Un articulo interesante sobre los acontecimientos de estos dias de un periodista por sirio que suele tener buena información:
Por Elijah J. Magnier: @ejmalrai
Un desarrollo significativo tuvo lugar en Siria el viernes. Un ataque ruso contra un convoy turco en Idlib, en el noroeste de Siria, mató a 36 soldados y oficiales turcos. En represalia, Turquía lanzó un ataque con drones armados sin precedentes que duró varias horas y resultó en la muerte y heridas de más de 150 oficiales y soldados sirios y sus aliados de Hezbollah y Fatimiy'oun. Los drones turcos destruyeron docenas de tanques y lanzacohetes desplegados por el ejército sirio a lo largo de la línea del frente. Rusia cesó el apoyo aéreo para Siria y sus aliados exigieron a Rusia una explicación por la falta de coordinación de su detención unilateral del apoyo aéreo, lo que permitió que los drones turcos mataran a tantas fuerzas aliadas y al ejército sirio. ¿Qué pasó, por qué y cuáles serán las consecuencias?
En octubre de 2018, Turquía y Rusia firmaron un acuerdo en Astana para establecer una zona de conflicto a lo largo de las carreteras Damasco-Alepo (M5) y Alepo-Latakia (M4). Se acordó que todos los beligerantes se retirarían y harían las carreteras accesibles al tráfico civil. Además, se decidió poner fin a la presencia de todos los yihadistas, incluidos los tayikos, turkistaníes, uigures y todos los demás combatientes extranjeros presentes en Idlib junto a Hayat Tahrir al-Sham (antiguo ISIS, antiguo al-Qaeda en Siria), Hurras al-Din (al-Qaeda en Siria) y Ahrar al-Sham con sus combatientes extranjeros y todos los rebeldes "no moderados". El año pasado, Hayat Tahrir al-Sham tomó el control total de Idlib y su área rural bajo la atenta mirada de Turquía. Más de un año después, el compromiso turco de poner fin a la presencia de yihadistas y abrir los M5 y M4 no se había respetado. El ejército sirio y sus aliados, junto con Rusia, acordaron imponer el acuerdo de Astana por la fuerza. En unas pocas semanas, la línea de defensa yihadista se derrumbó bajo los fuertes bombardeos rusos. Según los comandantes de campo, los yihadistas dejaron menos de 100 hombres en cada aldea, quienes se retiraron bajo los fuertes bombardeos y prefirieron irse en lugar de ser rodeados por el ejército sirio y su rápido avance.
Turquía, según los comandantes militares en Siria, vio la retirada de los yihadistas y decidió trasladar a miles de soldados a Siria para liderar un contraataque contra el ejército sirio y sus aliados. Esta acción hizo imposible que Rusia distinguiera entre yihadistas y el ejército turco. Además, Turquía se abstuvo de informar a Rusia, como había acordado según el acuerdo de desconflicto entre Rusia y Turquía, sobre la posición de sus fuerzas regulares. Esto fue cuando Rusia bombardeó un convoy que mató a 36 oficiales turcos junto con 17 yihadistas que estaban presentes junto con el ejército turco. Según fuentes de toma de decisiones en Siria, la Fuerza Aérea rusa no estaba al tanto de la presencia del convoy turco cuando casi fue diezmado en Idlib. El comando turco ha suministrado vehículos turcos y desplegado miles de soldados turcos con los yihadistas. "Casi parece que el presidente turco, Recep Tayyeb Erdogan, quería que este elevado número de bajas turcas parara el ataque exitoso y rápido del ejército sirio en el frente de Idlib y redujera la rápida retirada de los yihadistas". Según las fuentes, Rusia se sorprendió por la cantidad de soldados turcos asesinados y declaró un alto el fuego unilateral para calmar el frente y desescalar. Moscú ordenó a su sala de operaciones militares en Siria detener el empuje militar y detener el ataque en la zona rural de Idlib. Involucrarse en una guerra contra Turquía no es parte de los planes del presidente Putin en Siria. Rusia pensó que era el momento adecuado para calmar el frente y permitir que Erdogan lamiera sus heridas.
