"Paralelo 52", la Marina Mercante en Malvinas.
La película de Graciela Gómez Muollo, filmada en el Puerto local y las playas del sur, expone testimonios de tripulantes y una cara inédita del hundimiento del Narwal y el buque ARA Isla de los Estados en el conflicto del Atlántico Sur.
Las historias de vida de los tripulantes de la Marina Mercante Argentina en la Guerra de Malvinas inspiraron el sexto documental de la comunicadora Graciela Gómez Muollo. “Paralelo 52” es el nombre que lleva esta producción marplatense que demandó más de un año de trabajo e investigación y que por estas horas se presenta en Río de Janeiro y Londres. El film abre las puertas a una nueva mirada sobre dos de los momentos más duros para la flota nacional durante el conflicto bélico del Atlántico Sur: el hundimiento al pesquero Narwal y la pérdida del buque logístico ARA Isla de los Estados, emblemas de la Armada.
“Un desafío”. Así define la conductora del programa televisivo Comunidad Portuaria (próximo a cumplir mil emisiones) al proceso de investigación, filmación y producción que encaró junto a su familia, Veteranos de Guerra y representantes de las fuerzas armadas de Mar del Plata.
“Paralelo 52” expone testimonios, historias de vida y también de muerte. En su documental anterior, Graciela Gómez Muollo ya había contado la participación de Prefectura en Malvinas. Pero la experiencia de la Marina Mercante se presentó precisamente como un desafío para este nuevo trabajo.
En diálogo con El Atlántico, la creadora de este documental marplatense recordó que durante la época de la Guerra le “impedían” hablar del hundimiento del Narwal. Treinta años más tarde, la destrucción del emblemático buque pesquero se convirtió en el epicentro del film que próximamente -luego de pasar por Río de Janeiro y Londres- se presentará en la ciudad.
El guión, de su autoría, contó con la “supervisión constante” de los Veteranos de Guerra durante la filmación. “La Marina Mercante tuvo muchos muertos en combate. Más de los que la gente se imagina. Los veteranos siguieron cada paso del documental”, remarcó.
RECREAR EL DOLOR
Tres décadas después de finalizado el conflicto, los ex combatientes aceptaron colaborar en este trabajo para recrear con el mayor realismo posible los meses de combate en las Islas.
Así, los testimonios de tripulantes están entrelazados en el documental con la recreación de algunos de los momentos más duros de la flota. Observar a los ex combatientes reviviendo algunos de los momentos más amargos de la Guerra logró erizar la piel de los creadores del film.
Ejemplo de este proceso fue el de Omar Alberto Rupp, el contramaestre del Narwal (murió sin conocer a su hijo, ya que su mujer tuvo familia durante la navegación), que murió en la cubierta del buque con la pierna izquierda destrozada por la metralla de los aviones. La pérdida de su vida quedó reflejada en “Paralelo 52”.
Pero también se expone el caso de Feliciano Miño, otro tripulante que “recién 31 años después de la Guerra empezó a hablar de lo que le pasó”. Perdió un ojo, un dedo y quedó seriamente afectado psicológicamente como muchos de sus compañeros.
MALVINAS, EN CASA
La zona aledaña a la Base Naval de Mar del Plata se convirtió en uno de los escenarios preferenciales para recrear historias del combate.
El Ejército dispuso tanquetas y camiones; la Armada le permitió utilizar a Gómez Muollo el carguero “Cabo de Hornos” para representar algunas de las historias vividas sobre el ARA Isla de los Estados; y el Inidep dispuso uno de sus buques que simula ser el Narwal en el film.
Las escenas en tierra, en tanto, se filmaron en las playas del sur de la ciudad. La directora del documental asegura que “Los Acantilados fue un espacio ideal para recrear Malvinas”.
“Paralelo 52 tiene mucho trabajo de investigación. Está basado en las historias, en fotos y videos de la guerra. Logramos entrelazar los testimonios con esta recreación de Malvinas realizada desde distintos escenarios de Mar del Plata. Fue un desafío que me llena de orgullo”, completó.
EL DOCUMENTAL
-Directora: Graciela Gómez Muollo.
-Duración: 1 hora 30 minutos.
-Filmación: demandó un año y se utilizaron cinco cámaras.
-Subtitulado: portugués e Inglés (en proceso).
-Presentaciones: Río de Janeiro, próximamente Londres, Capital Federal (Centro de Comisarios Navales) y Mar del Plata.
Redacción El Atlántico
El subrayado es mío