Sin caja, el Gobierno tienta a los privados para desarrollar aviones "100% argentinos"
La creación de clústeres de fabricantes en Córdoba, Mendoza y Buenos Aires es seguida de cerca por la Subsecretaría de Industria. Y ya existen proyectos para el futuro desarrollo local de aviones de transporte. Se incorporarán piezas fabricadas en el país a unidades de Aerolíneas y Austral
A casi un año de la estatización de Aerolíneas Argentinas y Austral, la promesa oficial de aprovechar ese proceso para fomentar la producción aeronáutica local parece revivir.
Así como existe el interés por contar con un automóvil 100% argentino, ahora acaba de ganar posiciones la intención de desarrollar también un avión “Made in Argentina”.
Como primer paso, el Gobierno aprobará, en dos semanas, una resolución que establece la provisión de accesorios y piezas para las aerolíneas estatizadas por parte de desarrolladores locales.
Ya en segunda instancia, el Ejecutivo –siempre a través de la Subsecretaria de Industria– seguirá de cerca la evolución de los distintos clústeres de fabricantes que se están conformando en la provincia de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, que impulsan el sueño de volver a colocar al país entre los principales actores aeronáuticos de la región.
Precisamente el martes se formalizó, en Córdoba, la puesta en marcha de un polo de 28 empresas que buscará colocar desarrollos en la también nacionalizada fábrica de aviones de la provincia y en el mercado exterior.
En sintonía, ese mismo día, en las instalaciones del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), alrededor de diez empresas bonaerenses reafirmaron sus planes para establecer un clúster local. Y mantuvieron reuniones con representantes del Banco Nación a fin de negociar futuras líneas de crédito tendientes a impulsar la producción.
Precisamente, desde el inminente polo de la provincia de Buenos Aires, adelantaron a iProfesional.com la intención de avanzar con proyectos que promuevan la fabricación de aviones de transporte nacionales.
“Hay condiciones para fabricar un avión. Pero no se puede avanzar con eso hasta tanto no se visualice un mercado. Hay que pensar en exportar más allá del mercado interno. Por lo pronto, el clúster arrancaría con la fabricación de aeropartes para luego sí desarrollar aviones y helicópteros”, comentó a este medio Roberto Lattanzi, el funcionario del INTI a cargo del polo bonaerense.
“Lo valioso será combinar las distintas tecnologías de cada empresa para la concreción de un modelo común. Igualmente, recién estamos en el inicio. También se podría utilizar el clúster para vender algunas partes a la brasileña Embraer”, agregó.
La reunión en el INTI también contó con la presencia de funcionarios de la Subsecretaría de Industria, en lo que puede interpretarse como una muestra del interés con el que el Gobierno sigue el intento de los privados por expandir el escenario aéreo local.
Lattanzi también brindó detalles del acuerdo por el cual distintas proveedoras argentinas brindarán asistencia a Aerolíneas y Austral. “El convenio comenzará a operar en pocas semanas. Ya se mantuvieron reuniones con la empresa y estamos efectuando estudios para nacionalizar partes”, dijo.
Y amplió: “Si bien hacer una turbina es complicado por cuestiones de costo y escala, se podrán ir aportando distintos materiales y accesorios para los aviones. En determinados casos se podrán elaborar algunas piezas. Y también se colaborará en lo que es mantenimiento y capacitación técnica”.
Córdoba
La intención de volver a desarrollar una aeronave 100% argentina, como en otras décadas lo fueron los modelos militares Pulqui o el Pucará, parece sumar posibilidades tras la estatización de la fábrica de aviones, que hasta agosto estuvo en manos de Lockheed.
En esas instalaciones, se realizará la potenciación del avión Pampa (otro desarrollo de origen argentino), que dejará de ser sólo una unidad de entrenamiento y comience a operar como arma de ataque, según adelantó la ministra de Defensa Nilda Garré.
Además, es muy probable que se desarrolle un avión de entrenamiento básico en sociedad con la chilena ENAER, también en Córdoba. Este modelo estará basado en el Pillán trasandino y buscará reemplazar los aviones Mentor que la Fuerza Aérea utiliza como herramienta de adiestramiento.
Así, y con la conformación del clúster local, Córdoba aparece como uno de los estandartes que podría volver concreto el desarrollo de una aeronave de transporte nacional.
“Hay un grupo de 20 empresas que conformaron el primer acta del clúster. Y otras 8 que ya se acercaron para ingresar”, precisó a iProfesional.com Luis Aguirre, docente universitario e integrante de la comisión que promueve el clúster aeronáutico de Córdoba.
“La posibilidad de incorporar partes cordobesas a los aviones que se arreglen acá es una de las primeras cosas que se solicitó desde el clúster que estamos conformando. Mantuvimos reuniones con la Secretaría de Industria y esperamos que eso se lleve a cabo porque sería básico para la supervivencia de las empresas locales”, aseguró.
Las firmas de Córdoba vienen concretando numerosos encuentros con varios polos aeronáuticos europeos a fin de ganar experiencia y, en simultáneo, adoptar técnicas de fabricación que aseguren la competitividad en el mercado externo.
Entre las compañías que promueven la fabricación de partes para aviones se destacan Pistones Persan y Prodismo que, de un tiempo a esta parte, efectúan montajes para aeronaves en Brasil.
Mendoza
Asimismo, Mendoza es otro de los destinos que, producto de su tradición en materia de desarrollos aéreos, podría aportar conocimiento y capacidad de fabricación para el desarrollo de nuevos aviones y aeropartes. A su favor cuenta la creación, también en estos últimos meses, de un clúster de aeropartistas.
En este escenario, Ulderico Pace, titular de Aeropac y promotor del polo mendocino, aseguró que el vínculo entre fabricantes permitirá, entre otras cosas, aceitar
la comercialización de la aeronave para entrenamiento civil que Aeropac planea lanzar a mediados del año próximo.
“En ese caso, ya estamos finalizando los utilizajes y se comenzó la fabricación. Planteamos una red de comercialización a nivel mundial, con un representante en EE.UU. que coloque nuestra producción en ese país”, dijo.
Por estos días,
Aeropac también trabaja en el desarrollo de un avión para uso agrícola. “Todo esto se hace con recursos propios, de la mano de otros negocios que tiene la empresa que aportan para desarrollar la actividad aeronáutica. Falta apoyo crediticio y gubernamental”, expresó.
Con una amplia experiencia en el sector, Pace trabajó hace más de 10 años en el diseño y la fabricación del CBA 123, un avión de pasajeros que, construido a medias entre la Argentina y Brasil, finalmente sólo resultó comercializado por Embraer bajo el nombre de 145.
Con la vista puesta en un potencial nuevo avión argentino de transporte, ¿se podría retomar la fabricación del CBA 123? “Sí, se podría. Pero para eso tendría que haber una respuesta política. Hoy hay muchos inconvenientes para desarrollar aviones. Tendría que haber apoyo decidido y en el tiempo”, aseguró Pace.
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