Pilatus Aircraft Ltd acaba de rechazar el Request for Proposal (RfP) para el concurso de la Fuerza Aérea de Turquía para el suministro de entrenadores, concurso valuado en aproximadamente 500 millones de dólares, en donde también han sido invitados a participar Raytheon, KAI y Embraer.
La negativa suiza a participar de éste programa con su Pilatus PC-21 se basa en la violación de derechos humanos por parte de Turquía en relación a los pueblos armenios, especialmente en el genocidio llevado a cabo entre los años 1915 y 1921. Tal genocidio fue reconocido por Suiza en el 2003 y a partir de entonces todas las exportaciones de armamento hacia Turquía se detuvieron, figurando éste país en la "lista roja" de los exportadores suizos.
De éste modo Pilatus rechaza la posibilidad de vender sus productos basados en cuestiones políticas, algo que no es nuevo ya que durante la rebelión mexicana de Chiapas, Pilatus se negó a venderle a México una importante cantidad de aeronaves Pilatus PC-9. Sin embargo Suiza no ha sido tan neutral y defensora de los DDHH tal como ahora aparece, hay muchos países que adquirieron aeronaves PC-7 y PC-9 y que registran claros antecedentes de violación a los DDHH, tal como Angola, Croacia, Botswana e incluso Chile ya que los PC-7 de la Aviación Naval fueron adquiridos durante plena dictadura.
Veremos qué tiene más peso, si una declaración de DDHH sobre hechos sucedidos hace casi 90 años atrás o la ahogada situación económica de Pilatus que aún no logra imponer en el mercado su PC-21. Si bien en cierto que se trata de delitos de lesa humanidad, hoy en Turquía no queda ningún responsable de dicha matanza y durante 85 años Suiza le suministró armamento sin ningúna contemplación. Todo un tema.
La negativa suiza a participar de éste programa con su Pilatus PC-21 se basa en la violación de derechos humanos por parte de Turquía en relación a los pueblos armenios, especialmente en el genocidio llevado a cabo entre los años 1915 y 1921. Tal genocidio fue reconocido por Suiza en el 2003 y a partir de entonces todas las exportaciones de armamento hacia Turquía se detuvieron, figurando éste país en la "lista roja" de los exportadores suizos.
De éste modo Pilatus rechaza la posibilidad de vender sus productos basados en cuestiones políticas, algo que no es nuevo ya que durante la rebelión mexicana de Chiapas, Pilatus se negó a venderle a México una importante cantidad de aeronaves Pilatus PC-9. Sin embargo Suiza no ha sido tan neutral y defensora de los DDHH tal como ahora aparece, hay muchos países que adquirieron aeronaves PC-7 y PC-9 y que registran claros antecedentes de violación a los DDHH, tal como Angola, Croacia, Botswana e incluso Chile ya que los PC-7 de la Aviación Naval fueron adquiridos durante plena dictadura.
Veremos qué tiene más peso, si una declaración de DDHH sobre hechos sucedidos hace casi 90 años atrás o la ahogada situación económica de Pilatus que aún no logra imponer en el mercado su PC-21. Si bien en cierto que se trata de delitos de lesa humanidad, hoy en Turquía no queda ningún responsable de dicha matanza y durante 85 años Suiza le suministró armamento sin ningúna contemplación. Todo un tema.