex alto funcionario de inteligencia de Estados Unidos. "Con la administración actual, hay un conjunto diferente de cálculos con respecto a abordar esto".

El ex funcionario criticó el enfoque de la administración al respecto. "No estoy al tanto de ninguna responsabilidad en absoluto", dijo el funcionario.

"Los israelíes son bastante agresivos" en sus operaciones de recolección de inteligencia, dijo un ex alto funcionario de inteligencia. "Se trata de proteger la seguridad del estado israelí y hacen lo que sienten que tienen que lograr para lograr ese objetivo".

Sin embargo, un ex funcionario señaló que aunque era preocupante que Israel supuestamente estaba espiando a los Estados Unidos, "por otro lado, ¿adivina qué hacemos en Tel Aviv?"

El ministro de Relaciones Exteriores, Israel Katz, emitió un comunicado, negando categóricamente que Israel realice operaciones de espionaje en los Estados Unidos.

"Estados Unidos e Israel comparten mucha información de inteligencia y trabajan juntos para prevenir amenazas y fortalecer la seguridad de ambos países", dijo Katz.

Amos Yadlin, ex jefe de Inteligencia Militar, dijo que el informe era "noticias falsas condimentadas con antisemitismo".

Un portavoz de la embajada israelí en Washington, Elad Strohmayer, negó a Político que Israel haya colocado los dispositivos en Washington y dijo: “Estas acusaciones son una tontería absoluta. Israel no realiza operaciones de espionaje en los Estados Unidos, punto ".

Un alto funcionario de la administración Trump dijo que la Casa Blanca no "comenta sobre asuntos relacionados con la seguridad o la inteligencia". El FBI declinó hacer comentarios a Político sobre la historia y el Departamento de Seguridad Nacional y el Servicio Secreto no respondieron
 
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