Este es un pequeño homenaje a las tripulaciones de los nobles B-707 y sus misiones de Exploración y Reconocimiento Lejanos en el Atlántico Sur. Tenemos unos excelentes comentarios del Biguá en las páginas 405, 406, 408 y 409 sobre las misiones y lo que significaban en la inmensidad de ese mar a explorar, las largas horas, la incertidumbre y la certeza de saber que si algo les sucedía en aquellos parajes, nadie podía llegar hasta ellos.
Del otro lado, el miedo y la angustia también se hacían sentir, este es el relato de lo que sucedía en RFA "Engadine", un 3 de Junio de 1982 (extractado del libro "Scram!
The Gripping First-hand Account of the Helicopter War in the Malvinas", por Harry Benson, piloto del 847 Squadron con 4 helicópteros Wessex HU5, rumbo a las Malvinas):
"...siendo un barco mercante básicamente, no teníamos sistemas fijos de armas a bordo, aunque sí contábamos con muchas ametralladoras, fusiles y lanzadores de cohetes....la alarma sonó durante la hora del almuerzo...seguido de un anuncio con dramatismo "A sus puestos, a sus puestos" (NT hands to action stations, en el original) ¡Alerta NBCD (Alerta de ataque nuclear, biológico o químico)!...Mi adrenalina fluía mientras bajábamos por los corredores hacia nuestros puestos y esperamos por el anuncio de que esto era sólo un ejercicio. Nunca llegó, esto era real. Mi puesto estaba en una sala de reuniones junto con Lt. Ray Colborne, un piloto experimentado de los Wessex...junto con otras 12 personas...comenzé a preocuparme y asustarme cada vez más...era como estar atrapados en una lata, con las bombas o misiles a punto de caer sobre nosotros, sin poder ver nada, sin poder responder al fuego, estábamos perdidos...
El líder del Squadron, Mike Booth, tenía su puesto en la cubierta superior y salió justo para ver a un B-707 de la Fuerza Aérea Argentina, alejándose y volando muy bajo, luego de sobrevolar e identificar al Engadine a unos 500 pies, pudiendo ver con claridad las escarapelas celestes de la FAA a los costados, fue un espectáculo asombroso en el medio de la nada (NT el resaltado es mio), el Boeing luego se alejó y desapareció sobre el horizonte.
Uno de nuestros Royal Marines, que estaba en su puesto manejando una de las ametralladoras montadas sobre las barandas de la cubierta superior, ni siquiera atinó a dispararle a pesar que podría habernos soltado algunas bombas por sus puertas de carga (NT los B-707 no tenían armamento alguno, pero para entonces los C-130 bombarderos ya estaban haciéndose famosos por esos lares, quizás de allí la confusión)...las reglas de enfentamiento (ROE) aun en esta etapa permanecían poco claras para estos casos y un requerimiento de aclaraciones adicionales por parte del Squadron Leader a Londres nunca fue respondido...Recuperado de la sorpresa y la impresión, Booth fue hacia el puente y le sugirió al Capitán Freeman un cambio de rumbo (20 grados) más alejado hacia el Este, en su ruta hacia las Malvinas..."
Y así "...en el medio de la nada...", los nobles transporteros convertidos en cazadores de buques, lograron identificar y probablemente demorar en algún día, debido al cambio de rumbo, la llegada de esta nave que era muy esperada ya que llevaba al 847 Squadron y sus tripulaciones y valiosos Wessex. Finalmente llegaría a la TEZ, el día 6 de Junio y estaría en San Carlos para el 9 de Junio.
Lamentablemente, la página oficial de FAA para el día 3 de Junio no menciona este encuentro, la tripulación del noble TC-91 estaba compuesta ese día por: Vcom. Luis Manuel Castiella Lopez, Vcom. Juan Carlos Ossa, S.P. Andrés Martín Hustey, S.P. José Genaro Ramos, S.P. Aroldo René Bonorino, S.M. Carlos Juan Guerra y C.P. Enrique Rubén Entiveros. ¿Existirá alguna foto de ese encuentro qué probablemente no sólo haya asustado sino también dejado sordos momentáneamente a los colegas del Engadine? Todo....en el medio de la nada.......