El problema de la escasez del agua en Crimea (ya de por sí extremadamente árida y muy sensible en épocas de sequias durante el verano) se resolvió en época de la URSS con la construcción del Canal de Crimea del Norte de 402 km de longitud que alimentaba una vasta red de embalses y ramales menores, y transformó las tierras secas de Crimea en campos de arroz que llegaron a producir hasta 120.000 toneladas anuales. Contaba con una capacidad para casi 300 metros cúbicos por segundo y unía el Dníeper no lejos de su desembocadura con el norte de Crimea.desde el 2014 que Crimea no tenía agua.... por lo visto mucho resultado no les dió esa táctica.
Fue, para la URSS un triunfo de la ingeniería y el trabajo que rivalizó con la construcción de la línea principal de ferrocarril Baikal-Amur de más de 4.300 kilómetros de longitud.
Durante décadas, abasteció de agua a Crimea, incluso después de la desintegración de la Unión Soviética.
Pero desde 2014 y después de la toma del total de Crimea por Rusia, Ucrania bloqueó el flujo del canal hacia Crimea, cortando el canal (primero con una barrera de tierra y luego construyendo una presa de hormigón) en Kalanchak a unos 90 kilómetros al sur de Jersón que hasta ese momento satisfacía entre el 80 y 90% de las necesidades de agua de la región.
Como resultado, los campos de Crimea se secaron y sus ciudades se vieron obligadas a racionar el agua.
La capital Simferópol fue entre las ciudades la más afectadas por la escasez de agua y salvo en el centro administrativo en el resto de la ciudad el agua estaba disponible solo durante tres horas en la mañana y tres en la noche. Para el resto de las localidades de la península y sus dos millones y medio de habitantes la situación se volvió extremadamente difícil y el agua se volvió un elemento de supervivencia.
El bloqueo del canal por parte de Ucrania provocó una ronda de intentos de conjurar agua para Crimea. Las autoridades rusas se habían comprometido a construir plantas de desalinización, y Putin llegó a decir que “puede haber grandes reservas de agua dulce” debajo del mar de Azov, pero nunca quedó en claro si se podían extraer de manera útil.
Mientras tanto, las autoridades rusas denunciaron que por culpa del bloqueo ucraniano la extensión de la tierra irrigada en Crimea se había reducido en un 90 por ciento desde 2014.
Ello llevó a Rusia a que en julio de 2021 presentara una demanda ante el principal tribunal de derechos humanos de Europa.
Pero los problemas críticos de faltante de agua en Crimea (agravados por la llegada masiva de tropas rusas previa a la invasión) se solucionaron de la noche a la mañana.
Cuando las tropas rusas destruyeron la represa que había bloqueado en canal de agua el mismo 24 de febrero de este año, el primer día de la invasión. El abastecimiento de agua a Crimea se aseguró totalmente con la toma de Jersón el 2 de marzo y la construcción de acueductos adicionales.
Difícilmente Rusia esté dispuesta a perder el control de la región de Jersón. No es una posición militar más por sí misma. Representa el suministro o no del agua que necesita toda la península de Crimea.