Esta ilusión rusa no se correspondía con las intenciones y planes turcos en Siria. Turquía movió su base de comando y control militar en las fronteras con Siria para dirigir ataques contra el ejército sirio y sus aliados. Drones armados turcos montaron un ataque de drones organizado sin precedentes que duró varias horas, destruyendo toda la línea de defensa siria en los M5 y M4 y minando la efectividad del ejército sirio, equipado y entrenado por Rusia. Además, Irán informó a Turquía de la presencia de sus fuerzas y fuerzas aliadas a lo largo del ejército sirio, y le pidió a Turquía que detuviera el ataque para evitar bajas. Turquía, que mantiene a más de 2000 oficiales y soldados en 14 lugares de observación que hoy están bajo el control del ejército sirio, ignoró la solicitud iraní y bombardeó el cuartel general iraní y el de sus aliados, incluido un hospital militar de campaña que mató a 30 (9 Hezbollah y 21 Fatimiyoun) y decenas de oficiales del ejército sirio. El ataque turco hirió a más de 150 soldados del ejército sirio y sus aliados.
Ahora estaba claro que Rusia, Irán y sus aliados habían malinterpretado al presidente Erdogan: Turquía está en la batalla de Idlib para defender lo que Erdogan considera territorio turco (Idlib). Ese es el significado del mensaje turco, basado en el comportamiento y el despliegue del ejército turco junto con los yihadistas. Damasco y sus aliados consideran que Rusia cometió un error al no evitar que los drones turcos atacaran el territorio controlado por Siria en Idlib. Además, Rusia cometió otro grave error al no advertir a sus aliados que el liderazgo político en Moscú había declarado un alto el fuego unilateral, exponiendo a los socios en el campo de batalla y negándoles cobertura aérea. Esta no es la primera vez que Rusia detiene una batalla en medio de su curso en Siria. Sucedió antes en al-Ghouta, este de Alepo, el-Eiss, al-Badiya y Deir-ezzour. Fue Rusia quien le pidió al ejército sirio y a sus aliados que se prepararan para la batalla M5 y M4. Militarmente hablando, tal ataque no puede ser detenido a menos que todas las partes acuerden un alto el fuego en todos los frentes. El alto el fuego unilateral fue un grave error porque Rusia no anticipó la reacción turca ni permitió que el ejército sirio y sus aliados se equiparan con sistemas de defensa aérea. Además, mientras Turquía bombardeaba al ejército sirio y sus aliados durante varias horas, les tomó muchas horas a los comandantes rusos convencer a Moscú de intervenir y pedirle a Turquía que detuviera el bombardeo. El comando militar de Siria y sus aliados creen que Turquía podría sentirse alentada a repetir ese ataque por la vacilación rusa para oponerse. Por lo tanto, Siria, Irán y sus aliados han decidido asegurar la cobertura aérea para sus fuerzas repartidas en Idlib y asegurarse de que tengan una protección independiente, incluso si Rusia prometiera, según la fuente, liderar un ataque futuro y recuperar el control aéreo total.
Es comprensible que Rusia no esté en Siria para desencadenar una guerra contra Turquía, miembro de la OTAN. Sin embargo, la OTAN no está en posición de apoyar a Turquía porque Turquía está ocupando suelo sirio. Sin embargo, la guerra en Siria ha demostrado lo poco que Occidente respeta el estado de derecho. Una posible intervención de Estados Unidos no está excluida con el objetivo de estropear la victoria de Rusia, Irán y Siria y sus planes para liberar al Levante de los yihadistas y unir al país. La posible intervención de EE. UU. Es motivo de preocupación para Rusia e Irán, particularmente cuando el presidente Erdogan sigue pidiendo intervención directa de EE. UU., Una zona de exclusión aérea de 30 km, una zona de amortiguación a lo largo de las fronteras con Siria, misiles de intercepción patriota de EE. UU. Para enfrentar al ruso fuerza aérea y una protección para los refugiados sirios desplazados internos (al mismo tiempo que organiza su partida a Europa).
Moscú mantiene buenos lazos comerciales y energéticos con Turquía, y el presidente Putin no está en Siria para comenzar una nueva guerra con los enemigos de Siria, Turquía, Estados Unidos e Israel, a pesar de la importancia del Levante para la fuerza aérea de Rusia (base aérea de Hmeymeem) y la marina (Tartous base naval).
Las opciones son limitadas: o Rusia acuerda apoyar la preparación del inevitable contraataque sirio en los próximos días y antes de una cumbre Putin-Erdogan, o la situación en Idlib hibernará y permanecerá estática hasta que los yihadistas ataquen Aleppo nuevamente en los próximos 6 -7 meses.
Revisado por: C.G.B. y Maurie Brasher
