argentina sufrió más de una ves en su historia el bloqueo total de sus puertos, y la pregunta es la siguiente, que se podría hacer o como se podría enfrentar una situación similar en la actualidad y con los recursos presentes...
La otra pregunta es, que recursos serían necesarios para poder lograr detener una situación como está y expulsar a la fuerza enemiga... saludos
las tecnologías cambia desde el siglo XIX hasta nuestros días.
el supuesto bloqueo se puede sufrir en los ingresos y egresos a los puertos y, también, las “rutas marinas” (Imaginemos autopistas en el medio del océano que habitualmente son transitadas por los buques de carga).
El defensa de las rutas marítimas propias es, de hecho, una de las principales misiones de toda armada moderna.
Una amenaza asociada puede estar dada por buzos que ingresen sigilosamente a un puerto y coloquen minas sobre los buques. Así que los puertos necesitan contar con lanchas, buzos e infantería capaces de detectar y rechazar este tipo de amenazas.
Un bloqueo podría consistir en que el enemigo mine los ingresos y egresos de los puertos.
la solución a este problema pasa por contar con buques dragaminas. Actualmente Argentina no tiene dragaminas.
Otro bloqueo podría consistir en submarinos enemigos bloqueando los puertos y/o las rutas marinas.
Para enfrentar esto se necesita de capacidades antisubmarinas. En primer lugar, submarinos de ataque, ya que la mayor amenaza que enfrente un submarino es otro submarino.
En segundo lugar, una flota de buques especializados en guerra antisubmarina. Esto consiste en una flotilla de 4, 6 o, idealmente, 8 fragatas antisubmarinas con igual numero de helicópteros antisubmarinos.
La tercera capacidad antisubmarina estaría dada por una flota de aviones de patrulla marítima. En el caso argentino, la base aeronaval de Trelew (Chubut) es la principal base para los aviones de patrulla marítima P-3 Orion.
No son excluyentes, sino que se necesitan los tres trabajando junta y simultáneamente para ejecutar una eficaz luchar contra las amenazas submarinas que intentaran bloquear nuestros puertos y rutas marítimas.
Hoy en día Argentina está extremadamente limitado en todo esto. Lo justo y necesario para que la tripulación entrene, pero sin capacidad real de luchar contra estas amenazas.
Hay que decir que en Malvinas las capacidades disponibles también fueron insuficientes. Hoy ni eso.
Otro bloque puede consistir en una flota de buques enemigos controlando los ingresos y egresos a los puertos y las rutas marinas.
Todo lo que se ha inventado para la guerra antisubmarina también aplica aquí, con la salvedad de que los sensores y armamentos son antisuperficie, en vez de antisubmarinos.
Ademas, se podría sumar los aviones de ataque equipados con misiles antibuques. Capacidad que supo tener Argentina, pero que ahora es inexistente.
Ahora bien, los bloqueos navales hoy en día no solo pueden darse durante una guerra, sino también durante una ”crisis” o ”tensión”. En este caso es más probable que el enemigo movilice buques para imponer un bloqueo. Y se lucha contra los mismos con buques propios.
Pero cambia el “lenguaje”. Ya no se utiliza el sigilo de cualquier guerra naval, sino que los buques levantan bien alto sus banderas. No se disparan misiles antibuques desde grandes distancias, sino que los cañones disparan al agua amenazantes salvas. Se producen abordajes y, en las peores circunstancias, embestidas entre los buques y otro tipo de “accidentes”.
Hay muchos ejemplos recientes, pero probablemente el más paradigmático sea la “guerra del bacalao”.
En este caso, la mejor defensa está conformada por todos los buques que se cuenten (destructores, fragatas, corbetas, etc.), siendo el más especializado el OPV, el patrullero.
En este tema Argentina está disfrutando de una importante modernización. Con la reciente incorporacion de los patrulleros de la clase ARA Bouchard.
Además, la prefectura (que en este tipo de tensiones y crisis también tendría participación) también cuenta con su flota de patrulleros de la clase Halcón.
Hoy en día un enemigo puede pretender bloquear un puerto simplemente destruyendolo con misiles cruceros, artillería y/o ataques aéreos. Así que los puertos necesitan contar con su propia artillería antiaérea y baterías de “artillería costera” (misiles antibuques lanzados desde camiones, por ejemplo), además de soldados de infantería.
Finalmente, si miramos los ejemplos del siglo XIX nos encontramos que parte del problema es que Argentina contaba con un solo puerto importante (Buenos Aires) y un solo ingreso y egreso (el Rio de la Plata). Para los enemigos de su momento era fácil bloquear esto.
Así una solución es acrecentar significativamente la cantidad de puertos a lo largo de toda las costas argentinas (Mar del Plata, Bahía Blanca, San Antonio Oeste, Usuahia, etc.), mejorar las conexiones entre esos puertos (rutas y ferrocarriles) para que si un puerto es bloqueado poder aprovechar otro y acrecentar la cantidad y calidad de los ingresos y egresos de los puertos (muchos de nuestros puertos solo cuentan con un único canal de ingreso y egreso).
Es decir, una de las mejores defensas pasa por estas inversiones en infraestructura y obras públicas que tambien contribuyen al crecimiento económico y desarrollo nacional.
No es casual, en este sentido, que los actuales puertos de Buenos Aires, Mar del Plata, Bahía Blanca y Rosario estén conectados por eficientes autovias y vías férreas. Justamente, previendo que un puerto tenga problemas, se utiliza otro.
El puerto de Usuahia, el único de aguas profundas del país, puede aportar varias ventajas en este sentido. Ya que los puertos de bajo calado son más fáciles de bloquear.