Se moviliza toda la región por la crisis en Bolivia
Hoy se hace una cumbre en Chile; va Cristina Kirchner
Por Carlos Vergara
Corresponsal en Chile
SANTIAGO, Chile.? Con el fin de fijar una postura común en torno a la peor crisis política que vive Bolivia desde la llegada de Evo Morales al poder, casi todos los presidentes de la región se reunirán hoy de urgencia en esta ciudad a pedido de la mandataria de Chile, Michelle Bachelet.
Según trascendió ayer, el encuentro de los países integrantes de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) habría sido convocado por Bachelet después de una advertencia de Morales de que se estaría fraguando un golpe de Estado en Bolivia, en donde los violentos choques que sacuden al país ya han dejado cerca de 30 muertos.
La cita tendrá lugar en el Palacio de la Moneda, sede de la presidencia, a las 16.
Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez; de la Argentina, Cristina Kirchner, y de Ecuador, Rafael Correa ?en ese orden?, fueron los primeros en confirmar su asistencia. Posteriormente se sumaron los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva (pese a que dijo que estaba poco convencido de la necesidad de la cumbre); de Colombia, Alvaro Uribe; de Paraguay, Fernando Lugo, y de Uruguay, Tabaré Vázquez; además del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el chileno José Miguel Insulza. El atribulado Evo Morales, en tanto, sólo ratificó anoche su viaje.
"El presidente va", dijo muy escuetamente el vicepresidente Alvaro García Linera, durante una reunión de prensa en la casa de gobierno.
El presidente del Perú, Alan García, desistió de participar al argumentar una próxima gira oficial a Brasil, y su lugar será ocupado por su canciller, José Antonio García Belaúnde. Por su parte, los líderes de Guyana, Bharrat Jagdeo, y de Surinam, Ronald Venetiaan, hasta ayer no habían enviado una respuesta a la invitación para tratar la primera crisis de la Unasur.
En una misiva enviada directamente a Bachelet, firmada por el gobernador de Tarija, Mario Cossío, los prefectos de las regiones opositoras (Beni, Pando, Santa Cruz y Tarija) solicitaron formalmente que se les permitiera intervenir como bloque en la reunión de Unasur. La carta, sin embargo, no había recibido anoche respuesta oficial.
La oposición boliviana está resistiendo por la fuerza el plan de Evo Morales de impulsar una Constitución socialista que dé marco legal a la nacionalización de la economía y otorgue más poder a la mayoría indígena. Las protestas, que además buscan que el gobierno devuelva un impuesto a la renta petrolera ya han dejado 30 muertos y provocado interrupciones en el suministro de gas a Brasil y la Argentina.
"No podemos permanecer impávidos", dijo Bachelet a anunciar la convocatoria, e hizo también un llamado a acercar posiciones y a mantener una actitud "positiva, constructiva, que permita acercar las partes".
"Queremos que este esfuerzo que hará Unasur tenga una continuidad con lo que va a hacer la OEA para instalar una mesa de diálogo, para que las partes puedan llegar a una solución, respetando la institucionalidad y constitucionalidad de un gobierno legitimado por el referéndum convocado por el presidente Morales , complementó ayer el canciller chileno, Alejandro Foxley.
Según el vocero presidencial, Francisco Vidal, están tomadas todas las medidas de seguridad para proteger a los presidentes y representantes nacionales.
El diario chileno El Mercurio reveló ayer que la premura de Bachelet en la organización de esta cita se debió a la existencia de un informe de inteligencia de Bolivia que daría cuenta de un inminente complot para derrocar a Evo Morales a través de un golpe de Estado por parte de la oposición boliviana.
La información le habría sido entregada telefónicamente por el propio mandatario el viernes por la noche. En diálogo con LA NACION, fuentes de cancillería recordaron además la inusual visita realizada por la primera dama de Bolivia y hermana de Evo, Esther Morales, recibida por Bachelet el martes pasado.
Ayer, durante la transmisión de su programa de radio semanal Aló Presidente , Hugo Chávez se refirió a este supuesto plan golpista. "Si a Evo llegan a derrocarlo, no me voy a quedar de brazos cruzados, como hoy incluso no estamos de brazos cruzados. Ya en este momento estamos actuando para salvaguardar la paz en Bolivia. ¡Estoy dispuesto a morir por Bolivia!", dijo Chávez (ver Pág. 3).
"Ellos [los estadounidenses] siguen creyendo que van a atropellar a un país y los demás vamos a estar de brazos cruzados. Ahora no, somos un grupo de gobiernos. Mañana iremos a Chile y diremos nuestras verdades al mundo", afirmó Chávez.
Agregó que el encuentro de hoy en Chile es "una buena señal de que ya en América latina las cosas no son como cuando derrotaron a Salvador Allende en Chile, en 1973".
Por el contrario, uno de los presidentes que más distancia tomaron inicialmente de la convocatoria fue Lula, quien estaría molesto por la polarización regional que ha provocado el conflicto boliviano, en medio de fuertes críticas de Chávez y Morales contra Estados Unidos y las expulsiones de los embajadores norteamericanos en La Paz y en Caracas.
A ello se suma el rechazo de Evo Morales a su ofrecimiento de interceder en la crisis boliviana. "Es importante tener claro que no tenemos derecho a tomar ninguna decisión sin el apoyo del gobierno y de la oposición de Bolivia, pues son ellos los que deben dar el marco para nuestra participación. De otro modo, será una injerencia en otro país y eso Brasil no lo hará bajo ninguna hipótesis", expresó Lula.
Ayer, el vocero de Bachelet insistió en que el tema de debate "será Bolivia y no Estados Unidos".
En la vereda contraria, el colombiano Alvaro Uribe, quizás el más cercano a Washington, pidió a los mandatarios integrantes de la Unasur aunar voluntades y concretar "un mensaje de prudencia" y "de apoyo a la institucionalidad democrática" en Bolivia.
Varios analistas advertían ayer que podría haber dificultades para lograr un documento de apoyo a Bolivia que mantuviera al margen del conflicto a Estados Unidos.
Críticas de la oposición
SANTIAGO, Chile (AP).- La oposición chilena criticó ayer la convocatoria a una cumbre de presidentes para discutir la crisis en Bolivia. "Si los bolivianos no son capaces de arreglar este asunto, yo no veo cómo podríamos arreglarlo a control remoto", dijo Carlos Larraín, presidente de Renovación Nacional. El diputado de Unión Democrática Independiente, Marcelo Forni, advirtió que Bachelet "corre un riesgo en su imagen. En estas cuestiones es mejor estar solo que mal acompañado", dijo.
La cumbre
Los asistentes
Los presidentes de Chile, Venezuela, la Argentina, Brasil, Ecuador, Colombia, Paraguay, Uruguay y Bolivia. La ausencia más destacada será la del mandatario peruano, Alan García, que será representado por su canciller.
Por qué se reúnen
Esta primera cumbre de la Unasur ha sido convocada de urgencia por la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, como presidenta pro témpore para buscar soluciones al conflicto que tiene en vilo a Bolivia.
Qué es la Unasur
La Unión de Naciones Sudamericanas nació en mayo pasado, en Brasilia. Está compuesta por 12 países de la región que buscan una mayor integración política y social