Una cosa es guerra de desgaste. Otra cosa es profunidad estrategica. Cuidado con mezclar conceptos.
Argentina es uno de los países más grandes del mundo, así que tiene profundidad. Si puede, o no, utilizarla y cómo, es otro cantar.
Dada su heterogeneidad, es probable que esa profundidad no sea uniforme. En algunos lugares más. En otros menos.
Guerra de desgaste sólo es perdurables en países altamente industrializados y con acceso a recursos estratégicos y/o que reciben apoyo de países altamente industrializados.
De todos los países sudamericano, sólo Brasil destaca en su nivel de industrialización.
Argentina no es un país altamente industrializado. Pero tampoco es un país desindustrializado. No tiene capacidades soberanas para una guerra de desgaste. Pero tiene más capacidades que otros.
En principio, sabido esto, Argentina probablemente se prepare para guerras lo más breves y localizada posible. Con la esperanza que tan rápido como comienzan se allana una salida diplomática. Evitar a toda costa entrar en una guerra de desgaste. Pero esa aspiración a la brevedad y localidad quizás peca de optimismo.