Están bajo la lupa "piqueteros", ambientalistas uruguayos y grupos radicales
Uruguay "vigila" el accionar de un millar de opositores a Botnia
Uruguay vigila celosamente el accionar, tanto de los asambleístas y gobernantes entrerrianos, miembros de grupos radicales argentinos y uruguayos, que se manifestaron públicamente contrarios a la instalación de la planta de Botnia en Fray Bentos. Existe una nómina elaborada por los servicios de seguridad del Estado de alrededor de un millar de personas a las cuales no se les pierde pisada a fin de prevenir cualquier tipo de incidente en territorio uruguayo.
MARCELO BUSTAMANTE
Del lado oriente del puente General San Martín, en territorio uruguayo, ya los tienen "fichados". Nuestras autoridades ubicadas en Fray Bentos saben quiénes son los denominados "piqueteros" de Gualeguaychú; conocen sus nombres, su perfil y qué actividad desempeñan. Cada vez que cruzan el puente, se enciende una luz de atención, y se acciona un mecanismo de control, para determinar los movimientos de estas personas.
En verdad hay una nómina, en la que se sabe hasta quién es quién dentro de la asamblea de Gualeguaychú. Incluso, el monitoreo de quienes están en contra de Botnia no sólo pasa por los activistas de Entre Ríos, incluidos en Concordia y Gualeguaychú, sino también de todos los gobernantes provinciales. Además, las autoridades uruguayas tienen bajo la lupa el accionar de grupos radicales argentinos y uruguayos, llámese integrantes de los grupos Fogoneros, de nuestro país, y Quebracho, de la vecina orilla. Hasta, incluso, integrantes de la CTA argentina.
Entre las posibles personas que puedan incidir en alguna acción contra Botnia, también incluyen a los miembros del grupo ambientalista uruguayo Guayubira, y la Asamblea del Callejón, que se han manifestado contra el funcionamiento de la planta de celulosa.
Todos ellos fueron identificados por quienes están a cargo de la seguridad en nuestro país. Según se pudo saber, el listado de nombres, entre "piqueteros", ambientalistas de ambos lados del río, y grupos de personas que son opuestos a Botnia, llegan al millar. Una vez que estas personas cruzan el puente General San Martín, en Uruguay se enciende una luz de atención, y se acciona un mecanismo de control y seguimiento.
Incluso, algunos asambleístas de Gualeguaychú manifestaron tener la convicción de que las autoridades uruguayas ya los tienen "registrados". Dicen que si van a ingresar a Uruguay, tienen múltiples opciones para "eludir" el control y seguimiento que hacen en Fray Bentos. "Si queremos ir a Uruguay para reunirnos con alguien podemos hacerlo por Paysandú, Salto o Montevideo", dijo uno de los más reconocidos asambleístas de Gualeguaychú. Incluso, Jorge Fritzler manifestó que la semana pasada estuvo en territorio uruguayo, pasando totalmente desapercibido. Fue hasta el norte, y desde Uruguayana ingresó a Uruguay, dirigiéndose a la ciudad de Salto. Por su parte, Alfredo de Angelis mantuvo una reunión con productores contrario a la instalación de Isusa, y sin pasar por Fray Bentos, llegó a Soriano.
Por día, pasan por el puente de Fray Bentos unos 50 vehículos provenientes de Gualeguaychú, mayormente con chapa Argentina.
Acciones contra Botnia
En tal sentido, Alejandro Añón, capitán de navío y jefe de Relaciones Públicas de la Armada informó que las autoridades uruguayas están estudiando las posibles hipótesis sobre acciones que los asambleístas de Gualeguaychú emprendan contra Botnia. No descartan nada. Pero todo apunta a estar atento, cuando comience a producir la planta de Botnia, ya que se entiende será un hecho que puede marcar un mojón en este conflicto.
Por el momento, la Armada, el Estado Mayor y la Prefectura están identificando "los actores que juegan", y "trabajando sobre distintos escenarios", para adoptar medidas de prevención.
Las autoridades se basan en hechos que ya ocurrieron, y determinar lo que físicamente son capaces de hacer, y lo que no.
Los asambleístas ya manifestaron arriba del puente; Greenpeace efectuó una acción sobre el propio río, y hasta hubo incursiones en bote.
Añón afirmó que se está cerca de una etapa en la cual se debe alertar al decisor para la adopción de alguna medida. Dijo que habrá que esperar el devenir de los acontecimientos.
Aclaró que la Armada no elaboró ningún documento sobre el diagnóstico de la situación y sugerencia para la adopción de medidas. Sí hubo reuniones en la que se analizó esta situación a fin de poder efectuar mejor la tarea preventiva. Entre esas acciones puede incluirse una readecuación del personal y de las embarcaciones para la vigilancia fluvial, y una coordinación con otros organismos de seguridad nacional, e incluso con la marina argentina.
Añón destacó que el 90% de las acciones emprendidas por Prefectura y la Armada son jurisdiccionales, es decir que cuentan con la orden de un juez, a quien se le informa de los procedimientos. *